Tus Ojos

El amor a primera vista si existe, y yo me enamoré con solo mirar tus ojos. De esa forma tan peculiar que tienes de mirar con esos intensos ojos color café.

Creo que al menos el 60% de la población humana posee ojos marrones. Pero, los tuyos... son diferentes a todos ellos. Son tan puros, profundos, son tan Mortalmente Embriagadores...podría pasarme toda la eternidad observándolos sin aburrirme, y eso que me se cada detalle de tu iris café y miel, el cual desborda un mar de belleza insólito, que inquieta a cada célula de mi ser. Cada vez que los veo mi corazón da un brinco y se acelera desesperadamente, mis neuronas dejan de hacer sinapsis, comienzo a sudar, y algo dentro de mi estomago comienza a revolotear.

La mayoría de las chicas prefieren ojos Azules o Verdes... yo en cambio te donaría mi herido corazón, solo por ver esos ojos marrones más de cerca.

Tus ojos me llaman, me reclaman, me hipnotizan. Me están volviendo loca. Tus ojos son una especie de heroína para mi, los necesito como al oxígeno. Y se está volviendo algo enfermizo. Déjame contarte que descubrí unos días después de encontrarte aquella vez, que tengo el súper poder de mirar tus ojos, y controlarme, para no salir corriendo a besarte, besar esos carnosos y sonrojados labios. ¡Y vaya que me es necesario!.

Tu cabello oscuro, como una noche sin estrellas, peinado desordenadamente hacia arriba, con uno que otro mechón escurridizo resbalando deliberadamente por tu frente, las líneas perfectas de tus facciones, tu piel inmejorable de color canela, sumado con la pureza y profundidad de tus ojos, suelen golpearme en la cara con una fuerza inminente dejándome desconcertada por tanta belleza unida. Pareciera ser que Dios te quiso mucho, y te bendijo con tantas perfectas cualidades sin igual. Y se lo agradezco todos los días, cada vez que te veo.

Te juro que intente olvidarte. Sí, lo intente. Con todas mis fuerzas. Pero ya amaba jodidamente tus ojos. En ellos puedo ver un mundo mejor, una mejor versión de mí misma, una semilla de esperanza...¿Como olvidarme de algo que me hace tan feliz y tan miserable a la vez, algo que me quita el aliento?. Eso jamas sucede. Una persona nunca se olvida de lo que alguna vez ha amado realmente. 

 Entonces entendí; Nunca me olvidaría de tus ojos.

No son tus enloquecedores ojos lo único que me encanta de ti, también es tu sonrisa, es tan perfecta...Y lo mas loco de ti es que siempre la traes estampada en el rostro. Y forma tan relajada de ser que tienes, siempre pareces estar feliz y aún cuando no lo estás eres hermoso. Eres perfecto, cuando estás pensativo y tu entrecejo se frunce y tu mirada viaja a otro planeta. Cuando celebras al ganar el partido, cuando expones tus ideas valientemente sin miedo al que dirán... Eres vivaz, valiente y altruista. Alegras la habitación dónde te encuentres; la iluminas con el brillo eterno de tu sonrisa y el de tus ojos.

¡Oh no!

Me haz atrapado observándote de nuevo. Tu mirada se encuentra con la mía por escasos segundos, enmarcada por esa espesa y larga capa de pestañas oscuras que resaltan aun más tus hermosos ojos. La envidia de cualquier chica.  Me quedas mirando con un destello de confusión adherido en tus ojos, puedo sentir una corriente eléctrica recorrer todo mi cuerpo y giro mi cara ya que, tus ojos parecen abrasarme. Siento un calor en mis mejillas, lo que hace que tu sonrisa se acople a tu apolíneo rostro logrando un conjunto perfecto. Vuelves a tu conversación, no sin antes mirarme de soslayo; preguntándote quien soy. 

Como quisiera tener las agallas de un guerrero tan solo por dos minutos; Me levantaría e iría al otro lado de la habitación donde te encuentras charlando, te dedicaría un "Hola". Y aún me quedarían algunos segundos restantes para poder sostener una conversación contigo, al igual que lo haces con uno de tus amigos. 

Pero eso nunca sucederá y me resignaré.

 Y me conformaré a sólo tenerte en mis sueños, a imaginar tus cautivadores ojos color miel en mis noches de insomnio y a observarte a través de mi cortina de cabellos castaños. Me conformaré a escuchar tu voz, a tenerte cerca pero a la vez a millones de kilómetros de distancia. A ver tus ojos, pero que ellos en realidad nunca me miren a mi. 

Pero si de algo estoy segura; es que esos hermosos ojos color miel que tú posees son los que me llevarán a la demencia...Si es que ya no estoy en ella.

Para él.
28-11-15.