"Se siente bien. Solo es dolor, la angustia pasara"
Frecuentemente lo único que me ínsita a salir de mi casa es caminar por las frescas e hermosas calles de mi ciudad;Como siempre lo único que me acompañaba era mi ipod para dar sonido a mis oídos.
Llevaba mis audífonos puestos con la música a todo volumen mientras caminaba. De pronto algo me detuvo, un auto. No era tanto el auto, sino las personas que estaban adentro. Besándose.
Me acerque un poco para ver a la persona que se me hacia conocida. Quite mis audífonos y los metí en una de las bolsas de mi pantalón. Cuando estuve lo suficientemente cerca no podía creer lo que estaba viendo, esto era mentira, estaba soñando.-Mamá –Fue lo único que salió de mi boca y lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos.
Se separo del hombre y se sorprendió al verme, el hombre estaba tranquilo, pero mi madre sorprendida y no encontraba palabras adecuadas para responder a lo que debía darme una explicación.-Hija, no es lo que tú crees –Se excuso.
Esas palabras para mi eran estúpidas. ¿Cómo no va a ser lo que creo? Si lo estaba viendo con mis propios ojos.
-Debes decirle la verdad –Pronuncio el hombre.
La miraba esperando alguna explicación a esto. Me encontraba llorando, me parecía todo tan irreal.
-Sube al auto –Pidió mi madre.
-¡Dime qué es esto! –Grité exasperada.- No subiré a este maldito auto –Sollocé.
-Por favor, sube –Ahora ella se encontraba llorando.
No quería, pero debía. No quería salir corriendo e ir a casa, encerrarme y seguir llorando.
Obedecí a lo que me pidió. Abrí la puerta del auto y entre.El hombre arranco y fuimos a un lugar más alejado de la ciudad. Detuvo el auto y hablo mi madre:-Yo no quería que lo conocieras de esta manera. Lo quiero –Se refirió al hombre.- Ya no quiero a tu padre. Mi amor por él acabo
Yo no sabía que decir, solo lloraba. No podía creer todo esto, mi madre había engañado a mi padre. Ahora esto es lógico, cuando ella hablaba con mis primas en secreto y me excluía de ahí. Cuando sentía que las prefería a ellas y no a mí. Cuando salía con ellas y a mí me dejaba por un lado. Ellas sabían de esto, prefirió decírselo a ellas que a mí. Sentía un odio muy grande y no sabía si hacia ella o al hombre. Si mi padre llegase a enterar de todo esto, daría por muerta a mi madre y a este tipo "su amante".
-Yo amo a tu madre –Dijo el hombre.
-No le digas a tu padre –Dijo con temor mi mamá. Ella sabía a qué se enfrentaría si se entera.
No diré nada. Solo regresemos a casa –Pedí
Y así fue, regresamos a casa. Yo ida en mis pensamientos, me daba un asco ver a mi madre con ese tipo. Un asco enorme. Odio, hacia las perras de mis primas y mi madre. La hacía parecer una cualquiera. Duele saber que en un matrimonio haya este tipo de cosas. Peor aún, que sea tu madre la que se revuelque con otro y le estén viendo la cara de idiota a tu padre.
Me encerré en mi cuarto. Me tire a la cama y me puse a llorar, me sentía realmente mal, muy mal.
Me senté en la cama y recuerdos vinieron a mí, ¿Qué paso con el amor de mis padres? ¿A dónde se fue? La cosa más estúpida se me vino a mi cabeza al ver un cúter en mi pequeño buro donde se encontraba una lámpara. Fue un impulso, quería sentir el verdadero dolor.
Sentí un ardor, pero se sentía bien. La sangre corría... Suspiré y sonreí con los ojos cristalinos.
ESTÁS LEYENDO
¿Tu broma aun es divertida?
Teen FictionSINOPSIS ¿Quieres llorar? Llora. ¿Quieres gritar? Grita. ¿Te cortaste? Bien, cada vez que mires tus marcas sabrás que fue una guerra perdida y no ganaste nada.