Promesas.

21 3 0
                                    

Desperté de golpe, mi frente sudaba y tenía algunos moretones en mis brazos, al parecer me había golpeado mientras dormía, me levanté y caminé rápidamente hacia el espejo de cuerpo completo, observé mi rostro empezando por mi barbilla, de repente sentí la punta fría de aquella escopeta rozar mi frente, me estremecí, vi el reloj... 7:13, debía ser una broma.

Me metí rápidamente al baño y me moví con velocidad extrema, al salir, escogí lo primero que vi, siquiera me moleste en echar un vistazo a la ropa que elegí, cogí mi mochila y salí de casa sin siquiera despedirme, mamá me mataría cuando llegara.

--------------------

Llegué justo cuando la primera campana sonó, estaba cansada y de mal humor, no sería un buen día, pues las miradas compulsivas del suceso de ayer me seguían el día de hoy. Escuché esa horrible voz aguda; Kellie Phantomive.

-Oww...¿qué harás?

Caminé hacia dónde las voces, había una joven de cabellera amatista y ojos oscuros, bastante mona de hecho.

-Damelo Kellie- pidió esta cabizbaja.

-O sino... ¿qué?- preguntó retadora.

Noté que la joven abrió su mochila y sacó una... ¿¡cuchilla!? Kellie abrió los ojos como platos e intentó correr, pero aquella la acorraló en un casillero y le clavó la hoja de aquella arma en su mano, haciendo que la castaña gimiera.

-¡Arghh, maldita desquiciada!

No pude quedarme ahí viendo como se mataban, caminé hacia ella y saqué el arma, haciendo que la otra gimiera nuevamente, mientras maldecía a la joven.

-¡Estás loca!- dijo mientras se acercaba.

Me puse en medio de ambas y defendí a la otra;

-Phantomive, en su defensa, tú la agrediste.

-¡Me clavó un puto cuchillo en la mano!

-Cuchilla- la corrigió la joven, a lo que asentí.

-¡Me vale verga!- volvió la mirada a su mano la cual sangraba, añadió -¡Tsk, estúpidas anormales, una sádica y la otra nerd, pueden llevar su amistad a la mierda!

Se fue algo... muy molesta, gritaba grocerías a cada paso, volteé hacia la joven la cual sonreía alegremente.

-Soy Dana- mencionó mientras extendía su mano, la cual estreché, agregó -¿Y tú?

-Eleanor, un gusto.

Soltó mi mano y recogió su libro, el cual Kellie había soltado de repente, y lo guardó en su mochila. Comencé a caminar y Dana me siguió, la miré extrañada, no era normal que alguien quisiera pasar tiempo conmigo además de Kyle.

-Podemos ser amigas si quieres, será muy divertido- decía con una sonrisa.

-¿Es...una oferta? Porque suena como si lo fuera.

-¿Uh? ¡Claro qué no! No me creo superior como esas perras.

Reí. Había que aceptar que aquel comentario me había quitado un poco el mal humor y todo el estrés que tenía sobre mí en esos momentos, estaba bastante obsesionada con el sueño aquel que me había comenzado a alterar, pero Dana cambió eso.

-Me gustaría que fueramos amigas- dije mientras esbozaba una leve sonrisa hacia su persona.

-¡Genial!- dijo con alegría y sonrió aún más -. ¿Siempre eres así de seria?

-Si te refieres a lo aburrida que me veo...pues no, no dormí bien, es sólo eso, pero se me quitará, es seguro.

Dana se posó frente a mí, impidiendo el poder seguir con mi caminata.

~ Sombras ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora