Capitulo 10: Enojos Cruzados

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Narra Pato: 

El hermano de Cielo era un bocho con los acordes, y ademas tenia un talento impresionante para tocar la viola, me hacia acordar a mi cuando empece a interesarme por la música o mejor dicho cuando volví a interesarme por ella, tenia esa energía joven y una chispa increíble. Después de dejar a Tiziano en su casa le avise a Cielo y nos quedamos hablando, que se yo abran sido varios minutos, después ya no contesto mas, supuse que el rubio se había puesto medio cargoso, así era mi hermano cuando algo no le gusta se pone cargoso, en fin deje el celular en la mesita del living mientras practicaba algunos acordes en mi hermosa viola flying V, al cabo de un rato pensé en mirar de nuevo pero el sonido de la puerta me distrajo. 

- ¿eh Guido que haces acá no estabas con tu chica?- pregunte apoyando en el marco de la puerta. 

- ya la lleve a su casa, Patricio tenemos que hablar- dijo con expresión seria, ese "tenemos que hablar" no era nada bueno, ya que cada vez que alguien me decía eso era para cagarme a pedo, y seguro esta no era la excepción. 

-dale pasa ¿que onda que estas tan serio nene?- pregunte corriendo la viola del sillón. 

- esta todo bien si queres ser amigo de Cielo, pero no te zarpes ¿ok?- aclaro mirándome a los ojos, entre nosotros nunca fue fácil el tema de las mujeres, mas que nada por un mal entendido del pasado. 

- tranquilo chabon, entre ella y yo no pasa nada- dije relajadamente, Guido se giro y me agarro del cuello de la camisa. 

-y mas te vale que no pase, no quiero que se repita lo de Julieta ¿te acordas?- dijo medio enojado, yo me solté de su agarre ahora irritado, no podía  creer que todavía se acordara de eso. 

-ah ahora me lo venís a echar en cara boludo- dije parado frente a el que permanecía sentado con la cabeza gacha - tremenda flor de puta era esa y después me echas la culpa a mi- dije enojado, el pendejo había logrado ofenderme. 

-¡podrías a ver tenido códigos no! pero que códigos vas a tener vos si sos tremendo atorrante- dijo apuntando a mi, esta discusión ya la habíamos tenido antes y no quería volver  a eso. 

- ¡cállate la boca pelotudo!- grite enojado, no quería tener que seguir discutiendo con el así que le señale la puerta para que se fuera - andate a tu casa y cuando se te pase la calentura hablamos- dije por ultimo, camine hacia la puerta y la abrí, el no dijo mas nada, callado se fue vaya a saber si a la casa o a donde. 

Me había dejado tan mal discutir con este pendejo que decidí salir a caminar, a paso lento llegue a un bar un poco alejado pero no quise entrar, me quede afuera sentado en un banco, en el otro extremo del banco había un tipo, por alguna razón se me hacia familiar pero no lograba distinguirlo en la oscuridad. 

-Maximo hace mucho no venís por acá, ¿te acordas de agord?- dijo agitando una bolsita con polvo blanco, esa imagen me recordó de golpe quien era el, y toda la mierda que tenia encima. 

-hace mucho ya que la deje, no me rompas las pelotas- dije dispuesto a irme, hice unos pasos y el tipo volvió a hablarme. 

- para nene, ¿quien te crees que sos? nadie puede dejar a agord- dijo aspirando el polvo de la bolsa, agord era el nombre que usábamos para esa mierda. 

-pero yo ya la deje y no la quiero ver mas- dije caminando de vuelta a mi casa o algún lado lejos de toda esta mierda..


Narra Cielo: 

No podía creer que Guido era tan celoso, ni siquiera habíamos pasado una semana de novios y ya se ponía así por unos mensajes, si creía que conocía un poco al rubio estaba muy equivocada, al llegar a mi casa lo primero que encontré fue un frasco de pastillas sin abrir  y un vaso de agua en la mesita del living. 

- ¿y esto?- pregunte señalando aquellas dos cosas a mi mamá que estaba sentada en el sillón principal. 

-te lo mando el medico, hasta que estén los estudios- dijo abriendo el frasco, saco una pastilla y me la dio junto con el agua. 

- pensé que no iba a tomar mas pastillas, estoy cansada- dije sin aceptar lo que ella me daba, me miro con repudio en la mirada y volvió a darme las pastillas. 

- las tenes que tomar Cielo te guste o no- dijo tomando bruscamente mi brazo derecho, me  entrego la pastilla y me miro fijamente esperando que la tomara, mire de reojo a la puerta del living y vi que Tiziano estaba escondido detrás de la misma, sin mas opción tuve que tomar los medicamentos asquerosos y amargos, después de todo se lo había prometido a mi hermano. iba a retirarme a mi cuarto pero ella volvió a agarrarme bruscamente de la muñeca. 

- soltame que me estas lastimando- le pedí molesta tratando de zafarme. 

- llegas tarde a tu casa y en un auto desconocido ¿me podes explicar que pasa con ese tipo?- dijo con asco en su voz, sabia que no le iba a gustar para nada lo que le iba a decir. 

-ese tipo se llama Guido y es mi novio- dije haciendo fuerza para zafarme nuevamente, pero su agarre se hacia mas fuerte. 

-¿novio? no el es mucho mas grande que vos, sos demasiado inocente, no te das cuenta que el solamente quiere sexo y nada mas, en cuanto te logre llevar a la cama se olvida de vos y se va con otra puta- dijo mirando fijamente mis ojos, no podía creer que ella fuera tan fría como ahora, sus palabras eran como cuchillos para mi. 

-no el no va a hacer eso, el es diferente- dije enojada -soltame que me estas lastimando- volví a pedir furiosa, siempre nos llevamos así, era como si ella me odiara, quizás por el echo de que no soy su hija o por vaya a saber que. 

- ¿le contaste que estas enferma?- dijo mirándome yo negué con la cabeza y ella retomo la palabra - mejor así, aun que a lo mejor te tenga lastima como todos- dijo fría como el hielo, mis lagrimas caían como cataratas de agua, Tiziano entro al living y corrió a abrazarme, Ximena, que así se llamaba la mujer a quien llamo mamá, lo agarro del brazo separándonos. 

- dejala, Cielo no te hizo nada malo- grito mi hermano zafándose del agarra para abrazarme. 

-vos no te metas Tiziano, estas son cosas de gente grande y vos sos muy chico para entender- dijo ella fingiendo cierta simpatía para con el. 

- no soy chico, tengo 14 años y se de que están hablando, ellos la quieren a Cielo, no la van a lastimar, pero vos si la estas lastimando- dijo ayudándome a zafarme del agarre, lo abrace llorando, era el único en esta casa que podía entenderme a pesar de la diferencia de edad, sin decir mas nos fuimos no a nuestro cuarto si no al cuarto de Mariano, estar ahí nos ayudaba a sentirlo mas cerca nuestro, entramos y pusimos un cd de airbag, un compilado especial que nuestro hermano había echo para nosotros dos, el primer tema era Cae El Sol, me acosté en la cama, abrazando a Tiziano por la espalda y el me acariciaba las manos como cuando era chiquito. 

-¿cuando te va a dejar de tratar mal?- pregunto sollozando. 

-no te preocupes va a estar todo bien- respondí, acariciando sus pelos negros, así nos quedamos dormidos, esperando que al menos mañana sea un día mejor. 

bueno eh aquí el cap 10 como prometí, espero que les guste, esto es algo nuevo para mi así que espero esta haciéndolo bien. Quiero aclarar el anagrama "agord" si se lee la palabra al revés  puede leerse "droga" igual se llega a entender en una parte. 

no olviden votar y comentar :* 





Todo Pasa...por una razón (fanfic Airbag) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora