~ Sombras ~

La chica nueva.

Mientras caminaba para alejarme del patio, escuché susurros a los lados, bueno, no eran susurros...pareciera que querían que me diera cuenta de que hablaban de mí.

-¿Lo puedes creer? ¿cómo es que alguien como ella tiene su atención?

-¡Tiene que ser una broma!- se quejaba una entre llantos -. ¡Le entregué mi vida, lo más importante de mí, él fue mi primera vez!

Dudo mucho que ella hubiera sido la primera vez de él, bueno, supongo que hablaban de Erick.

Miré hacia el frente, soltando un suspiro, sentí las miradas y seguí escuchando los "susurros", hasta que uno que no era hacia mí captó mi atención.

-Dicen que viene de Texas y que es tan amable, pero, algo...solitaria.

¿Una chica nueva? Interesante. Escuché un grito, todos lo escuchamos, volteé hacia la entrada del colegio, no me apetecía ir, pero sabía que la curiosidad me consumiría hasta saber que era lo que pasaba, aghh, a veces odio  ami cerebro chismoso. Algunos fuimos  a ver, otros ignoraron el hecho y continuaron con sus estúpidas cosas.
Reconocí ese cabello; era Dana. Había un cuerpo ensangrentado a su lado, miré a los demás, tenían los ojos como platos. Entre ellos estaba Kellie, al parecer no era tan ignorante como todos en el colegio.

Dana volteó, había una enorme sonrisa en su rostro que me daba escalofríos, en su mano izquierda tenía un chuchillo llenó de la sangre de la joven plasmada en el suelo.

Escuché aplausos, la gente abrió paso a una joven de cabellera azulada, seguro era la chica nueva, esta sonreía mientras daba pasos lentos hacia Dana, el charcó ensangrentado llegó hasta mis pies, retrocedí sin dejar de mirar la escena, ¿cómo Dana pudo haber hecho eso? Bueno, no me sorprendió, pero aun así.

-Dana...- la peli-azul sonrió y paró de aplaudir.

La observé mejor, era bastante mona, al igual que Dana. Traía una blusa de mezclilla, una falda blanca por encima de las rodillas y unos botines negros con tacón cubierto por la tela.

-Melanie- la sonrisa de Dana se borró, me miró de reojo y volvió su vista a la chica, la cual ahora sabía que se llamaba Melanie -. Debiste quedarte en Texas, nadie te necesita aquí.

-Auch, querida, eso dolió- rió levemente con tono burlón -. Creí que habías cambiado, pero al parecer sólo viniste a asesinar gente...

La vena en la frebte de Dana estaba a punto de salir y devorar a Melanie, la cual volteó hacia todos nosotros.

-¿Qué hacen aquí? ¿no tienen nada mejor que hacer?

Todos excepto Kellie, un chico y yo se fueron, obedeciendo a la chica.

Kellie se acercó a mí, era raro.

-Oye- susurró -, ¿qué le pasa a tu amiga?

-Apenas la conozco...no sabía que fuera así.

Me estremecí, no sólo por el hecho de haber visto así a "mi nueva amiga" sino porque Kellie me había hablado bien por primera vez en su santa vida.

La noté ver al chico, a lo que yo volteé a verlo también, sus cabello era negro azabache y sus ojos tenían un hermoso color gris. Su cara se veía tan seria y concentrada en dicha escena, traía un gorro gris en el que escondía su cabello

Escuché la canción "Mama" de My Chemical Romance, al parecer era el tono de llamada de aquel, pues sacó su teléfono y atendió. Kellie siguió mirandolo.

-Lindo, ¿verdad?

Noté que se ruborizaba, talvez ella no era tan perra como creía yo. Era más bajita que yo, usaba lentes, su cabello era largo y brillante, sin nombrar que su tez era pálida y sin ninguna imperfección en su rostro, tenía bastantes amigas, supongo que era así conmigo por nuestro primer encuentro. Aun lo recuerdo.