♡Frithler♡

Cap.2 "La pequeña Anna Frank".

Cap2\parte2.

Adolf Hitler camina hacia la calle donde quedaba su camión, para ir hasta el campo.
-¡Hitler!- Se oyó de lejos a

Eva, la mujer de este, quien corría hacia él como si lo perdiese de vista, pero normalmente veía como apenas se subía de ese gran montaje, y que no sabía de la nueva noticia de él.
-¿Si?-La mira perplejo. De verdad no se dio cuenta de su desesperada llegada por culpa de tanto alboroto en su alrededor. Tiroteos, y personas "alborotadas" judías, por cierto.
-¿Donde te irás?
-Iré al Campo Judío Juvenil. Tengo un trabajo que hacer allí. Te recomiendo que te quedes a cuidar a la niñas. Tardare mucho, y es por eso que quiero que sepas que volveré mañana. Diles a mis hijas que volveré con una sorpresa para ellas- Besa su frente acariciando sus mejillas para luego decir: "Y para ti también cariño"-Hasta luego, me tengo que marchar. Te veré mañana belleza- Y así es como el Fhürer se marcha con sus demás militares hasta el camino al Tren, y de allí van al Campo.
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Cap.2\Parte2.
Llegando al Campo Hitler obvserva desde su ventana a las pequeñas judías llevando su trabajo forzado y trabajando como si hiciesen una casa de dos pisos. De verdad, este maldito y los nazis no tenían piedad ni aún más lástima.
-Ho. Judías para mí- Saboreó sus labios, dejándose llevar por sus asquerosos y pervertidos pensamientos. Esto al ingendro nunca le faltaba.
-Fhürer. ¡Llegamos!
-Ya lo sé idiota-Grita el ortivo, pero fue demasiado cuando uno de estos replico que llegaron a donde Hitler debería estar. En el lugar donde Larry lo llamo a parar. Allí.
Bajaron a medida que quedaran todas las judías paradas en filas largas y una al lado de la otra, recibiendo al Sr.
-Comandante Hitler-Lo recibió el "Famoso" llamado Larry, quien insistió para su llegada.
-¿Qué diablos querías?
-Hey!-Se ofendió- Solo vengo a comunicarte que tendrás que cuidar el campo.
-Que lo cuide uno de tus Militares, que bastantes barbones son. Ellos sabrán si tu hablas, pero en efecto estará mal lo tuyo. Seré conserje de todos, pero no de uno Larry. Así que no tengo idea para que quieres esa maldita "abandonacion".
-Quiero que te quedes. Somos...-¡YA TE DIJE QUE NO, MALDITA SEA!-Interrumpió Hitler- ¿Que diablos quiere den mi? ¿SOBORNO?-Enfureció este. Y así se marcho grito rojo de ira arrastrando sus pesados pies en la tierra; "¡Malditos imbéciles!"
Luego de su enojo, se decidió recostar en una de las camas donde se hallaba el dormitorio de Helpies, un joven militar que falleció por medio de la Guerra un año anterior. Mirando hacia la ventana, que quedaba a metros de la cama, vió el fuego que recorría por el cielo en la chimenea del HOLOCAUSTO. No quemaban niñas allí, pero estaba cerca. El sr. Hitleriano se acercó a contemplarlo mejor, hasta que...
-¡Anna! ¡VEN AQUÍ!- Grito una joven desde la ventana desde sus habitaciones oscuras. Se podía ver a una niña (No tan niña) saltar en una de las piedras y correr al callejón que había allí. Adolf salió de ese lugar nuevamente enfurecido saltando de la cama, de un movimiento como si fuese pinchado por un alfiler, para ir hasta donde estaba Larry.
-¡Bastardo!- Grita apenas ya se encontraba cerca- ¿Que carajos hace una una judía afuera?
-Hitler. Ya vete. Ahora tu eres...-¡Los claviculos Larry! Las judías deben mantenerse unidas. ¡No deben estar afuera si no trabaja! Eres un ascos para nuestra nación.
-¡Oye! Digo, ¡Oiga! Yo solo..
- Ya calla maldito infeliz. No debes hablar. Asco- Replico jn gesto asqueroso al vómito.
De allí partió a las habitaciones donde estaban las judías. Entró sin más, y allí es donde saco a más de 23 judías de ese lugar para transportarlas a trabajar. Pero, a Anna NO.
-Hey!- apenas la vió marcharse.
-(Asustada)- ¿Si .Sr?
-¿Cómo te llamas? Jovencita.
-A-Anna.
-Anna que?- Replicó desentendido.
-Frank- Dijo tímida- Anna Frank.
-Mmm- Afirmó. Y luego la llevó sin explicación ninguna al dormitorio anterior donde estaba el Fhürer.

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Buenas noches\ Tardes) Días chicas\os. Mañana sigo bien. Estoy cansada.
Según si puedo. Mañana podríamos ver que va a pasar con el Fhürer y la Srita. Frank.