The Moonlight (Taoris)

Capítulo 41

~Dedicado a: isabeljimenz ♡

Estoy en literatura, mi última clase.
Asco. Mejor pienso en YiFan y su madre. Realmente nuestra relación se ha fortalecido, Yoon Ah me trata muy bien, conversamos constantemente y he llegado a conocerla mucho convirtiéndose en... Digamos que esa madre que siempre soñé.
Y YiFan.
¡Es lo mejor que me ha pasado! Todas las noches hablamos y me encanta, me encanta la manera en la que me habla, la confianza que tiene conmigo. Lo que hicimos hace dos días. ¡Ay! Sólo pensar en eso me pone de todos los colores. ¡Fue hermoso!

Mi primera vez con YiFan.

Hasta suena hermoso.

Al momento en el que le dije "Te quiero" me dí cuenta que no lo quiero, lo amo. Raro ¿No?

En todas las clases me dedico a pensar en YiFan con una boba sonrisita.

.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.;.

Los pasillos están desiertos así que apresuro el paso. Me causa una sensación de ansiedad ver todo vacío.

Un chico de mi clase el cuál nunca me quiso dirigir la palabra me suplicó que le explicara el tema hoy tratado en Cálculo al ser yo el segundo mejor de la clase.
Acepté y me arrepiento completamente, tengo la garganta seca de tanto repetir lo mismo al muy cabeza dura. Y gracias a él YiFan ha de estar sumamente preocupado con lo exagerado que es.

El autobús de esta hora ya pasó, así que el siguiente demorará aproximadamente media hora la cuál no estoy dispuesto a esperar con mi casi nula paciencia.

A unos poco minutos de haber salido del colegio me siento observado y al girarme efectivamente hay un auto negro que sigue mi paso. Eso me altera y camino más rápido. Al ver que el auto también acelera comienzo a correr presa del miedo de lo que me pueda suceder. En eso el auto se detiene un poco más adelante de mí y se bajan dos tipos encapuchados y al parecer en forma. Por desgracia al retroceder tropiezo y ellos aprovechan viniendo hacia mí. Tiemblo, estoy absolutamente ansioso y no me extrañaría un inoportuno desmayo. Odio ser de esas personas que se bloquean completamente al ser presa de los nervios.
Para mi mala suerte no hay personas cerca y eso es realmente predecible al ser este un lugar poco transitado y casi abandonado.
Uno de los sujetos susurra mientras ata mis muñecas. "Más vale que cooperes".
El más alto y fornido me levanta como un saco de papas y me da una nalgada. Eso activa mi imaginación y aumenta mi temor.
Al subir veo a otros tres tipos más, pero quedo impactado al ver al copiloto. Es Sehun.
Los dos de antes se sacan la capucha y logro verlos a todos con claridad. Pero especialmente a Sehun, quién se percata de ello por el retrovisor y se voltea con una sonrisa.
- ¿Y esa cara? ¿No te dije que serías mío? -
Bajo la mirada. No quiero hablar. No quiero imaginar ni saber que pasará, sólo quiero teletransportarme junto con YiFan y abrazarlo.
Se deslizan lagrimas por mis mejillas.
Estoy asustado.
- Mira mi ardiente y sexy ZiTao, lo que pasará no se lo podrás contar a nadie. ¿Sabes por qué? Porque YiFan saldrá perjudicado. Y creo que tú y todos en el instituto tienen conocimiento de mis contactos y maneras muy creativas de vengarme ¿No?
No creo que tenga que explicar todo así que apresurémonos a la acción. -
Después de sus palabras me amordazan y nos detenemos en una pequeña casa con un amplio patio que hace que esté muy separada de las viviendas vecinas, por el corto recorrido deduzco que no estamos muy lejos del instituto, aunque aun no logro ubicarme. Me carga nuevamente el mismo chico, entramos y me tira a la cama de un cuarto. Por lo que logro ver la casa está un poco descuidada, probablemente deshabitada.
¿El cuarto? Vacío.
El chico sale y entra Sehun.
- ¿Quieres jugar? Vamos, dí que sí zorra. -
Me gustaría escupirme la cara por lo asqueroso que me resultan sus gestos.
- ¿No me vas a contestar? Bueno, no es como si te fuera a hacer caso. -
Se me acerca y yo quito el rostro.
Me lo toma con fuerza, lastimándome. Me besa, asquerosamente mete su inmunda lengua en mi boca en un descuido mío y comienza a morder con saña mis labios magullándolos.
Yo me resisto en todo momento pero no puedo con este animal. ¿Como puede verse tan delicado?
Se separa de mí y me manda una mirada libidinosa que me causa grandes ganas de vomitar.
- ¡Chicos, vengan a jugar!

-Espera, ¿¡Qué!?

- Cállate. -

Entran los cuatro tipos de antes.
- Haznos una mamada, a todos. -
Ok, ahorita mismo estoy en shock y aterrado. Nuevamente las lágrimas comienzan a recorrer mis mejillas. Sólo puedo pensar en YiFan y me siento mal.
Ellos se bajan los pantalones y boxer para dejar sus flácidos miembros expuestos, menos Sehun, él me mira expectante. Me acerco a dos de ellos y tomo sus miembros con todo el asco del mundo. Comienzo a mover mi mano hacia arriba y hacia abajo con miedo, temblando de ansiedad.
Pero me pongo firme y trato de ponerle esmero. ¿Tal vez si lo hago bien no me hagan nada más?
Tal vez...
Entonces me aventuro a meterme uno a la boca, con todo mi pesar lo introduzco entero mientras mi mano trabaja en el contrario y succiono de la base a la punta, utilizo todos los conocimientos obtenidos con YiFan en esto, directo a mi consciencia.
Al estar suficientementemente erecto me dirijo al contrario, con bello púbico.
¡Asco!
No aguanto la mitad con este tipo y me entran arcadas.
- ¡Vamos puta! -
Me atraganto con mi propia saliva y mis ojos se llenan de lágrimas mientras todo compulsivamente.
- Ya que se nos muere de asco la putita vayamos a lo siguiente. -
Se me acerca nuevamente Sehun.
Me comienza a quitar la camisa y yo le doy un manotazo, lleno de vergüenza.
- Oh. ¿Te gusta más salvaje?
Y me jala la camisa arrancándomela. Pego un gritillo del susto.
Sigue con mi pantalón desabrochándolo y bajándolo de un tirón junto a mi boxer, bajo la expectante mirada de los demás chicos.
Se me sale un sollozo.
No tengo palabras para describir toda la desesperación que tengo.
Es obvio que no podré salir de esta. ¿Por qué forcejear?
Sehun me voltea y busca mi entrada, los otros chicos se acercan.
- Tranquilos, todos disfrutarán de esta puta. -
Posiciona su asqueroso miembro en mi trasero y mi llanto aumenta de intensidad.
Entra de una estocada, sin contemplación, ni preparación, con saña, con el propósito de un placer egoísta, cambiando el rumbo de mi vida, hacia la ruina. Ni siquiera sé si sea capaz de superar una depresión tan fuerte sucesora a esto.
El dolor es insoportable, se me retuercen las entrañas por lo cuál dejo salir un grito que desgarra mis cuerdas vocales.
Sigue moviéndose sin remordimientos, rápido y yo lamentándome. Es horrible todo. No puedo con el dolor. Pero contradictorio a todo tengo una erección. ¡Una erección! ¿En estos momentos? Siento un caos interno. Me siento culpable al sentir placer con esto. YiFan, lo traiciono.
Después de segundos de tortura física y psicológica Sehun se corre y esparce su semen por mis nalgas y espalda. No me puedo mover, me duele mi existencia. Entonces recuerdo a los demás chicos, por un momento olvidé su presencia.

Lo siguiente es un tiempo indefinido de dolor, en el cuál sentí mi ano desgarrarse y la sangre correr por mis piernas.

Al terminar no me muevo de mi sitio. No puedo. Sangre. Necesito sangre, quiero morir. Total, estoy vacío. No creo que sería capaz de verle la cara a YiFan. No, no lo merezco. Estoy sucio, asqueroso, soy un error, un producto de algo como lo que me acaba de pasar. No merezco nada. No merezco vivir.

¡Necesito algo afilado! Cuando entré pensé haberla visto vacía, pero no, un pequeño mueble, en a esquina. Es mi esperanza.
Me arrastro como puedo hasta llegar ahí y siento las fuertes punzadas en la parte baja de mi cuerpo.
Un espejo. Perfecto.
Justo en el primer cajón.
Lo estrello contra es suelo, tomo uno de los medianos trozos y respiro hondo.
- Te amo YiFan, gracias por todo. Desde el cielo te protegeré yo a tí. Mi amor... -
Lo paso de mi muñeca hacia arriba, profundo, viendo la sangre brotar como nunca antes. Ya no siento dolor físico, sólo un sueño profundo.
Cierro mis ojos.

Ya, pueden matarme (?)
Okno, por favor, comentar errores. Creo que este capítulo tiene algunos.
¿Qué les pareció todo?
Gracias a todos por su apoyo y perdón por la demora.