Genesís

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Querido chico de los ojos rasgados.
Samuel caminaba por los pasillos de la escuela. Rubén, Miguel, Alex, Borja y el Reían por cualquier tontería que se les venia a la mente.
—¿Jugamos cuanto a que no?—Gritó Borja.
—Luzu, eso es de niños de primaria.
—¡Yo mando aquí, así que vamos a jugar "Cuanto a que no"!—Respondió con aires de superioridad.
—Idiota—Rió Samuel mientras se sentaba.
—Yo primero—Dijo Alex.
Miró a todos y luego de pensar un rato habló.
—Rubén, ¿Cuanto a que no besas a Melo?
—Cuenten—Habló Mangel con voz calmada—...¡ahora!
—¡Dos!—Gritaron al mismo tiempo.
Todos rieron, burlándose de Rubén.
—¡Mierda!—dijo tapándose los ojos con las manos.
—¡Melo!, ¡Melo!, ¡Melo!—Gritaban todos.
Rubén corrió hasta donde estaba ella y le toco el hombro. Rubén le hablo por unos segundos con ella y luego la besó, pero en lugar de que Melo le siguiera el beso, lo quitó y besó a una chica a su lado.
Rubén no sabia si sentirse ofendido u halagado.
—Miguel, ¿Cuanto a que no besas a Rubén?—Dijo Samuel.
—Cuenten—Habló Borja—¡Ya!
—Uno—Gritó Miguel
—¡Cuatro!—Dijo Alex.
Borja fingió tristeza ante eso.
—Samuel, ¿Cuanto a que no vas y empujas a el chico de mochila verde que va caminando allá?—Dijo Borja Riendo.
—Cuenten—Dijo Alex—¡Ya!
—Cuatro.
—Cuatro.
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Samuel Caminó hasta donde estaba el chico y vió su rostro, tenía los ojos rasgados, y después de plantearse la acción lo empujó lo suficiente como para que se tropezara y un trabajo suyo cayera a el lodo y se estropeara por completo.
El chico volteó lentamente.
—Si hubieses querido me habrías golpeado, pero no hoy.
El chico tomó varias de las hojas y las tiró a la basura, Samuel se sintió como alguien Horrible.
N/A
Gracias por leer.
Forever yours.
Edd.

Querido chico de los ojos rasgados | WigettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora