"–Hacen bonita pareja. –Sí, es que ella es bonita"
Tocaban el timbre. Con pesadez me levante para ir abrir.
Me encontré con Adolfo-Hola –saludo
Solo me limite a observarlo, ¿me venía a ofender o a recordarme lo cuan idiota era?
Me di la vuelta y deje abierta la puerta por si quería entrar. Subí las escaleras para luego dirigirme a mi habitación y tirarme en la cama.-¿Podemos hablar? –Pregunto después de unos minutos que yo hacía en mi cama.
Me acomode sentándome, asentí.-Habla –pedí
-Oye, perdóname por comportarme como un imbécil estos días. Prometí defenderte y lo único que hago es que te sientas mal, pero me da una rabia inmensa ver que te dejes pisotear por esa bola de idiotas.Se acerco hasta donde yo estaba y se sentó en la orilla de la cama para verme de frente y tomar mis manos.
-No hay problema, tú no tienes la culpa –Me encogí de hombros. Y era cierto, Adolfo no tenía la culpa de yo fuera tan imbécil.
-Para compensarlo te invitare al cine –Sonrió.
-No...
- No empieces ___, recuerda lo que es una pregunta y lo que es que te afirmen algo –Hizo una mueca.
No quería empezar, así que solo me limite a asentir.*
Cuando llegamos Adolfo me dijo que yo escogiera la película mientras él iba por cosas para comer dentro.Cuando salimos de la sala de cine, íbamos tomados de la mano, fue muy extraño pero lindo y sentí algo que nunca había sentido.-Gracias Adolfo –Dije tímida agachando la cara.
-¿Gracias? ¿Por qué? –Pregunto.
-Nunca la había pasado bien con alguien –sonreí
Disculpen –Dijo una señora de edad grande, unos 60 o más.
Miramos a la señora desconcentrados.-¿sí? –Dijo Adolfo.
- ¿Son novios? –Pregunto.- Digo, hacen muy bonita pareja –sonrió la anciana.Mis ojos por poco salían de mi cara, y Adolfo solo sonrió.
Este era uno de esos momentos incómodos en los que dices "trágame tierra" oh, claro quería que me tragara para siempre.-Sí, es que ella es bonita –Contesto Adolfo apretando más mi mano.
-Ay que encanto! Señorita debería estar tan feliz de tenerlo como novio –Me dijo la señora.
- Ah... Sí... por supuesto –Tartamudeé, a lo que Adolfo rio por lo bajo.
- Bueno, los dejo. Que tengan un lindo día –Dijo la señora y siguió su camino.
¿QUE RAYOS ACABABA DE OCURRIR?-Linda señora –Dijo Adolfo riendo. Me ruborice por eso.
-¿Por qué dijiste que éramos novios? –Pregunte.
- No sé, pero haríamos bonita pareja –guiño el ojo.
- Tonto –golpee su hombro.
- Oh vamos, sabes que si haríamos bonita pareja –Dijo burlón.
- Ya cállate –Lo fulmine.Seguimos dando una vuelta por la plaza, pase casi todo el día con él. Realmente fue muy divertido y en ningún momento se puso de bipolar.
Al día siguiente tenia instituto. Me levante un poco tarde, mis padres ya no estaban en casa.
Cuando llegue al instituto ya casi no se encontraba algún adolescente ya que había clases.
Fui a mi casillero por los libros correspondientes. Esperaría hasta la segunda hora ya que no sería buena idea irme a presentar justo ahora al salón.Me dirigí a la cafetería. Para mi MUY BUENA suerte ahí se encontraba Beto junto a Omar y Luis.
Me senté un poco alejada de ellos, pero de nada sirvió ya que empezaron a gritarme cosas como "la torpe" "estúpida" "fea".Sentí como alguien se sentaba enfrente de mí, temía que fuera alguno de ellos. Levante mi vista y insisto con mi muy buena suerte. Beto.
-Torpe –Pronuncio.
¡Vamos ___! Tú no puedes seguir dejando que te humillen; me daba ánimos.
- ¿Qué quieres? –Pregunte irritante.
- ¿Qué carajo te ha hecho el imbécil de Adolfo? –Pregunto riendo.- Ahora ya contestas y no huyes.Rayos, todos se daban cuenta de la cuan estúpida y cobarde era.
-Solo me he cansado –Susurre.
- ¿De qué? –Pregunto frunciendo el ceño.No respondí, para mi gran alivio el timbre sonó en aviso que ya era la segunda hora de clases.
Me levante casi corriendo de ahí para después dirigirme a mi salón correspondiente.Las siguientes clases pasaron normal, para mí se me hacían eternas. Hasta que la hora de receso llego ¡genial!
-Bonita –Dijo alguien haciendo que lo voltease a ver.
Una risita tímida salió de mí. Adolfo había dicho eso.
Para ser franca nunca había escuchado que un chico me llamara así.
Mi papa no contaba ok?-Hey
Invite a Adolfo a que se sentara a un lado mío y le invite de mi sándwich-¿Cómo te ha ido en tus clases? –Pregunto interesado.
- Normalmente una chica respondería; Oh, aburridas... Dios, ya quiero irme de esta cárcel –Hice una voz un tanto graciosa ya que Adolfo rio.
Entiendo –Seguía riendo
- ¿A ti? –Pregunte
- Lo que acabas de decir también podría utilizarlo un chico –Guiño el ojoMis 20 minutos de receso la pase con Adolfo en la cafetería platicando y bromeando. Y para que sepan, no dijo nada incomodo o alguna cosa que hiciera que me sintiera mal.
Y así pasaron las clases... Desde que había hablado con Beto, bueno... Algo así. No había recibido algún tipo de broma y/o burla de su parte, al menos eso era un gran alivio.
-Señorita Brown, ¿se siente usted bien? –Pregunto el profesor de química haciendo salir de mis pensamientos.
Más bien me estaba quedando dormida en su clase, era la última.-Sí –respondí asintiendo.
- Si quiere usted dormir podría salir de mi clase e irse a su casa –Dijo este.
Todos comenzaron a reír. Oh, vamos ¿no podría tener un día tranquilo?
Todo iba bien...
Asentí torpemente haciendo que el profesor regordete me mirara de una forma sorprendida. Porque claro yo no haría eso.
Solo alcance a escuchar cuando dijo "salga ahora de mi clase" y así mismo me pare junto con mis cosas y salí de ahí.Fui a mi casillero a meter los libros que aun cargaba. Justo cuando estaba por cerrar mi casillero unas manos se adelantaron y la cerraron de golpe, me giré a ver de quien se trataban esas manos.
-¿Ahora qué? –Pregunte un poco nerviosa.
- Ahora si nerviosa eh... –rió por lo bajo.- Tranquila, no vine a molestarte. Solo que no me respondiste la pregunta que te hice –respondió.
- ¿Y qué?
- Trato de ser amable contigo. Así que copera –Dijo calmando sus nervios ¿o impulsos por querer golpearme? Como sea, no creo que me golpee ¿o sí?
- ¿Por qué quieres que sea amable contigo cuando tu nunca lo has sido?
Beto iba decir algo pero fue interrumpido por Adolfo aclarando su garganta detrás de él.-Mierda –Gruño Beto
- Vete Aranguren –Sentencio Adolfo
- Estoy hablando con la chica Hernández, no contigo –Dijo empuñando sus manos.
- Pero ella no quiere –Dijo mientras se ponía a un lado de mi.
Él dio un fuerte suspiro y se fue de ahí, no sin antes darme una mirada amenazante. Como diciendo "esto no se queda así".
ESTÁS LEYENDO
¿Tu broma aun es divertida?
Teen FictionSINOPSIS ¿Quieres llorar? Llora. ¿Quieres gritar? Grita. ¿Te cortaste? Bien, cada vez que mires tus marcas sabrás que fue una guerra perdida y no ganaste nada.