Duerme, pequeñín.

¡¿Tails!?

-¡Tails! ¿Cuando te queda?-Preguntó por el comunicador. Estaban en una base de eggman. En Ice Cap mountain. Hacía muchísimo frío. Sonic tiritaba intentando escuchar a su compañero, al cual, se le oía entrecortado.

-Es... oy... er... nando...-Intentó decir. -...El... ca... evo... ta... erca...-

-Repite, no se te entiende nada.-Pidió. Tails estaba en la sala de control. Por lo visto, transferían las señales. El zorro estaba colocando una bomba, pero, el problema, es que Eggaman se acercaba por momentos. El erizo tenía frío, pero estaba más preocupado por su hermano pequeño, quien estaba en una situación delicada. Si esa bomba no se instalaba bien, se auto explotaba según empezara la cuenta atrás. A eso le sumaba el hecho de que el Dr. Pesado. estaba cerca, quien no sabía que el zorro estaba ahí.

-Qu... esto... termi... ando... El cara... evo... est... cerca.-Se seguía oyendo entrecortado, pero, al menos se le pudo entender un: "Estoy terminando, el cara huevo está cerca."

-Por favor, ten cuidado, no quiero perder a mi hermanito.- Le pidió. Se acordó de un pacto que habían tenido minutos antes, de que: Sonic vigilaba y Tails entraba. -Ojala fuera yo quien estuviera ahí, así no estaría tan preocupado.- Le dijo. Pero Tails no dijo nada, sabía que si fuera al revés, Tails estaría mucho más preocupado de lo que está Sonic. De golpe, por el comunicador, se oyó una explosión. -¿Tails...? ¡Tails! ¡Responde! ¡Mierda!-Salió corriendo a dentro encontrándose con montones de brigadas de robots. Todos lo apuntaban. Era una emboscada. [Atención: Referencia a un videojuego. A ver si averiguan cual es] Sonic, con en comunicador en la mano, levantó ambas en señal de rendición. Uno de los robots le indicó que soltara el comunicador, y así hizo. Pero, antes de que este llegara al suelo, Sonic lo cogió tumbado en el frío suelo de cemento y activó un botón rojo que había en la parte de atrás. Con anterioridad, Sonic había colocado bombas de control remoto donde, ahora, se encontraban las brigadas de robots. Estos salieron volando. Una vez todos los robots fueron reducidos a cenizas, corrió a la sala de control... Todo estaba derrumbado. Se fijó en algo. Era lo que quedaba de una bomba bastante potente y un detonador. Pero, no era el explosivo de Tails. Levantó varios escombros. -Tails... Por favor... ¿...dónde estás...?- Entonces, el cobalto encontró el explosivo de Tails... También había explotado. Fue una reacción en cadena. Siguió buscando y lo encontró debajo de un montón de escombros. Estaba sangrando y no despertaba. Por suerte, todavía tenía pulso. Sonic se acercó a él y encendió el comunicador. -¡Knux! ¡¿Dónde estas?!-Preguntó.

-Afuera, esperando la orden de Tails para que Amy encienda los motores del avión.-Informó.

-¡Necesito que vengas, y rápido! Alguien activó otra bomba en la sala de control, haciendo que la de Tails también se activara. ¡El pobre está gravemente herido! ¡Y dile a Amy que vaya arrancando, pilotaré yo!-Le ordenó. Llegó a escuchar un "¡De acuerdo!" Antes de apagar el comunicador. Guardó el aparato y miró al menor... -Tails... si no te hubiese hablado, hubieses escuchado la otra bomba... Es mi culpa... Lo siento... ¿Eh?- Se fijó una marca que tenía en el cuello. Parecía que le habían inyectado algo azul... -Tails... Abre los ojos, por favor... por favor... por favor... No me puedo permitir el perderte...- Le acarició la cabeza. El cobalto se quitó la bufanda y se la puso al menor en forma de venda al menor en el pecho. Tenía que taparle las heridas para que dejara de sangrar y que no se le infectaran. Cogió su propia chaqueta y se la puso al zorrito para que no cogiera más frío. Lo tomó en brazos e intentó salir de allí, pero, se encontró con montones de robots. ¿Y ahora qué? Se oyó un estruendo y acto seguido, un robot cayó rotundo. Tenía un pequeño agujero donde estaría el chip lógico. Luego cayó otro con los mismos síntomas. Sonic miró a uno de los ventanales y se encontró con una sombra bastante conocida. Esta sostenía un rifle. Varios robots cayeron al suelo con un agujero enorme en la espalda. Ya Knux estaba haciendo de las suyas. Una vez acabaron con todos los robots, ayudaron a Sonic a salir llevando a Tails. Se subieron al tornado y se fueron. Cuando llegaron al taller vendaron a Tails y lo acostaron en su cuarto. Durante todo ese día, Tails no despertó, y Sonic no le quitó ojo de encima. Cuando llegó la madrugada, Sonic no pudo aguantar más y se durmió. No aguantó mucho hasta que algo lo despertó... Era un ruidito... Parecía... un llanto... Ese llanto le recordó a cuando Tails era pequeño y se caía o pasaba miedo. Sonrió de lado. Tails siempre fue tremenda_mente lindo, y nunca dejó de serlo. Aunque, a Sonic no le hubiese importado cuidarlo como si fuera un bebé otra vez. Ese llanó no paró, y cada vez era más notorio. El erizo abrió los ojos cansado. Automáticamente, se acordó de Tails y se asustó al no verlo acostado en la cama. Pero... Algo se movía entre las sábanas... Era... -¿¡Tails!?- Se asombró al verlo hecho una "bolita de pelos" mientras lloraba. Era muy pequeño... Era... un bebé. -Tails...- No terminaba de creérselo.

-Bua... Bua...- Lloró el mini-Tails. El oji-esmeralda se acercó al menor, se sentó en la cama y lo cogió en brazos... Era tan pequeño... tan indefenso y frágil... -Venga... Cierra tus ojitos... Duérmete... Estoy aquí, contigo.... No me voy a ir... -Dijo el erizo acunando al zorro de dos colas. Y pensar que ese mismo día, no creyó que algo así ocurriría.El menor al ver al mayor, le agarró la nariz. Acto seguido, se puso a reír.

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¡Bye! *Kisu*