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Yo, Kirigaya Kazuto, cerré sesión en el VRMMO-RPG, «Sword Art Online», el 7 de
noviembre de 2024.
Fue a mediados de diciembre cuando regresé a mi casa en la ciudad de Kawagoe, en
la Prefectura de Saitama, mientras continuaba con mi periodo de rehabilitación. Había
cumplido dieciséis hacía un par de meses, pero como había estado batallando en el
quincuagésimo piso de Aincrad mientras mis compañeros anteriores del mismo grado
estaban enfrentando los exámenes de ingreso a la preparatoria, obviamente no había
escuela a la que yo pudiera ir.
Afortunadamente, aunque dudo si debo llamarlo así, recibí un certificado de
graduación desde la escuela secundaria de la que sólo he terminado la mitad, así que la
ruta normal sería dedicar mi tiempo en una escuela de preparación hasta que pueda
rendir los exámenes el próximo año, haciéndolos un año más tarde de lo normal. Sin
embargo, el gobierno propuso una medida temporal extraordinaria.
Entre los aproximadamente seis mil jugadores que regresaron con vida del
encarcelamiento en SAO, los estudiantes de secundaria y preparatoria sumaban más de
quinientos. Se decidió que una escuela para todos ellos podría establecerse en Nishitokyo,
en Tokio, desde abril de 2025 sin necesidad de exámenes de ingreso o colegiatura, y a los
graduados se les otorgarían calificaciones para rendir exámenes de ingreso a las
universidades.
El edificio utilizado fue de una escuela preparatoria metropolitana, abandonada el
año anterior y que esperaba su demolición. El profesorado estaba compuesto en gran
parte por profesores re-contratados que se habían jubilado y que trabajaban medio
tiempo. Estaba clasificada como una Escuela de formación profesional bajo la Ley de
enseñanza escolar.
Ese inesperado nivel de simpatía, incluso como una red de seguridad, sin duda causó
inquietud, pero decidí ingresar después de preguntarle a Asuna y por supuesto, a mi
familia. Nunca me he arrepentido siquiera una vez. El diseñar y crear variados dispositivos
con mis amigos en el curso de mecatrónica fue extremadamente divertido y pude
reunirme diariamente con Asuna, Lisbeth, Silica, y los demás. Todavía podía afirmar que era una vida escolar plena incluso después de restarle puntos por la sesión obligatoria de
asesoramiento semanal.
Sin embargo, también fui incapaz de asistir a esa escuela hasta el final.
Fue un año y dos meses después que ingresé, el 6 de junio de 2026. Por alguna razón
desconocida, recuperé la conciencia en otro mundo, «Underworld». Luego de despertar
en el bosque cercano a la aldea Rulid, en el extremo norte del Human World, había
llamado innumerables veces al staff de la empresa que debería haber estado
desarrollando y administrando este mundo, Rath, pero no hubo respuesta alguna.
A regañadientes, me dirigí al lugar donde con mayor probabilidad hubiera una consola
capaz de establecer contacto desde aquí con el mundo exterior... el centro del Human
World, Centoria Central, o lo que estaba en su centro, la altísima Catedral central de
Axiom Church, y partí en un viaje desde Rulid con el compañero que había conocido en
este mundo, Eugeo.
De algún modo llegué a Centoria después de que pasara la cantidad de tiempo de un
año natural de Underworld, pero no había seguido simplemente y entrado a la Catedral. El
portón de la Axiom Church estaba siempre cerrado, con acceso restringido al espadachín
campeón del «Torneo de la unidad de los cuatro imperios» celebrado en la primavera de
cada año.
Por lo tanto, Eugeo y yo, que nos dirigimos a la Catedral, nos habíamos alistado en la
«Imperial Sword Master Academy» para obtener la calificación necesaria para ingresar al
torneo, a pesar de que teníamos objetivos diferentes. Su malla curricular sería imposible
en el mundo real, ya que comprende principalmente la esgrima y la magia (o para ser
exacto, las Sacred Arts) y también fue mi primera vez viviendo en un internado; aquellas
fueron mis circunstancias, pero aun así me acostumbré a mi vida en la Sword Master
Academy... no, incluso podría decir que disfruté de mi tiempo allí.
Sin embargo, un año y un mes después de mi alistamiento, en el quinto mes del año
380 del calendario del Human World, una vez más, se produjo un incidente que causó el
inevitable cese de mi vida escolar. Un par de hombres nobles de clase alta intentaron
jugar tanto con mi kouhai, Tiezé, como la kouhai Eugeo, la valet Ronye, por medio de una
astuta trampa.
Eugeo, que se encontraba en el lugar, quebrantó la restricción absoluta de
«desobedecer la ley» y desenvainó su espada. Justo cuando cortó el brazo izquierdo del
noble de clase alta, Humbert, con un ataque a fondo, finalmente terminé de correr hallí, e intercambié golpes de espada con el noble de clase alta, Raios, cortándole ambas
manos.
Aunque aquellas eran heridas graves, su vida podría haber estado a salvo si el flujo de
sangre hubiese sido sellado inmediatamente y se hubiesen tratado las heridas con
técnicas sagradas, pero entonces, ocurrió un fenómeno extraño. Al ser presionado a elegir
entre la mayor ley en el Human World, el «Taboo Index», y su propio deseo, él gritó con
una voz extraña cuando murió... no, mientras él cesaba cualquier acción.
La academia nos expulsó a Eugeo y a mí, y un «Integrity Knight», enviado por la Axiom
Church, nos había encarcelado en la prisión bajo la catedral. Sin dejarme abatir por mi
tercera vez «dejando la escuela a medio camino», de inmediato nos escapamos y vagamos
por el jardín de rosas en los terrenos; buscando una entrada al edificio mismo de la
catedral, durante lo cual nos vimos envueltos en una batalla contra un nuevo Integrity
Knight, y quien nos salvó mientras corríamos desesperadamente por todas partes fue...
Una misteriosa, chica que se presentó a sí misma como «Cardinal».
Cardinal, que vivía en una sala de biblioteca gigantesca existente en un espacio
hermético, hizo que Eugeo, que estaba empapado porque cayó en una fuente durante la
batalla, fuera al baño y en ese momento, ella me reveló una verdad que me pareció
sorprendente.
Que este mundo, Underworld, era una simulación de una civilización que había
estado sometida internamente por lo menos por cuatrocientos cincuenta años.
Que la máxima ministro de la Axiom Church, que regía el mundo, fue una vez una
hermosa joven llamada Quinella; igual a un habitante normal.
La chica que se había consagrado a sí misma al uso de las técnicas sagradas, o en otras
palabras a los comandos del sistema, persiguió el poder hasta el punto que llegó a un
encantamiento prohibido... un comando para leer la «totalidad de la lista de comandos».
No había otra manera para un tema único dentro de la simulación para ser promovido a
supervisor.
Con su autoridad absoluta para gobernar, Quinella ahora probablemente estaba
contemplando este mundo desde el piso superior de la Catedral Central. ¿También habrá
dirigido su mirada hacia Eugeo y a mí, perdidos en el jardín sagrado...?
Cardinal, sentada al lado opuesto de la mesa redonda, se volteó hacia mí con una
sonrisa burlona mientras me miraba temblando por un repentino escalofrío. Al tomar un
sorbo de té de la taza que estaba sobre la mesa, levantó sus pequeñas gafas.
—Es demasiado pronto para temblar de miedo.
Contuve los escalofríos y de alguna manera respondí a sus tranquilas palabras.
—Aah... lo siento, prosigue por favor.
Tras levantar mi taza, sorbí el té que tenía un sabor similar al café en el mundo real.
Cardinal apoyó su pequeño cuerpo contra el respaldo de la silla y empezó a hablar
una vez más, en un tono sereno.
—Remontándonos a doscientos setenta años en el pasado... Quinella llamó con éxito
a la lista completa de comandos, en primer lugar aumentando su propio nivel de
autoridad al máximo; uno capaz de interferir directamente con el Cardinal System que
controla al mundo. A continuación, se confirió a sí misma todas las autoridades que solo
poseía el Cardinal System. La manipulación del terreno y las construcciones, la generación
de ítems, incluso la manipulación de la durabilidad perteneciente a las unidades dinámicas,
incluyendo humanos... o en otras palabras; la manipulación de la Vida...
—La manipulación de la... Vida. Entonces eso significa, en otras palabras, su tiempo de
vida...
La joven sabia asintió tranquilamente ante mi tímida consulta.
—Significaba que ella puede trascenderla. Convertida en un supervisor completo, la
primera medida de Quinella fue restaurar completamente su propia Vida, la cual tenía
ochenta años y estaba al borde de la desaparición. A continuación, detuvo su
degeneración natural. Además, recuperó su aspecto externo juvenil. El arrebato de
Quinella de recuperar la belleza deslumbrante del apogeo de su adolescencia fue como...
algo más allá de la imaginación de alguien como tú; joven, y sin mencionarlo, hombre, sin
embargo...
—Bueno... entiendo que podría ser uno de los principales sueños para las mujeres.
Cardinal dio un resoplido despiadado cuando respondí mansamente.
—Incluso yo, que no poseo ninguna emoción humana, podría afirmar que estaría
agradecida por esta forma externa estática. Tengo un deseo tremendo de crecer otros
cinco o seis años al menos, pero... No obstante, habiendo finalmente satisfecho por
completo todos los deseos que la habían incitado, éstos hicieron que Quinella estuviera
excepcionalmente eufórica. Después de todo, ahora obtuvo el poder de manipular
libremente el vasto Human World y también la belleza eterna. Ella estaba en éxtasis... en
la catarsis del éxtasis. Suficiente como para quitarse una gran tajada de su cordura...
Los grandes ojos de Cardinal súbitamente se entrecerraron profundos más allá de sus
anteojos. Como si se estuviera burlando de la insensatez de la humanidad—o quizás,
compadeciéndose de ellos.
—Podría haber sido lo mejor si ella hubiese estado satisfecha entonces. Sin embargo,
resultó que realmente ningún final llenaría el agujero dentro del corazón de Quinella.
Quien no sabía lo que era suficiente... ella ni siquiera podía permitir la existencia de
alguien que tuviese una autoridad igual a la de ella.
—¿Eso fue... en referencia al propio Cardinal System?
—En efecto. Ella también intentó eliminar un conjunto de programas que no tienen
conciencia. Sin embargo... incluso con su competencia en las técnicas sagradas, al final
Quinella no es nada más que un habitante de Underworld, ajena a la civilización científica.
No había posibilidad de que ella entendiera la compleja sintaxis de los comandos desde la
autoridad de nivel supervisor en una sola noche. Quinella intentó imprudentemente
descifrar la referencia escrita en beneficio de los ingenieros de Rath... y ella se equivocó.
Un simple, único y enorme error. Pensó en tener la totalidad de Cardinal dentro de ella
misma, ideó un extenso comando y lo recitó. Como resultado...
La chica habló en un murmullo muy parecido a un suspiro.
—...Quinella terminó grabando las instrucciones primarias asignadas al Cardinal
System en su propio fluctlight como un principio conductual de sólo lectura. Ella intentó
robar solo el nivel de autoridad pero ¡terminó fusionando a Cardinal con su propia alma!
—¿...Qué...qué significa eso...?
Mi comprensión fue incapaz de captarlo, y murmuré sin comprender.
—Las instrucciones primarias de Cardinal... para ser específico, ¿cuáles podrían ser...?
—La «Preservación de la regularidad». Ese es el propósito tras la existencia de
Cardinal. Tú, también debes entenderlo si has entrado en contacto con un mundo de un
sistema similar. Cardinal está siempre observando las acciones de los «jugadores» como el
montón de ustedes. Y en el preciso momento en que se detecte cualquier fenómeno que
amenace con lanzar el equilibrio del mundo en el caos, este se corrige sin una pizca de
misericordia.
—Aah... eso es verdad. Pasé día y noche tramando como burlar a Cardinal, pero se
llenaba de tecnicismos inmediatamente después que los encontré...
Cuando murmuré mientras recordaba la forma segura pero efectiva en la que los
puntos de cultivo fueron distribuidos completamente durante mis días en SAO, Cardinal
mostró una sonrisa aparentemente engreída una vez más. Fue solo cuando ella puso esa
cara en la que la atmósfera de un sabio alrededor de ella se convertía en la de una
inocente y joven chica de la edad que aparentaba.
—Eso no hace falta decirlo, no importa cuántos novatos se reúnan, no serán capaces
de burlar a Cardinal... Sin embargo, Quinella fue mucho más allá incluso para la
preservación de la regularidad. El escribir las instrucciones en su fluctlight, o en otras
palabras, en su alma, causó que Quinella se desmayara y sólo despertara después de un
día entero de sueño. Para entonces, ella podría haber estado considerando ya no ser
humana en diferentes maneras. Ella no tendría edad, no bebería agua o comería pan... su
único deseo fue que el Human World sobre el que gobernaba permaneciera eternamente
igual...
—Permaneciera... eternamente igual...
Mientras repetía sus palabras en un murmullo, reflexioné.
Además de la IA de uso general; el Cardinal System, todos los supervisores para los
distintos VRMMO existentes probablemente desearían que sus mundos de juego se
prolongaran. Podrán regular el equilibrio entre la divisa, así como la generación de ítems y
monstruos, en un afán para preservar la regularidad. Sin embargo, había un solo factor
que incluso los supervisores que poseen un poder divino no podían controlar. Los
jugadores.
¿También podría decirse que eso no aplica a este Underworld...?
Y, como si ella viera a través de mis pensamientos, Cardinal asintió ligeramente con la
cabeza y reanudó su explicación.
—Antiguamente, lo que controlaba el Cardinal System eran animales, vegetación,
terreno, y clima; esto es objetos y efectos... en otras palabras, actuó como un fundamento
para el mundo, sin interferir en las acciones de sus habitantes, los fluctlight artificiales...
Sin embargo, Quinella era diferente. Incluso pensó en restringir las vidas de los humanos
por toda la eternidad.
—Restringir... es decir, hacer que todos repitieran la misma rutina día tras día sin algo
nuevo... ¿eso es lo que quieres decir...?
—Nn... bueno, es eso esencialmente. Permíteme continuar... fusionada con el Cardinal
System, Quinella primero modificó su propio nombre. Al de... Axiom Church Highest
Minister, Administrator.
Una vez más interrumpí en el instante en que escuché eso.
—E-Él también dijo ese nombre. Ese Integrity Knight Eldrie Synthesis... em...
—Thirty-One, estoy segura.
—Correcto, ese. Creo que dijo que recibió una invitación de la Highest Ministerr,
Administrator-sama, y luego bajó a la tierra desde el Mundo Celestial o algo así... Ya veo,
así que él se refería a Quinella... ¿Cómo debería decirlo?, ciertamente ella tomó un
nombre sorprendente, ¿eh?
Para mí, la palabra en inglés, «Administrator», era una que yo asociaba con una
cuenta de nivel de supervisor más que su definición de un supervisor real. Sin embargo,
tenía sin confirmar cuál significado tenía Quinella en mente cuando se nombró así misma
Cardinal sonrió irónicamente ante mi observación y asintió.
—No fue al nivel de nombrarse a sí misma como la diosa de este mundo, sino que
podría decirse que es muy parecido a cómo ella podría manipular las cosas...
Independientemente, ahora el supervisor tanto en el nombre como en la realidad,
Quinella proclamó un solo edicto. Para los cuatro grandes nobles de aquella época que
ascendieron a la posición de emperadores, dividiendo el Human World en cuatro
imperios: norte, este, sur y oeste. Kirito, tú has visto los muros que dividen Centoria
Central en cuatro, ¿no es así?
Fue mi turno de asentir esta vez mientras el otro preguntaba.
La Academia de dominio de la espada en la que viví estaba en el 5to distrito de la
capital del Imperio Norlangarth del norte, al norte de Centoria. La barrera de piedra
blanca siempre se podía ver desde las ventanas del internado, mucho más alta que
cualquier otra estructura dentro de la ciudad. Más allá de esos muros llamados los «muros
inmortales» estaban las capitales de los otros imperios; un gran motivo de sorpresa
cuando lo descubrí.
