-NO PUEDO - grite A Aria cuando me dijo que intente levantar la mancuerna que ella levantó.
-VAMOS NENA SI PUEDES - dijo riéndose
Cuando por fin la levanté, alguien lanzó algo.. Provocando que soltara la mancuerna y esta impactará el suelo dejando un leve golpe en el.
-Rayos - susurro el idiota que aventó lo que parecía ser un guante de ejercicio -Lo siento - dijo levantando la mancuerna y colocándola en su lugar anterior
-Claro claro no te ocupes - dijo Aria llegando, tomó mi mano y me llevó al baño del gimnasio
-¿Qué fue eso?- preguntó sonriendo
-¿Qué fue que?- dije y desaté la coleta que llevaba.
-Jess, no intentes esquivar mis preguntas - me regaño -el tipo te ha mirado desde que entramos - dijo y ella se agarró un moño en el cabello
-Bueno..pues QUE BUENO - dije intentado parecer feliz
Tomé mi toalla y me metí a la ducha del gimnasio
-Vamos Jess, ya son 2 años - dijo Aria del otro lado de la ducha
-Aria- regañe
-Bien bien - dijo y escuché el sonido de la ducha.
*
-Un café normal y... Una donas de crema de mora - sonreí y la señorita tomó mi orden.
Al salir del gimnasio Aria me dejo en casa y ella fue al trabajo, el cual ocupaba por la noche
Al cabo de unos minutos, llegó la señorita con mi pedido, le dedique una pequeña sonrisa y se retiró.
Bebí de mi café y caminé a la puerta del local cuando la iba a abrir, esta se abrió, provocando que un poco de café se derrame sobre mi camiseta.
-Rayos - susurré y mire al causante, esos ojos avellanas....
El tipo del gimnasio.
Me miró sorprendido y se disculpó
-Claro claro, no importa - dije y salí rápido
Maldito Cliché.
Caminé y pedí un taxi, llegue a casa y deje la comida en el refrigerador, mi bolsa en el perchero y subí, me recosté y mire al techo
-Si sigo así... Voy a engordar como vaca - dije y Reí
Talvez un cambio no me haría daño.. Una salida al centro con Aria, una salida a un bar..
Talvez era hora de que el dolor forme parte de mi pasado...
