Capitulo 1.

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Faltaban menos de dos horas para la reunión de alumnos del instituto. Clark no paraba de caminar de un lado a otro por toda la cocina, hasta que finalmente llegó Marcus.

- ¿¡Dónde has estado!? - preguntó Clark furioso, agarrándo a su compañero por el cuello de la camisa de cuadros.

- ¿En clase, tal vez? ¿Te olvidas de que es viernes?- respondió con cierta ironía Marcus.

Clark soltó al rubio y él se sacudió. Clark sudaba de nerviosismo y se acariciaba las manos.

- ¿Vas a ayudarme?

Marcus se rascó la cabeza.

- Clark, va siendo hora de que entiendas que yo tampoco soy el rey de la socialización...

- ¡Me da igual, Marcus! - chilló - ¡Tú te relacionas con las hembras y eres gay, tendrás que saber lo que les gusta!

Marcus empalideció  y se llevó las manos a la cabeza.

- ¿¡Crees que soy gay!? - exclamó furioso.

Clark intentó explicarse inútilmente, pero él le frenó.

- Vale, vale, no necesito explicaciones...Pero que quede claro que soy completamente heterosexual.

El marginado asintió y el friki le indicó que se vistiera como tenía pensado asistir al evento, que él ya le corregiría los fallos.

Ambos pasaron a la habitación de Clark, y Marcus se tomó la libertad de poner música para ambientar. Cogió el Ipod y puso la canción de Pretty Woman de Roy Orbison. Clark se giró hacia él y se comenzaron a reír. Tomó el conjunto que tenía pensado y se cambió allí mismo.

- Tío, ¿vas a cambiarte aquí? - preguntó Marcus tapándose la cara.

- Ahora ya sé que no eres gay, ¿qué problema hay?

Cuando terminó, comenzó a desfilar moviendo las caderas cuan modelo masculino de Victoria's Secret, con poses extremadamente exageradas. Corrió hacia la silla y se puso la gabardina mientras seguía desfilando.

        Pretty woman, stop a while

        Pretty woman, talk a while

         Pretty woman, give your smile to me

         Pretty woman, yeah, yeah, yeah

         Pretty woman, look my way

         Pretty woman, say you'll stay with me

 

Marcus quitó rápidamente la música y se llevó las manos a la cabeza.

- Quieto ahí, para, para - le ordenó - ¿De verdad piensas ir así vestido?

 Clark se miró de arriba abajo, con una expresión que mostraba desacuerdo.

- Estoy perfecto - se autoadmiró.

- ¿No querías mi ayuda? - Marcus se levantó y rebuscó en el armario, hasta encontrar lo que necesitaba- Bingo...

Finalmente, Clark salió del piso con una camiseta burdeos, un vaquero negro y un abrigo que le llegaba hasta las rodillas, también negro. Dejó que Marcus le peinase, y su pelo acabó medio repeinado hacia atrás. Clark quería afeitarse, pero su personal shopper se lo impidió. Pero eso sí,  le depiló un poco las cejas.

- ¿Ves? Por eso creía que eras gay. ¿Qué hombre masculino se depila las cejas?

- Cállate, Romeo, que con dos alfombras como cejas no vas a conquistar a tu Giulietta. 

Cómo enamorar a una mujer: El diario de Clark BowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora