Capítulo 14

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#Yo shippeo a Lia con Ticy
#Nicy #Muppeter

Soy un asco con los shippeos

Aquí se reporta una muuuy incumplida Mara :( upps
""

Capítulo 14:(P.D.V Varsi)

 ¿Qué es esto? ¿Una reunión?

 — Bienvenidas, chicas. Mi nombre es Slenderman. 

 Woah, sí qué es gigante... Y aterrador.

 — Hola— Sonrió Valeria.

 — H-hola...— Susurré. Me siento impotente junto a tal jirafa. 

 Un chico de capucha blanca y sonrisa cortada se levantó de la mesa. Sonrió coqueto y carraspeó.— Qué hay, soy Jeff.

 Asentí a modo de saludo. 

 — Yo soy Zero. La amiga del novio de alguna de las dos. 

 Miré a Puppeerer. Estaba completamente sonrojado. 

 Yo reí.

 Una niña pequeña de cabello ¿Negro? ¿Café? Se acercó a nosotras corriendo.— ¡Yo soy Sally! ¿JUGAMOS JUGAMOS JUGAMOOOOS? ¡Anden! ¡Por fa- 

 — ¡Hija! — Rió Slendy—. Luego podrán ir contigo. Ahora mismo vamos a comer.

 — Ojalá que Eyeless no haya hecho de cenar...

 —  No, no lo hizo.

Sentí una mano rodeando mi cadera.

 — ¿Son de tu agrado, señorita policía?

 —  Sí Pupeeter. Lo son.

   — Bien, siéntate.

Lo seguí hasta una silla al otro extremo del de mi hermana.

   ¡Quiero sentarme junto a tí!

Ah, no he explicado eso... Valeria y yo tenemos un extraño don. Podemos escucharnos a través del pensamiento.

¡Y yo junto a ti!

Nina llegó caminando con la comida. ¿Esos son intestinos?

Todos se sirvieron al igual que Val. Parecía que estábamos aquí por nuestra propia voluntad.

- Cuéntenos, ¿Cómo es que conocieron a los Proxys? -Soltó Jane.

- ¿Proxys? - Susurré.

Puppeeter me apretó la mano. Con que no sabían que estuviésemos secuestradas...

- Valeria y Varsi caminaban por la calle y ya saben cómo es Ticy... Habló con ellas como si de un mejor amigo se trataba.

Entrecerré los ojos.

- Yo no recuerdo eso...- Siseé con los dientes apretados.

- Ni yo- Sentenció Val.

Ticy palideció.- Qué buena broma amor...

- ¿Sí lo recuerdas, no bebé? - Mierda... Hay un puto cuchillo en mi espalda.

Mi vida o la justicia...  No puedo creer que vaya a hacer esto.

- Sí - Reí nerviosa.

De repente sentí como el artilugio filoso dejaba de atentar contra mi piel. Solté todo el are que tenía guardado.

- Esta me la pagas caro -Susurraron en mi oído.

Un escalofrío me recorrió la espalda.

Por favor, no...


Amor DestructivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora