El día de mi sexto cumpleaños.
Mamá toca levemente con los nudillos en la puerta de madera, tras gritar subiendo las escaleras: "No hagan ruido que ella sigue durmiendo".
El chirriante sonido de la puerta me hace saber que se había abierto. Se escuchan varios pasos acercarse a los pies de mi cama por lo que deduzco que no viene sola.
De repente un cuerpo se abalanza sobre mi, dejandome totalmente inmóvil.
-¡Feliz cumpleaños Lucía! -Grita Alex sobre mi, dandome pequeños besos en la frente.
- Felicidades cariño -Me dice mamá besando suavemente mis mejillas tras haber apartado a mi amigo.
Quito las sábanas de mi cara, el sol entra por la gran ventana de mi habitación iluminandola por completo y haciendome algo de daño en mis ojos verdes. Abro los ojos lentamente viendo como mamá sonrie alegremente con un gran pastel de chocolate en sus manos.
- Sopla las velas cariño y que no se te olvide pedir un deseo. - Interviene mi abuela desde el otro lado de la cama.
Aun estoy adormilada por lo que no mido bien la distancia al hacercarme al pastel y todo el chocolate que había sobre él, queda por toda mi cara. La habitación se inunda de risas y noto como mis mejillas se vuelven de un tono rojizo.Limpio como puedo mi cara con la sábanas y salgo corriendo hacia el baño para poder lavarmela mejor.
La puerta se abre lentamente y vuelve a cerrase en seguida. Siento a alguien a mi lado pero no se quien puede ser por lo que me seco la cara con una toalla y miro intrigada a esa persona.
Una sonrisa aparece en mi cara cuando veo que se trata de mi mejor amigo. Sí, es extraño que con 6 años ya tenga un mejor amigo pero es que el me hace sentir genial cuando estamos juntos y además es mi vecino por lo que le puedo ver cada vez que lo necesite.
- Hola pequeña. - Le encanta llamarme así,aunque solo es dos años mayor que yo y unos centímetros más alto.
-Hola grandullón. - Digo dandole un pequeño abrazo.
- No he podido salir de casa esta semana, así que no he podido comprarte nada especial para tu cumpleaños. - Una amplia sonrisa se abre en sus labios. - Pero tengo algo que te gustará mucho más que cualquier regalo. Cierra los ojos.
Hago lo que me pide y a los pocos segundos siento como sus labios chocan con los mios, dejando un sonoro beso. Mi primer beso.
Le aparto de un empujón y se queda sorprendido de que lo haga.
-¿Porque has echo eso? - Pregunto algo desorientada - Somos mejores amigos, ¿No lo recuerdas?
-Sentí que debía hacerlo, lo siento mucho Lucía, no quería molestarte.
- Prometeme que no lo vas a volver a hacer jamás, nuestra amistad es lo más importante.
- Te lo prometo. - Dice con una mirada de arrepentimiento y algo de tristeza. - Mejores amigos por siempre - Se acerca y esta vez me abraza, con ternura como si fuese mi hermano mayor.
Bajamos las escaleras juntos ya que todos los invitados a mi pequeña fiesta sorpresa están en el salón. Saludo persona por persona con una gran sonrisa y voy recogiendo los diferentes regalos que me dan.
Tras pasar una hora de risas y anécdotas vergonzosas de años atrás suena el timbre y extrañada me acerco a abrir la puerta. Mis ojos se abren de par en par cuando le veo, me lanzo a sus brazos y me levanta para besarme. No esperaba esta visita en este día.
Mi hermano, que hace un año se fue a terminar su carrera de medicina, ha vuelto. Esta tan guapo como siempre, su pelo ha cambiado, ahora tiene un flequillo largo hacia arriba que le queda muy bien y parece que se a aclarado el pelo, lo tiene castaño claro, me gusta más así, que con la cabeza rapada.
Cuando mis pies vuelven a tocar el suelo, abro los ojos, que hace un rato había cerrado por la emoción y me doy cuenta de que tras el hay una mujer, con un vestido negro que deja ver casi todo su cuerpo y que saluda con una sonrisa amplia
- Cielo, te presento a Addy, mi novia. -Mi cara se vuelve un poema y mi hermano parece notarlo.
La chica se acerca a mi y me da un pequeño beso en la frente. Su olor me llama la atención, huele a vainilla.
-Feliz cumple pequeña. - La miro a los ojos y hay algo que me dice que no me puedo fiar de ella por lo que asiento en forma de dar las gracias y subo a mi habitación para ver que ropa me ha preparado mamá para ponerme, puesto que sigo en pijama.
La mañana se pasa rápida, la paso junto a mis amigo jugando en el jardín.
La hora de comer ha llegado, nos sentamos en una gran mesa a esperar que sirvan la comida y veo como mamá trae bandejas de pollo asado. Al acabar de comer y ayudar ha recoger la mesa, las luces desaparecen, las persianas están bajadas y no se ve nada. Veo como una luz enciende unas velas y el rostro de mi madre se ilumina.
- Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, te deseamos Lucía, cumpleaños feliz. - Cantan todos al unisono y tras ello aplauden y vuelve a haber luz en la casa.
- Menos mal que tenía una tarta de repuesto-Dice mi madre abrazandome.
Por la tarde mi hermano y mi padre se encargan de colgar varias piñatas en el árbol del jardín y vendarnos los ojos para hacerlo más emocionante. Alex es el primero y con tres golpes consigue romper una de las piñatas y todos los dulces caen al suelo. Ahora me toca a mi, por más que lo intento no consigo darle a nada. Entonces noto como mis pies se elevan y dejan de tocar el suelo y de un golpe consigo romper la siguiente piñata. Del pequeño salto que doy, caigo al suelo junto a quien me cogió. Cuando me quito la venda me doy cuenta de que es Alex y ha caído encima de unas flores de mamá que estaban aun húmedas debido al riego automático y se llena la cara de barro.
La tarde pasa realmente rápida. Ya solo quedamos Alex y yo en mi cocina jugando al parchís. De pronto el timbre suena y ambos dejamos de jugar para ir a abrir la puerta. La madre de Alex está justo detrás de esta.
- Cariño vamos a casa que ya es tarde - Dice señalando el reloj que lleva en su mano.
Él le hace caso, me da un beso en la mejilla y sale de mi casa. Ya son las 11:00 de la noche y el sueño empieza a envolverme por lo que subo a mi habitación, me adentro en mi cama y me quedo profundamente dormida.
--------------------------------------------------------
Perdón por subirlo en dos partes, es que no sabía que quedaría tan corto. Gracias por su lectura, es la primera vez que escribo algo y no se si gustará.
Un saluudoo
ESTÁS LEYENDO
Hasta ahora..
Novela JuvenilAun no me había dado cuenta, ¿Cómo he podido estar tan ciega? Lo tenía delante y no me enteraba. Tan solo tengo 17 años, no puede ser que ya este enamorada y me hayan roto el corazón. Soy joven y puedo encontrar a otro chico, pero ¿Será tan especial...