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Louis es el dueño de una de las disqueras de Londres y quiere toda costa que Harry Styles estuviera dentro de su empresa, el muchacho tiene al menos dos años de carrera y su representante, Niall Horan, todavía estaba en duda si debía firmar contrato con él.

Había platicando ya con el hombre muchísimas veces por teléfono pero éste se estaba haciendo el difícil, sabía que su estrella necesita una disquera más poderosa que en la que está para poder llegar más lejos, debía reconocerlo, el chico era muy valioso.

Estaba en su oficina, platicando con su mejor amigo, Liam Payne, sobre el concierto que daría Harry esa misma noche en la ciudad.

—Tengo boletos en primera fila y tenemos que quedarnos al final para poder negociar con Niall...—dijo Louis sacando los boletos del cajón de su escritorio— y si se puede, con el muchacho—su voz y su sonrisa hacían notar el tono pícaro. 

—Realmente estas obsesionado con ese chico—decía Liam soltando una risita.

Y en realidad, Louis si lo estaba...en secreto, claro. Su amigo no sabía que en realidad lo quería, más que sólo trabajo, deseaba a ese chico, que para sus ojos, era perfecto.

Louis se quedo pensando tanto en el rizado que no se dio cuenta de que Liam le hablaba.

—¡LOUIS!—gritó haciendo que este se sobresaltara— te me vas del planeta, ya deja de pensar en él, si no se da el contrato ¿qué más da? Hay mucha gente talentosa que podemos tener.

Pensó en que tal vez el castaño tenía razón pero nada costaba intentarlo—Esta bien, pero ya tenemos los boletos, no podemos desperdiciarlos—tenía un plan y estaba seguro de que no le fallaría.

Horas después, esta Louis en su casa, por no decir mansión, arreglándose para ir por Liam y posteriormente dirigirse hacia el lugar del concierto.
Quería verse sexy, el sabía lo que tenía y debía mostrarlo y con eso, conseguir lo que quiere, así que opto por ponerse un traje azul con unos pantalones muy ajustados haciéndose anotar sus atributos que no le molestaba para nada tenerlos. Se arreglo el cabello hacia arriba y se roció una fragancia con un olor exquisito.

Liam entra al auto y lo primero que puede notar es el aroma de su amigo.—¿A dónde tan perfumado?—quiso bromear.

—Con el olor se conquista, no sólo a la mujer.—dijo volteando con Liam mientras le guiñaba el ojo y mostraba una sonrisa coqueta, para después centrar su vista al frente.

Al llegar a la arena, buscaron un lugar para estacionarse, algo que les fue difícil debido a las personas que había. Cuando por fin lograron encontrar lugar, bajaron del carro, atrayendo miradas de mucha gente porque ¿quién va en traje a un concierto? Pero ese no era asunto suyo.

Entrando al lugar, decidieron comprar algo de tomar para así no perderse nada durante el show, fueron a sus asientos, cabe mencionar que obviamente estaban en primera fila, y esperaron para que comenzara todo.

Se apagan las luces y saben que ya es tiempo, se ponen de pie, gritos se escuchan por todos lados, Louis se queda viendo al escenario ignorando por completo a su amigo, se prende un reflector en el centro del mismo, se ve a Harry subiendo lentamente a su punto inicial, el oji-azul se queda estático, tiene al hombre más perfecto de la tierra frente a él, a unos cuantos metros, lo desea tanto.

Comienza la música y es momento de disfrutar el concierto.

Louis piensa en que hacer para llamar su atención y sin darse cuenta, Harry ya lo está viendo, no tuvo que esforzarse, el sabía que su apariencia le ayudaría mucho, sus ojos se conectaron y en ese momento, Harry hace un guiño que esta seguro que es para él y sonríe coqueto. Ya sabe que hacer.

Just For Tonight  //OS-Larry Stylinson//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora