TODO COMENZÓ COMO UN JUEGO Y ME TERMINE ENAMORANDO.

Capitulo 3

Toque la puerta por que no podía abrir con mi llave por que tenia a la bebe en mis brazos que dormía era muy hermosa, mi padre me abrió y se sorprendió cuando entre con la bebe en brazos cerro la puerta y yo me dirigí arriba rápido entre al dormitorio de mis padres estaba mi mamá sentada y leyendo un libro cuando me vio se quedo sorprendida y yo solo sonreí deje a la bebe que estaba dormida en la cama.

-Angie que significa esto- seria- acaso es tu ¿hija?

-Lo sabia- triste- sabia que ustedes pensaría que me eh revolcado con cualquiera y que salí embaraza y que por eso me fui a París por 1 año y todo- muy molesta por que mi mamá no me conocía de lo normal.

-Entonces es verdad- sorprendida.

-Como crees, me decepcionas mamá no pensé de ti eso de mi papá si- muy decepcionada- ella esta bebe tan hermosa y pequeña la encontré en la playa abandonada y yo no soy mala para dejarla ahi en pleno frío por eso la traje a casa, pero no preocupes que me iré con ella por que ahora y adelante es mi hija si lo sera - muy decepcionada.

- Angie hija sabes eso puede perjudicarte no sabes de quien es esa bebe y si lo descubren puedes ir a princión  - preocupada por mi decisión.

- Lo se pero mira quien la buscara si la han abandonado osea la persona que la dejo esta loca- muy seria- me iré cuando antes de esta casa- cargue a la bebe y la lleve a mi recamara la eche en mi cama y me puse a pensar que mi vida cambiaría por completo a tenerla a ella, no me importaba nada era una bebe tan inocente ahora era mi princesita bella su llanto me hizo salir de mis pensamiento la cargue y la tape con una colcha que tenia era pequeña y encajaba perfectamente a su cuerpo agarre mi billetera y baje mi padre seguía ahí me miro muy serio lo ignore y salí tome un taxi y salí al centro comercial fui a la tienda de bebes y le compre mas de 20 pares de ropa salí con bolsas en la mano y de pronto sin dame cuenta por el peso que tenia en mi mano por que solo cargaba con una mano ya que tenia a mi hija en los brazos choque con un chico que me hizo soltar todas las bolsas y agarrar fuerte mente a mi hija para no golpearla si es que me caía cerré los ojos y seguía parada con los ojos cerrados esperando el golpe del suelo los abrí lentamente y me encontré con un chico muy lindo, era de estatura máxima de 1m75, con piel morena, ojos café muy oscuros, tenia buen cuerpo me tenia sostenida de los brazo.

- lo siento no me di cuenta- sonriendo.

- no, discúlpame a mi iba con todas esas bolsas y eran demasiadas- nerviosa por su mirada.

- es demasiada si tienes a tu hija en brazos- mirándome a los ojos.

- si, pensé que podía- sonriendo

- puedo ver a tu hija seguro es hermosa al igual que la madre- riendo

-ah claro pero esta dormida- con rubor en mis mejillas.

- ya vez lo sabia es bella y disculpa me llamo Mario Irribare- estrechándome su mano.

- yo soy Angie.. Angie Arizaga mucho gusto- recibiendo su mano.

- se te ve muy joven y ya eres mamá- sonriendo.

- ah si cosas que pasan en la vida- mintiendo por que en realidad no es mi hija - bueno me tengo que ir tengo que comprar mas cosas- tratando de agarrar las bolsas.

- Vas a ir por mas compras pero si no puedes tienes a tu bebe en brazos vamos yo te acompaño- agarrando las bolsas.

- no no te preocupes yo puedo- quitando le las bolsas.

- vamos acepta que te acompañe - mirándome.

- esta bien vamos ya que insiste- sonriendo.

Entramos a ver zapatitos que compre 5 pares muy hermosos , luego entramos donde vende leche para recién nacidos ya que mi hija tenia apenas 3 meses compramos todos luego el biberón,pañales, talco, toallitas húmedas, shapoong, juguetes y todo lo necesario era demasiadas bolsas creo que abuse mucho de su confianza de Mario nos sentamos en una parte para conversar un poco la bebe se despertó y me miro sonrió y con su manitos delicadas y suaves agarro mi cabello que caía por mis hombro se distrajo con mi cabello.

-Es muy hermosa- dijo Mario.

- gracias es la beba mas bella- acariciando su mejilla de mi hija.

- ¿cuantos años tienes?- mirándome.

- ah.. tengo 17 años- nerviosa pensara que soy una cualquiera por tener a una hija muy temprana edad pero a mi no me interesaba en absoluto yo se como son las cosas.

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