—La muchedumbre no extrajo el mármol y no lo amontonó durante años para
aquellos muros. Quinella... es decir, Administrator hizo que aparecieran en un instante con
su fuerza divina.
—¿¡...In-Instantáneamente!? ¿¡Aquellos muros!? Eso es mucho más allá de los límites
de las Sacred Arts... ¿las personas de Centoria de aquel entonces debieron haberse
quedado de piedra...?
—Naturalmente, ese era su objetivo. Mostrarle a las masas el poder del Cardinal
System e inculcar una tremenda admiración en ella. Con esa barrera psicológica y los
«muros inmortales», una barrera física, ella trató de restringir los movimientos e
interacciones de las masas. En aras de permitirle a la Axiom Church apoderarse de los
canales de transmisión de noticias, así como para controlar los corazones de las personas.
Deseó que el pueblo perdurara como fiel devoto de la iglesia por la eternidad,
permaneciendo ignorante e ingenuo... Esos absurdos muros inmortales no fueron el final a
las barreras físicas que creó. De manera de restringir las diversas regiones en las que
vivían los pioneros, para dispersarlos, Administrator estableció muchos objetos
gigantescos. Una roca enorme e irrompible; un pantano que nunca se podía llenar; una
corriente rápida e infranqueable; un árbol gigantesco que no podía ser derribado...
—E-Espera. ¿Dijiste... un árbol que no podía derribarse?
—En efecto. Ella concedió un árbol de cedro de un tamaño inverosímil con una
prioridad y una durabilidad casi infinitas.
Instintivamente recordé el árbol demoniaco, el Gigas Cedar, que poseía una dureza
que a uno lo haría llorar, y froté con suavidad ambas manos bajo la mesa.
En otras palabras, eso significaba que el Gigas Cedar no brotó de forma natural en el
bosque al sur de la Aldea Rulid sino que probablemente fue plantado por Administrator
para restringir que los aldeanos extendieran su área habitable con su horrible durabilidad
y habilidad para drenar recursos, como un obstáculo artificial.
¿Así que todavía había muchos de estos objetos alrededor de este mundo? ¿Y muchos
humanos han estado perseverando por cientos de años en un esfuerzo inútil con el fin de
eliminarlos...?
Al levantar mi cabeza, la chica que se hacía llamar Cardinal me miró con esa mirada
habitual diciendo que ella vio a través de mis pensamientos más íntimos. Sus pequeños
labios se movieron y fluyeron plácidas palabras.
—...Y así, una época pacífica y de inactividad continuó sin cesar bajo el reinado
absoluto de Administrator. Veinte años... treinta años... las masas perdieron su disposición
para el progreso; los nobles se complacieron en sus vidas ociosas; la esgrima
perfeccionada por los espadachines de tiempos antiguos, se degeneró en una mera
presentación. Como debes saberlo. Cuarenta años, cincuenta años después, Administrator
sintió una profunda satisfacción contemplando la vida cotidiana del Human World,
indolente, como si estuviera sumergido en un baño lánguido y caliente...
En resumen, era como contemplar y deleitarse con un acuario después de poner los
toques finales en su perfecto ecosistema. Emociones complejas me embargaron al
recordar cómo me quedé mirando una maqueta de observación de hormigas sin
aburrirme cuando era pequeño, y Cardinal sumida en la reflexión con sus ojos
desanimados como yo, habló con una voz clara.
—Sin embargo, es imposible para cualquier tipo de sistema permanecer así por toda
la eternidad. Algo tenía que ocurrir tarde o temprano. ...Setenta años después de que
Quinella se convirtiera en Administrator, percibió una anomalía de distintos tipos en sí
misma. Ocurrieron incidentes, a los que ciertamente no pudo hacer la vista gorda, tales
como la desaparición de su conciencia por cortos periodos fuera del sueño, siendo incapaz
de recordar cosas de hace pocos días antes, y más allá de todo lo demás, la incapacidad
para recordar al instante los comandos del sistema que ella debería haber aprendido
perfectamente de memoria. Al hacer uso libre de los comandos de supervisor,
Administrator examinó su propio fluctlight hasta el último detalle... y se estremeció con
los resultados. Después de todo, la capacidad del sector utilizado para preservar sus
recuerdos había alcanzado su límite sin percatarse de ello.
—¿¡Li-Límite!?
Le grité sus palabras ante el inesperado desarrollo de la historia. Era la primera vez
que escuchaba de un límite máximo para la capacidad del espacio de la memoria... o para
usar otra palabra, la capacidad de datos del alma.
—¿De qué es lo que hay que sorprenderse, no es lógico si lo piensas un poco? Los
tamaños de los cubos de luz que almacenan los fluctlights, y los cerebros reales, son
limitados y como tales, también lo son el número de bits cuánticos que se pueden
almacenar.
Volviéndome hacia Cardinal, hablando con calma, levanté mi mano derecha y pedí
una aclaración.
—Es-Espera un momento. Eh... el «cubo de luz» la cosa que ha estado apareciendo en
nuestra conversación de antes es el medio en el que están guardados los fluctlights de las
personas en Underworld, ¿cierto?
—¿Qué ni siquiera tenías conocimiento de eso? De hecho, un cubo de luz tiene la
forma de un cubo con una longitud de cinco centímetros, con lo cual cada uno es capaz de
contener perfectamente el fluctlight de un solo habitante de Underworld, sin mencionar
los recursos que son necesarios para guardarlo. Un «Light Cube Cluster», de tres metros a
cada lado, fue construido para ensamblarlos juntos.
—Eh, eh... los amontonaron juntos, de cinco centímetros cada uno, tres metros...
Traté de calcular mentalmente el número total de cubos de luz, pero mientras yo
estaba dividiendo trescientos por cinco, Cardinal dijo la respuesta sin esfuerzo.
—El valor lógico para el total sería de doscientos dieciséis mil. Sin embargo, debido a
la existencia del «Visualizador Principal», el almacenamiento principal, debería ser menor
que ese."
—Doscientos dieciséis mil... Así que esa es la población máxima de Underworld, eh...
—En efecto. A propósito, todavía hay una considerable cantidad de espacio sobrante,
así que no hay necesidad de preocuparse por el número de cubos vacíos si estás de humor
para hacer un bebé con alguna dama.
—Claro... espera, ¡no haré nada como eso!
La joven sabia volvió al tema principal después de mirarme sacudir mi cabeza hacia
adelante y hacia atrás en estado de pánico.
—...Sin embargo, como he mencionado antes, cada cubo de luz finalmente alcanzará
el límite de su capacidad de memoria. Administrator ya había vivido por unos ridículos
ciento cincuenta años, incluyendo el tiempo entre el nacimiento y el deterioro de Quinella.
El frasco que contenía sus recuerdos finalmente había comenzado a desbordar todo lo
que había sido guardado en su interior a lo largo del tiempo, causando dificultades en la
escritura, preservación y recuperación de sus recuerdos.
Era un tema bastante frío. No me era algo irrelevante; yo ya había acumulado más de
dos años de recuerdos en este mundo con un ritmo de tiempo acelerado. Incluso si eran
sólo meses, o quizás días los que habían transcurrido en el mundo real, defini tivamente se
había consumido el «tiempo de vida de mi alma».
—Quédate tranquilo, todavía hay hojas en blanco más que suficientes dentro de tu
fluctlight.
Mientras ella leía mis pensamientos una vez más, Cardinal lo señaló con una sonrisa
irónica.
—Cu... cuando dices algo como eso, se siente como que insinúas que mi mente está
vacía...
—Sería como un libro de dibujos contra una enciclopedia, si nos comparas a los dos.
Tras tomar un sorbo de té con una expresión tranquila, Cardinal se aclaró la garganta.
—Déjame continuar. Tal como se esperaba, incluso Administrator entró en pánico
ante la situación imprevista de un límite a la capacidad de su memoria. Después de todo,
existía una esperanza de vida que ella no podía controlar en lo absoluto, a diferencia de
uno con un valor numérico como Vida. Sin embargo, ella no era alguien que acepta su
destino. De forma análoga a cómo ella una vez había usurpado el trono de dios, se le
ocurrió otra solución demoníaca...
Mostrando un ceño de desagrado, Cardinal colocó de vuelta la taza y unió
estrechamente ambas manos, similares a pétalos de flores, sobre la mesa.
—...En aquellos días... esto es, hace doscientos años, había una joven chica, con tan
solo diez años o más, que estudiaba las técnicas sagradas en los pisos inferiores de la
Catedral Central como una novicia de la iglesia. Su nombre era... no, he olvidado su
nombre... Ella nació en una familia de artesanos de muebles en Centoria y por medio de
las fluctuaciones de los parámetros aleatorios, poseía una autoridad de acceso al sistema
un poco más alta que la de los demás. Como tal, le fue designada la tarea sagrada de ser
una monja. Era una joven pequeña y escuálida con ojos marrones y cabello rizado del
mismo color...
Involuntariamente parpadeé y revisé la apariencia de Cardinal, al otro lado de la mesa.
Sólo podía imaginar que la descripción anterior era de sí misma, sin importar cómo fue
reformulada.
—Administrator hizo subir a esa pequeña niña a la sala de estar del piso superior de la
Catedral y le dio la bienvenida con una sonrisa llena de amabilidad como la madre de un
santo. Ese ser habló así; 'Tú serás mi hija desde ahora. Una hija de dios que guiará el
mundo.'... era la verdad hasta cierto punto. En el sentido de alguien que hereda
información desde su alma. Aunque naturalmente, no había ni un solo rastro de amor
maternal. Administrator intentó sobrescribir el fluctlight de la pequeña niña con el
dominio de su pensamiento y sus propios recuerdos importantes.
—Qu...
Un escalofrío se deslizó por mi espalda una vez más. Sobrescribir el alma—el solo
decir esas palabras era lo suficientemente repulsivo. Mientras frotaba mis manos juntas
que se habían puesto húmedas con el sudor frío sin que me percatara, obligué a mi boca
entumecida a moverse.
—A-Aun así, si ella podía manipular los fluctlights con tal detalle, ¿no podía solo
borrar los recuerdos que no necesitaba?
—¿Podrías editar un archivo importante sin preparación previa?
Su réplica inmediata me dejó momentáneamente sin palabras y sacudí mi cabeza.
—N-No, podría hacer una copia de seguridad.
—Por supuesto que sí. Administrator no había olvidado del día completo en el que
perdió el conocimiento cuando recibió los principios de comportamiento del Cardinal
System. Eso es cuán peligrosa es la manipulación directa de los fluctlights. Qué pasaría si
termino dañando información importante mientras pongo mis propios recuerdos en
orden... temiéndolo, ella planeó primero apoderarse del alma de la chica que tenía un
montón de capacidad de memoria restante, asegurar que la copia saliera bien, y luego
deshacerse del alma que había usado hasta entonces, desgastada hasta su límite. Fue
realmente meticulosa, realmente prudente... sin embargo, resultó ser el segundo error
garrafal de Administrator, mejor dicho, de Quinella.
—¿Error garrafal...?
—En efecto. Después de todo, fue solo en ese único movimiento cuando ella tenía a
esa pequeña niña y también gobernado la existencia que ella utilizó hasta entonces... que
los dioses que poseían ese mismo nivel de autoridad ascendieron a dos. Una ceremonia
diabólica, minuciosamente planeada y preparada por Administrator... significaba que ella
finalmente tenía éxito en secuestrar un fluctlight a través del «Synthesis Ritual»; su
nombre significaba la unificación entre el alma y el recuerdo. Yo... yo estaba esperando
por ese momento... ¡por esos largos setenta años!
Yo simplemente miraba a la cara de Cardinal, confundido, mientras ella alzaba la voz
con una leve emoción.
—Espera... Espera un minuto. ¿Quién eres exactamente... la Cardinal que me está
hablando a mí en este momento?
—¿Todavía no lo entiendes?
Ante mi pregunta, Cardinal elevó sus anteojos mientras me susurraba.
—Kirito, conoces mi versión original, ¿no? Trata exponiendo las características del
Cardinal System.
—Eh... em...
Tras fruncir el ceño, traje de regreso recuerdos de mis días en Aincrad. Ese programa
de administración automático fue creado por primera vez por Kayaba Akihiko para
administrar el juego de la muerte, SAO. En otras palabras—
—¿...Realizar ajustes manuales y mantenimiento innecesario, y la capacidad de operar
por largos períodos de tiempo...?
—Por supuesto. Y con el fin de hacer eso...
—Con el fin de hacerlo, tiene dos programas centrales... mientras el proceso principal
realiza el equilibrio de los ajustes, el sub-proceso realiza una comprobación de errores en
el principal...
Al llegar a ese punto en mis palabras, mi boca quedó abierta y me quedé mirando a la
joven chica de pelo arremolinado y rizado.
Debería haber estado muy enterado de que el Cardinal System tenía instalada una
potente función de corrección de errores. Después de todo, la IA, «Yui», quien se convirtió
en la hija de Asuna y mía mientras estábamos despejando SAO fue originalmente un programa subordinado de Cardinal, y yo desesperadamente me esforcé por salvarla de
Cardinal quien la reconoció como un cuerpo extraño e intentó eliminarla sin piedad.
Para ser específico, simplemente accedí al espacio del programa de SAO desde una
consola del sistema, busqué los archivos que conformaban a Yui, los comprimí, y los
establecí como un objeto; llevándomela en las pocas decenas de segundos antes de que
Cardinal detectara mi intervención en el sistema y lo pusiera en cuarentena, sin embargo,
probablemente todo eso fue un verdadero milagro en sí mismo. Esa enorme presencia a la
que me enfrenté, con un único holo-teclado como arma, era en realidad el verdadero
proceso de corrección de errores de Cardinal... que quizás también sería esta adorable
chica sentada justo ahora delante de mis propios ojos.
Consciente o no de mi complejo y emociones profundas, Cardinal habló con un leve
suspiro, como si ella tratara con un niño poco observador.
—Así que parece que finalmente te has dado cuenta. Los principios de
comportamiento que Quinella talló en su propio fluctlight no incluyen solo una. La
instrucción dada al proceso principal, «preservar el mundo». Y la instrucción dada al sub-
proceso fue «corregir los errores hechos por el proceso principal».
—¿Corregir... los errores?
—Cuando todavía era un programa carente de conciencia, existía simplemente para
examinar continuamente los datos arrojados por el proceso principal. Sin embargo...
cuando obtuve individualidad como una «conciencia sombra» de Quinella, por así decirlo,
tuve que juzgar mi propia conducta sin la ayuda de un código redundante o algo de ese
tipo. Verás... sería algo como lo que muchos llaman una «doble personalidad».
—Sin embargo, creo que hay algunos que opinan que las personalidades dobles
existen solo en la ficción.
—Oh, en serio ahora. Sin embargo, es realmente un cuento que podría consentir, ya
ves. Sólo en ese instante en que la conciencia de Quinella está ligeramente relajada, pude
aflorar en la superficie de su proceso de pensamiento. Y pensé acerca de cuán atroz error
está cometiendo esta mujer, Quinella... es decir, Administrator.
—¿Fue... un error...?
Instintivamente le pregunté. Después de todo, si la preservación del mundo formó la base del proceso principal de Cardinal, lo que Quinella había hecho estaría de acorde con
este principio, independientemente de cuán radicales fueron las medidas que se
adoptaron.
Sin embargo, Cardinal respondió en un tono digno, mirándome de frente.
—Entonces permíteme preguntarte. ¿El Cardinal System de ese otro mundo que
conoces perjudicó alguna vez a los jugadores con su propia voluntad, aunque sea una vez?
—N-No, no lo hizo. Es cierto, fue el máximo enemigo de los jugadores, pero... no
había ataques directos no razonables, lo siento por eso.
Cuando me disculpé espontáneamente, Cardinal hizo un breve resoplido por la nariz y
continuó.
—Sin embargo, lo hizo. Ella impuso una pena más cruel que incluso la muerte a
quienes dieron señales de albergar sospechas u oponerse al Taboo Index que ella
estableció... No obstante, voy a dejar los detalles para después. En ese extremadamente
raro descanso del sueño, yo, el sub-proceso del Cardinal System, juzgué que Administrator
era un gran error en sí misma y traté de purgar eso. Para ser específica, intenté saltar
desde el piso superior en tres ocasiones, traté de apuñalar mi corazón con un cuchillo dos
veces, e intenté incinerarme a mí misma con técnicas sagradas en dos ocasiones. Después
de todo, podía reducir mi Vida a cero en un movimiento, incluso la ministra máxima no
estaría exenta de ser suprimida.
Las heroicas palabras que salían de la boca de la joven y dulce chica me dejaron sin
habla.
—El intento final fue una verdadera lástima. Mediante la liberación de una técnica
sagrada con una capacidad de ofensiva excepcional de entre la totalidad del montón, al
hacer llover una tempestad continua de ataques de relámpagos sobre mí misma, incluso
la enorme Vida de Administrator se redujo a un simple y solo dígito. No obstante, el
proceso principal tomó el control sobre el cuerpo... Con las cosas en ese estado, cualquier
tipo de lesión o herida mortal fue declarada nula. Ella regresó a como siempre era en una
abrir y cerrar de ojos con una técnica sagrada ritual de recuperación total. Por otra parte,
debido a ese incidente, incluso con todo lo que tenía, Administrator me vio genuinamente
a mí... en otras palabras, sub-proceso bajo su subconsciente, como un peligro. Al notar
que las únicas veces que pude acuñarme a mí misma en el control correcto fue cuando ocurrían algunos conflictos dentro de su fluctlight... o simplemente al presentarme en
momentos de angustia emocional, ella intentó un método impensable para retenerme.
—¿Impensable...?
—Sí. Incluso si ella fue elegida como una hechicera de Stacia desde su nacimiento,
Administrator era hija de un hombre. Poseía por lo menos las emociones para mirar las
flores y pensar en su belleza o para escuchar la música y encontrarla divertida. El circuito
emocional que desarrolló en ese entonces aún permanecía en las profundidades de su
alma, inclusive después de convertirse en un ser absoluto, mitad humano y mitad dios.
Ella consideró que la emoción era la fuente de su malestar cada vez que encontraba un
evento inesperado, por insignificante que fuera. Por tanto, hizo uso libre de los comandos
exclusivos de supervisor para manipular su fluctlight dentro de su cubo de luz y suspendió
su propio circuito emocional.
—¿Qu... suspender su propio circuito, eso significa básicamente que estaba
destruyendo una parte de su alma?
Repliqué mientras me estremecía y Cardinal asintió con la cabeza en silencio con una
mueca.
—P-Pero bueno, algo tan escandaloso como eso... suena como una acción aún más
peligrosa que la copia de su fluctlight anteriormente, aunque...
—Por supuesto, ella no manipulaba su propia alma sin preparación previa ni algo por
el estilo. Esa mujer, Administrator, fue lo suficientemente prudente para odiar cada idea
de aquello, mira. ¿Alguna vez has notado la presencia de diversos parámetros ocultos que
no se visualizan en la Ventana Stacia... o en otras palabras, la ventana de estado?
—Aah, bueno, un poco... Vi un puñado de humanos con fuerza y agilidad que no
coinciden con sus apariencias físicas, después de todo...
Quien se me vino a la mente mientras respondía fue a quien le serví por un año como
un valet aprendiz, Sortiliena-sempai. Su cuerpo era delgado y estrecho, y quizás incluso
podría considerarse como delicado, pero me superó muchas veces cuando cruzamos
espadas.
La joven chica de quien sentí una admiración sin límites, a pesar de una apariencia
externa más frágil incluso que senpai, dejó caer su sombrero ante mis palabras.
—Sí. Y dentro de esos parámetros ocultos, existía uno llamado «Transgression
Quotient» (Coeficiente de Transgresión). Un valor evaluado al analizar la obediencia a la
ley y las reglas de cada habitante a través de su forma de hablar y comportarse, todo esto
convertido en números. Probablemente había sido creado para el fácil monitoreo de parte
de los observadores del mundo exterior, pero Administrator rápidamente cayó en cuenta
que este parámetro podía ser usado para revelar a los humanos escépticos al Taboo Index
que ella había establecido. Para ese ser, aquellos humanos eran como una bacteria que se
colaba en una sala esterilizada. Ella sentía una urgente necesidad de exterminarlo, pero
ella no podía romper ese único comando de asesinar enseñado de generación en
generación, a ella también, por sus padres cuando era joven. En consecuencia, para poder
corregir a esos habitantes con un alto «Transgression Quotient» sin daño y sin recurrir al
asesinato, Administrator en vez de eso llevó a cabo un procedimiento horrible sobre ellos.
―¿Eso es?... ¿La cosa de la hablaste antes, ese castigo más cruel que la muerte?
―Absolutamente. Ella usaba a esos humanos con un alto «Transgression Quotient»
como sujetos experimentales para rituales de artes para manipular su Fluctlight
directamente. Cual parte del Light almacenaba que información, que parte debería ser
manipulada para hacerlos perder sus memorias, perder sus emociones, perder sus
procesos cognitivos, y así seguía la lista... Incluso los observadores del mundo exterior
dudaron en llevar a cabo tan atroces experimentos humanos.
Sentí escalofríos escalando por mis brazos cuando escuché esa última frase enunciada
en un susurro.
Cardinal también hizo una expresión sombría y siguió con la última frase con una voz
sepulcral reprimida.
―... Los humanos ofrecidos para los experimentos iniciales perdieron sobre todo su
individualidad, siendo reducidos a seres que existen meramente para respirar.
Administrator congeló su carne y Vida, y los preservó en la catedral. Su «Fluctlight
Manipulation Art» avanzó conforme se repetía tal injusticia. Ella realizó la suspensión de
sus emociones en un intento para retenerme también, solo después de haber intentado
una y otra vez en los humanos traídos a la torre. Ella tenía alrededor de cien años en ese
entonces
―... ¿Ella tuvo éxito?
―Se podría decir que sí. Falló en abandonar todas las emociones pero logró purgar a
aquellos que actuaron como la fuente de esa brusca agitación: Miedo, Terror y Rabia. Desde entonces, el corazón de Administrator nunca se turbó sin importar la clase de
situaciones que se encontrara. Ella verdaderamente era un dios, no... ella era
verdaderamente una máquina. Una conciencia, que existía solo para preservar, estabilizar
y asentar el mundo... Me mantuve en un rincón del alma de ese ser, perdiendo así toda
oportunidad de aparecer en la superficie. Hasta que ese ser llegó a la edad de ciento
cincuenta años, alcanzó la capacidad límite de un fluctlight, y trató de hacerse con el alma
de una moza triste.
―Pero de acuerdo a como fue la historia, el alma del Administrator que tomó
posesión de la hija del dueño de la tienda de muebles era una copia perfecta de la original,
¿cierto? En otras palabras, esa alma estaría despojada de sus emociones también... así que,
¿por qué tú fuiste capaz de aparecer en ese momento en particular?
La mirada de Cardinal deambuló por un tiempo al hacerle mi pregunta, Ella debe estar
escudriñando de extremo en extremo de esos extraordinariamente largos doscientos años.
Rápidamente, una voz muy, muy suave salió de esos carnosos labios.
―Mi vocabulario no contiene las palabras necesarias para expresar de manera precisa
lo que pasó en ese instante... en esa experiencia, maravillosa, a pesar de como debió
haber causado problemas... Llamar a la hija del dueño de la tienda de muebles al último
piso de la Catedral, Administrator intentando copiar y sobrescribir por medio del
«Synthesis Ritual». Y todo eso tuvo éxito sin una falla. Lo que residía dentro de la
muchacha tenía sus inútiles recuerdos borrados, lo que podría ser llamado una versión
comprimida de la individualidad de Administrator, no, de Quinella. El acuerdo inicial debía
haber sido para la Quinella original, que gastó su vida entera, para borrar su propia alma
después de confirmar el éxito... sin embargo...
Las mejillas de cardinal, adornadas por un rubor sano como corresponde a una niña,
ya habían perdido su color como una hoja de papel cuando finalmente me di cuenta. Ella
había asegurado que no poseía emociones, pero lo que ella sintió en ese momento, no
podía ser otra cosa más que un miedo profundo.
―Sin embargo, la duplicación de su alma finalizó... en el instante que nosotras
simultáneamente abrimos nuestros ojos sin rodeos... una clase de enorme impacto nos
invadió. Eso era básicamente... el pensamiento de evadir una situación donde dos
humanos exactamente iguales existían, una situación que inicialmente habría sido
imposible... ¿Creo que sería algo como eso? Yo, no, nosotras nos quedamos mirándonos, e
inmediatamente después sentimos una abrumadora hostilidad. Sin importar las
circunstancias, nosotras no podíamos permitir la existencia del alma así fue como parecía... Sobrepasaba la mera emoción, hasta llegar al instinto... no, tal vez
había sido algo como la regla número uno grabada en los seres inteligentes. Si esa
situación se mantuviera, ambas almas probablemente no hubieran podido soportar el
impacto y serian aniquiladas. Sin embargo, no estoy segura si podría llamarlo una lástima,
pero eso no sucedió. Después de todo, la fluctlight que fue copiada dentro de la hija del
dueño de la tienda de muebles se quebró un momento más rápido y en ese instante, yo,
la sub-individualidad, estableció el derecho de control, nosotras nos reconocimos
mutuamente como Administrator, aquel que residía en el cuerpo que originalmente
pertenecía a Quinellla, y el sub-proceso de Cardinal, que yacía dentro del cuerpo del cual
era propietario la hija del dueño de la tienda de muebles. Con eso, las almas cesaron la
descomposición o destrucción y se estabilizaron.
Un alma desmoronándose.
Las palabras de Cardinal me trajeron a la mente el triste y asombrosos fenómeno que
había tenido lugar hace dos noches, uno del cual no estaba seguro si estar entristecido o
alegre.
Yo cruce espadas con el espadachín élite en entrenamiento número uno de la Sword
Mastery Academy, Raios Antinous, y corté sus dos brazos con el movimiento secreto del
Serlut-Style «Whirling Current». Esa lesión grave podría haber sido considerada como una
herida fatal en el mundo real, pero su vida no hubiera acabado en Underworld con el
tratamiento adecuado. Yo habría tratado de mantener el valor numérico de su Vida (lo
que funciona como "hit points" en este mundo) al vendar las heridas abiertas en sus dos
brazos para evitar el sangrado.
Sin embargo, antes de que pudiera suceder un extraño grito provino de Raios
mientras se desplomaba en el suelo y encontraba su fin.
La sangre había continuado fluyendo desde sus heridas en ese momento. Es decir su
valor de Vida no había llegado a cero aún, en otras palabras, eso significaba que Raios
había muerto a causa otra razón distinta de la pérdida total de Vida.
Justo antes que colapsara, Raios se encontró a sí mismo en una situación donde tenía
que elegir entre su vida y el Taboo Index; una para proteger y otra para romper.
Él no pudo elegir y su alma finalmente terminó haciéndose pedazos, atrapado en una
especie de bucle infinito, ¿no?
