2. "Idiota de mierda"

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Page Roberts

Llegué a casa y abrí con la copia que tengo de las llaves

"He llegado, madre", dije en voz alta con esperanza de que me respondiera, lo que no era normal en ella.

Silencio, era todo lo que habitaba en aquel hogar. Subí directamete a mi habitación, tiré mi bolso sin saber donde cayó y me acosté en mi cómoda cama, saqué mi teléfono móvil y entré un rato a twitter; después de 5 minutos mi teléfono vibró y recibí un mensaje, era de mi madre.

-He salido con un amigo, hay pizza en él refrigerador por si te da hambre-

-Cuídate, Page-

Mandé un Okay y bloqueé mi teléfono. Mi madre y yo no nos llevábamos muy bien, ella es una de esas madre exigentes en absolutamente todo, lo que hacía que yo diera todo de mí en cada cosa que hago, incluyendo él instituto, por otro lado, mi padre tiene otra familia con una mujer a la que ama, supongo, por lo que ya no se digna ni siquiera en llamarme.

Oí un toqueteo en la ventana de mi habitación e inmediatamente me quedé helada. Casi de inmediato un ladrillo con una nota pegada atravesó mi ventana y grité tan fuerte que los perros empezaron a ladrar.

"¿¡Qué cárajo, quién fué el idiota de mierda que tiró esta mamada¡?", grité exasperada. Estaba en total shock, qué debo hacer, esto debe ser obra de un vagabundo. Al no recibir una respuesta deicidí leer la nota que había pegada

-Estás tan sola que hasta da miedo, seguramente afuera con tu amigo el rebelde cliché te divertirás más.-

-Jake él perro. Xoxo

Sin pensarlo dos veces salí como alma que manda él diablo de la casa con un bate de béisbol a matar al desgraciado de Jake, lo divisé detrás de un arbusto y me acerqué silenciosamente por su espalda y le di tan fuerte con él bate en la cabeza que se desplomó frente a mí, entré en pánico y dejé caer él bate en su cabeza por lo que él emitió un sonido extraño.

Estaba aterrorizada, nunca había llegado tan lejos, estoy totalmente loca, cómo pude hacer eso , definitivamente necesito ir a un psicólogo; lo arrastré de los brazos hasta entrar a la casa , lo subí golpeándolo un par de veces por las escaleras hacia la segunda planta a mi habitación y lo metí debajo de mi cama.

"Dios mío, ya debe estar muerto de tantos golpes que le dí", susurré para mí misma. "Y si está muy grave, Dios, que voy a hacer"

Pasé una hora meditando lo que había hecho y buscando en Google como deshacerme de un muerto en dos horas hasta que despertó él maniático

"¿¡Qué me has hecho, loca del demonio!?, escuché al retrasado gritar desde debajo de mi cama. Inmediatamente salió y me miró con cara de espanto, este pendejo se atrevía después de los que hico a llamarme loca a mí.

"Es es lo que te ganas por andar de vago rompiendo ventanas, ¿no podías enviar un mensaje?, idiota de mierda", grité a punto de darle un manotazo pero él me detuvo.

"No tengo un móvil, pequitas, ¿qué querías que hiciera?", preguntó como si fuera lo más normal del mundo.

"!Maldito vago¡, podrías haber entrado por la puerta o enviarme un mensaje por facebook, pendejo". Dije a punto tirarlo por la ventana ya rota por su maldita idiotez.

"Vete de mi casa, ahora".

"No discutiré eso, también quiero salir de aquí, pequitas, así que te veo mañana en él instituto", dijo como si no pasara nada,

"Eso se ve muy mal, deberías arreglarlo", comentó viendo la ventana", para luego abrirla y saltar por ella. Descarado de mierda como hace eso, ya verá como le va mañana, maldito idiota, Asomé la cabeza y lo ví en la esquina caminando como si le faltara una pierna, qué diantres pensaba, como va a saltar de una segunda plata, no pude evitar reír al ver él resultado de su demencia.

Idiota de mierda.

Me quedé dormida después de un rato reflexionando sobre todo esto. Por qué lo habrá hecho, tiene algún problema o es que le pica él culo, me ha dado un susto de infierno y se va como si nada, imbécil, no me arrepiento de haberle dado con él bate, debí haberlo castrado mientras estaba desmayado.

"Page, baja de inmediato", gritó mi querida madre desde la planta baja.

"Enseguida bajo, madre", grité levantándome de un salto y bajé las escaleras como rayo, mi madre no era de rogar, sólo llama una vez, si no acudo, probablemente no vuelva ver la luz del sol.

"Por qué está escrito en la ventana, Vieja de mierda", interrogó mi madre con un claro enojo en su cara. Casi me cago de miedo, literal.

"No lo sé madre, me he quedado dormida de seguro fue un vagabundo", dije rascando mi nuca, había una mueca de desagrado en la cara de mi madre. "Y cuando llegué encontré la ventana de mi habitación rota, de seguro fue él mismo vagabundo «Jake», si quieres llamo a la policía" dije lo más creíble que se me ocurrió.

"No te preocupes, Page, sólo me encargaré de arreglarlo, tu sigue esrudiando", dijo en un semblante serio.

"Seguro madre, eso haré", dije mirándola a los ojos, eso la mantenía calmada.

Subí las escaleras rápidamente y entré a mi habitación, encendí la computadora y busqué algo de música buena, me decidí por Photograph de Ed Sheeran. Subí todo él volumen y caí en los brazos de Morfeo.

PerdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora