My Sexual Doctor. © [One Shot Lemmon]

Única parte.

Ya había pasado suficiente tiempo desde que no visitaba el médico para un chequeo normal.

Exactamente un año.

Era necesario ir y quedarme tranquila en que me encontraba sana, después de todo quiero vivir bastante tiempo.

Arreglé una cita con mi doctora de siempre, la doctora Lee Min Yung. Era carismática, de edad avanzada y muy gentil con todos sus pacientes, en especial conmigo.

Me alisté, bajé por el elevador de mi edificio y me encaminé a la consulta. Mi vestimenta era simple pero abrigada, ya que el invierno ya había llegado a Seúl. Pase mi bufanda por mi nariz y cerré los ojos ante una brisa helada que chocó contra mi rostro.

Mi teléfono comenzó a sonar indicando que una llamada entraba por mi buzón, me apresuré en contestarlo y no perder la llamada. Odiaba que pasara eso.

—¿Hablo con la señorita Park ____? —Dijo la voz por el otro lado de la linea.

—Ella habla. —Dije humildemente.

—Estupendo, bueno señorita Park, quería comunicarle que la doctora Lee no podrá atenderla hoy por una emergencia ocurrida muy entrada la madrugada, a cambio envió a un reemplazante para verla. —Me tense inmediatamente. ¿Reemplazante?

—Dios, no puede hacer eso, no tengo otra hora y no puedo ver a otra persona. —Dije nerviosa.

—Lo sentimos mucho. La doctora Lee estima mucho al doctor que envió es un —.-

—¿Es un varón? —Corte irrespetuosamente a la mujer de la otra linea. —Lo siento.

—No hay problema, y sí, es un varón; el doctor Kim Seok Jin. Es un profesional y ha trabajado en este hospital hace muchos años... No hay de qué preocuparse señorita Park. —Dijo tranquila.

Bufé frustrada. No podía cancelar la cita hoy, era la única que podía conseguir, pero tampoco era que quisiera mostrarme ante los ojos de un extraño, mucho menos siendo un chico.

No me queda de otra.

—Está bien. Estaré allá en unos minutos, no cancele nada. —Dije.

—Perfecto, avisaré al doctor que vendrá. Que tenga un buen día. —Dijo y colgó.

Caminé molesta hasta el hospital, con ahora, no muchas ganas de entrar en el blanco edificio. Entré enojada y me acerqué a la secretaria que tenía en frente.

—Soy Park ____, tengo una hora con la doctora Lee Min Yung. —Dije atropelladamente, pero de todos modos la secretaria me entendió.

—Enviaron un reemplazante, ¿está al tanto de eso? —Asentí con una mueca en los labios. —Bien, puede sentarse y esperar hasta que el doctor esté listo.

Hice una reverencia y me alejé a sentarme. Había una variedad de revistas muy grande, desde revistas médicas hasta Playboys que supongo que habrían sido olvidadas por algún adolescente sucio de este país.

Los minutos pasaron lentamente, y eso hacía que mis nervios aumentaran más de lo que ya los tenía. En mi mente, una imagen grotesca del doctor desconocido se formo. Un señor de edad avanzada, gordo con mal aliento y sudor por todas partes.

Quería salir corriendo.

—¿Park ___? —Dijo la secretaria. —El doctor Jin la atenderá ahora.

Mi piel se erizó y me pare rápidamente, la secretaria indicó la puerta y yo entre luego de tocar.

El chico que se encontraba en frente de mí era completamente diferente a la imagen creada en mi mente. Era alto, delgado, su cabello era marrón y parecía bien peinado pero a la vez despeinado, bastante sexy. Sus labios estaban en forma de sonrisa los cuales los hacían ver muy apetitosos; sus ojos eran marrones y tenían un pequeño brillo divertido en ellos.