Girls II.
Finalmente llegamos al hotel donde nos quedaríamos, nos asignaron habitaciones y obviamente quede en una sola junto a Lauren.
La habitación era preciosa, tenía una televisión justo en frente de la enorme cama, y eso era lo que más me gustaba.
Yo ya estaba en la cama con mi pijama puesta, pero Lauren quería darse un baño, mientras la esperaba entre a mis redes sociales para distraerme y colgué una de las fotos que me tome junto a Lauren en el autobús, aparecíamos besándonos.
—Amor—me llamo desde el baño, me puse de pie y fui hasta ella
— ¿Qué paso?
—No traje ropa
—Pero yo si te traje algo—ella me miro y después dejo escapar una carcajada
— ¡Sabias que iba a terminar aceptando!
—Conozco muy bien a mi bella novia—la abrace por la cintura, ella estaba solamente envuelta en una toalla—No me importaría que durmieras desnuda
Acerque su rostro al mío pasando una de mis manos por su cuello y dejando la otra abrazando su cintura, pase mi lengua por sus labios lentamente, la mire a los ojos y capture su labio inferior contra los míos dándole inicio a un apasionado beso.
— ¿Sabes que me encanta besarte?—murmure entre besos. La hice caminar de espaldas hasta salir del baño y caer en la cama.
Tome una de sus desnudas piernas y la doble para acariciarla mientras la besaba, su lengua hacía de las suyas conmigo volviéndome completamente loca por ella. Sus manos bajaron la mi trasero y lo apretaron.
—Te amo—murmure antes de soltar sus labios y bajar un poco para morderle el cuello asegurándome de dejarle una que otra marca. Le quite la toalla que cubría su cuerpo y me quede observándola detalladamente, como si fuera la primera vez que la miraba desnuda—Eres hermosa
[...]
Me desperté y lo primero que mire fue a mi preciosa novia durmiendo, bese cortamente sus labios y la acurruque más contra mi cuerpo, esta mujer me tenía a sus pies, es mi debilidad, no sé qué haría sin ella a mi lado, es mi motivo de vivir.
Abrazarla es como tener al mundo entre mis brazos, besarla es como subir al cielo, y poder hacerle el amor me hace sentir como la jodida reina del mundo.
—Buenos días—murmuro algo adormilada aun y con su voz mañanera
—Los mejores mi amor—suspire y ella me miro—Estoy tan enamorada de ti mi princesa
—Amaneciste más cariñosa de lo normal—me sonrió antes de robarme un lindo beso—Me encanta
—Mereces que te diga lo feliz que me haces—subí una de mis manos hasta acunar uno de sus pechos y besarla—Me encantan tus tetas mi amor
—Y a mí tu culo—paso una de sus manos hasta mi trasero y la dejo descansando ahí
—Que rápido pasamos de las cursilerías a manosearnos
—Es solo que me encanta tocarte—le apreté el pecho y sentí su pezón contra la palma de mi mano—Y a ti te encanta que lo haga
Pellizque sin fuerza su pezón y ella saco el pecho ofreciendo más, pidiendo más. Me coloque con la mitad del cuerpo sobre el suyo y la bese con fuerza, ella apretó mi trasero haciendo que nuestras caderas chocaran.
La tome de las manos haciendo que se sentara en la cama, me fui haciendo para atrás y ella me siguió con gusto, quedo sentada con las piernas colgando de la cama y yo sobre ella. Pase mis manos por su cuello y comencé a mover mis caderas sobre mi novia haciéndole algo así como un lap dance, mi boca estaba muy cerca de la suya pero no nos besábamos creando así mucha más tensión.
—No sabes cómo me pones cuando haces eso—gimió contra mis labios, sus manos estaban en mi trasero apretándolo para que no dejara de moverme
—Lo sé perfectamente gatita—lentamente baje mi mano entre nuestros cuerpos hasta que quedó flotando sobre el short de su pijama—Por eso mismo lo hago, pero como no tenemos mucho tiempo antes de que sea hora de ensayar, haremos esto rápido
—Lo que tú digas, mi amor—sonreí porque la tenía dominada
Metí mi mano en sus bragas y comencé a acariciar sus labios húmedos, los abrí con mis dedos y sentí como su centro palpitaba contra mis dedos provocando que una ola de placer fuera a dar directamente a mi clítoris, me produce placer sentir su placer.
—Te has puesto más húmeda de lo normal mi vida—susurre en su oído sin mover mi mano de ahí, disfrutaba sentir como ella palpitaba contra mis dedos, me gusto la nueva sensación
—Camz—movió sus caderas para tener más contacto con mi mano
—Dime, mi vida, dime que es lo que quieres y te lo daré
—Follame—pidió antes de besarme de una manera jodidamente excitante
Automáticamente metí dos dedos de golpe dentro de ella provocando que arqueara la espalda y gimiera en voz baja. Al mismo tiempo mi mano libre pellizcaba y jalaba su pezón para provocarle un orgasmo más rápido.
Lauren dejo de besarme para poder gemir con fuerza contra mi boca, y creo que entre mis piernas hay un rio. Moví mi mano con más rapidez y fuerza mientras que con el pulgar la acariciaba.
—Vamos Lo, córrete para mí—dije mirándola directamente a los ojos, sé que le pone que le hable mientras la follo—Hazlo cariño, vamos, no puedo creer que estés aguantando tanto, córrete para mí, gatita
—Camz—grito cuando sintió mi boca en uno de sus pezones
La mordí y aumente la velocidad de mi mano, era increíble, Lauren nunca había aguantado tanto.
—Vamos mi amor—murmure antes de jalar su pezón con mis dientes
Y finalmente la sentí derretirse contra mi mano, sus muslos se tensaron atrapando mi mano entre sus piernas y dio su último grito de placer.
—Eso fue caliente—le ronronee antes de besarla con fuerza
—Joder, Camila eres increíble, mi amor—atrapo mi lengua entre sus labios y la succiono haciéndome gemir
De un movimiento rápido me hizo quedar debajo de mi cuerpo y sin previo aviso me metió dos dedos. Gemí su nombre y arquee la espalda por el placer que me provocaba.
—Estas tan apretada—gruño. Me beso una vez más en la boca antes de ir bajando con un camino de besos hasta mi centro. Soplo ligeramente contra él y después sacar sus dedos de mi para sentir su boca de lleno. La tome de los cabellos con ambas manos apretándola más contra mi clítoris, ella lo mordió un poco para después succionarlo con fuerza, esto acompañado de sus manos acariciándome los pechos me hicieron llegar al orgasmo contra su boca.
Se separó de mi feminidad y subió para besarme con ternura.
—Estas hecha un desastre cariño—me reí mientras limpiaba mis propios jugos de su barbilla y labios
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