Renata tomó su celular y mandó un mensaje a Alon (véase conversaciones en Alonata), después de decirle que se "rompió la pierna" siguió acostada en su cama. Le llegó un mensaje diciendo "Estoy a unas cuadras". Se levantó y apagó las luces, vio que todo estuviera en orden", se escuchó como movían aquella figura de porcelana, a los segundos el ruido de la puerta se abría.
—Reny... Beb... —se sorprendió al ver todo.
—En realidad nunca me rompí una pierna... Me rompí una uña pero no es tan grave —Dijo detrás de Alonsoy riendo un poco.
—¿Por qué hiciste esto?
—No se, no siempre tiene que haber algo para celebrar ¿o si? —se acercó y lo abrazó, cosa que él correspondió y le dio un beso en la frente.— Te he extrañado mucho
—Yo también princesa.
Y si se imaginan a una Renata muy bien arreglada, con vestido, maquillada y zapatillas estan demasiado equivocadas, ella estaba con un pantalón que parecía pans, unos converse y una blusa un poco holgada, tenía el cabello recogido y con poco maquillaje, como para quedarse en casa viendo películas.
En la mesa había pizza, flan, refresco, agua, algo no tan elaborado pero bonito y romántico, obviamente no podían faltar, velas.
—¿Lo preparaste tú?
—Si, me costó un poco.
—¿Y tu familia?
—Salió de viaje hoy en la madrugada, pero yo tenía cosas importantes en la escuela, así que buehh me quedé
—Ohhh...
Cortaron la pizza, Renata espero a que Alonso la probara
—Quedó muy buena
—¿Ya me puedo casar? —preguntó fingiendo emoción.
—No, aún no
—Es que cuando una persona cocina bien se le dice que ya se puede casar.
—Ya no quiero que cocines
Rieron y siguieron disfrutando de la "comida", Alonso le platicaba sobre su familia, algunas cosas de CD9 y Renata ponía mucha atención. Dieron 9:30 pm y era la segunda etapa de la noche, videojuegos para que Alon se desestresara un poco. Juntaron los platos y vasos sucios y los llevaron al lavabo. Se dirigieron a la sala, se sentaron en el piso, Renata prendió la consola de x-box y jugaron carreras, Fifa, entre otros juegos
—Un gol más y soy ganador —dijo Alonso mientras apretaba los botones y movía las palancas del control.
—Ya veremos si te dejo —hacía la misma acción de Alonso
—Espera —pauso el juego.
—¡No! ¡Maldito! Ya te iba a meter gol —reclamó haciendo un puchero
—Perdón mi amor —le dio un beso— ¿Qué me das si yo ganó?
—Te golpeo —sonrió.
—Ahora que estoy reaccionando, me dijiste maldito —dijo sorprendido— Ya no te quiero
—Si lo haces
—No, ya no, porque en realidad te amo mucho
Ella se abalanzó hacía él y repartió muchas besos en toda su cara para después parar en sus labios, no era una escena/ambiente "caliente" era algo tierno con las intenciones más inocentes posibles
—Gracias
—¿Por qué?
—Por aparecer en mi vida y no salir de ella