Capítulo 2

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En mi vida he visto y gozado con mujeres hermosas pero ninguna como Ross Müller, pero lo que más me impacta no es sólo su belleza sino sus ojos, esa mirada color ámbar llena de alegría, seguridad e inocencia, pero si la observabas bien se puede notar un dolor hiriente y de hace mucho tiempo estancado ahí.

Dicen que la mirada son las ventanas del alma y lo creo porque si hubiera hecho caso a lo que veía en los ojos de otras personas hubiera evitado una desgracia.

Vuelvo a la realidad y dejó mis pensamientos, para volver a las entrevistas de las cuales ya me estoy hartando, sólo me ha tocado con muchachas que al ver que soy joven me coquetean creyendo que así me van a poder ganar puntos conmigo pero han sido soportables hasta que la señorita Dubanov, ella es hermosa no hay que negarlo una belleza clásica, ojos azules, una cabellera rojiza y tez blanca es hermosa pero arrogante demasiado para mi gusto se cree lo último. Veo las carpetas bellamente ordenadas por Ginebra mi asistente mejor conocida como "mujer calmate" siempre intenta que todo este perfecto por su TOC perfeccionista odia cuando me atraso, agarró la siguiente carpeta y veo que es el de la queridísima señorita Müller, leo un poco su información, nació en Estados Unidos estudió fotografía con una beca en Francia algo que me parece curioso es que en Estados Unidos y Francia hay buenas universidades de arte y ella decidió estudiarlo aquí en Maastricht increíblemente.

Oigo el clic de la puerta y me acomodó para cuando ella entre desde donde estoy podré ver esa hermosa figura en el vestido rojo que trae.
Veo a Ross en la puerta de la oficina y observo que me escanea con la mirada con en mismo descaro que en el ascensor, se muerde el labio y yo tengo que hacer un esfuerzo titánico para no levantarme y soltarle el labio de sus dientes. Nuestras miradas se cruzan y nos retamos silenciosamente, ella es la primera en apartar la mirada, la veo entrar con seguridad y se dirige a unos de los sillones de cuero blanco en frente de mi escritorio.

--Buenos días señorita Müller -digo para ponerme el chip de entrevistador

-Buenos días señor Lukyanova-contesta con su voz melódica que puede hipnotizar como el canto de sirena

--¿Sabe el porqué de esta entrevista? -lo pregunto siempre aunque se que no saben la respuesta

-No señor Lukyanova, me imagino que es para conocer mejor a sus becados

- no es para eso pero nos iremos por ahí para conocer a la señorita Müller. --Sí exactamente es para eso, entonces haga un resumen de sus datos.

-Ok está bien- dice y veo que encuadra sus hombros para acomodarse y proseguir- Mi nombre es Ross Müller, soy estadounidense, tengo 23 años, me vine de Estados Unidos a Francia cuando tenía 19 años, en Francia estudie fotografía becada y hace un año vivo en Maastricht gracias a la beca que me recibí para estudiar Historia de Arte. Se hablar 5 idiomas y aparte de eso nada más.

La veo y me intriga era muy joven cuando se vino de Estados Unidos a Francia.
--¿Se podría saber porqué se vino de Estados Unidos tan joven?

-No, no se puede saber- dice en tono brusco-,son asuntos personales- termina de decir en tono más amable.

--¿Porque decidió estudiar Historia del Arte?- digo para cambiar de tema porque parece no gustarle hablar de el porqué se vino a vivir a Europa algo que me intriga aun mas

-Porque siempre he amado el arte mis abuelos dicen que lo primero que hice fue hacer una pequeña obra del arte con unas acuarelas que eran de mi abuela además soy curiosa y quiero saber de donde viene las majestuosas obras de arte que hay, cuáles son sus autores y saber sobre su inspiración - dice sonriendo mientras lo relataba.

--Entonces, ¿su familia era de pintores?

-No para nada la única que pintaba era mi abuela pero nunca hizo una exposición era más un hobbie que una profesión pero aún así amo el arte

.Pasado InvencibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora