Palabras de Medianoche

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¿Esto es un diario?
Talvez.
¿Un ensayo?
A lo mejor si.
Pero tiene más que eso,más allá de personajes van mis palabras y mis anhelos,historias que nunca supe como contar,Daniela si lees esto te agradezco por tu apoyo incondicional.

17 de Noviembre del 2014.
Pienso que deberíamos ponerle un nombre a nuestro personaje principal ¿no? Si me hubiera gustado algún nombre aparte del mio sería Vladimir, como Igor Vladimir el burro depresivo de Whinnie Pooh.
Entonces le pondremos Vladi.

Carta 1: Domador de Leonés.
Eran esos tiempos en los que Vladi en sí como persona se encontraba en un estado alucinante por el uso de la palabra alucinación para expresar confusión mediocre, no sabia que era ni que estaba haciendo ni mucho menos donde estaba,se la pasaba mirando a cualquier objeto que encontrará no importa lo insignificante que fuera,se distraía con todo,desde la pequeña ardilla hasta el rayo del Sol que se reflejaba en el charco de agua. Vivía en un estado de Nirvana espiritual a punto de ser quebrantado,vivía como el aire iba a donde el viento le llevará,vivía con preocupaciones efímeras.
Se enamoraba,olvidaba,sonreía,hacia reír,amaba,gozaba,se sentía vivo.
Y así pasaron los días,muchas cosas pasaron por la mente de ese elocuente muchacho,y así aclaró la edad de el ubicandolo como un adolescente con ciertos problemas de más pero que en sí sabía sobrevivir.
Durante esos estuvo confundido por un pequeño clavel de amor,una espina clavada por una espléndida mujer,hermosa pero difícil de entender,difícil de manejar,donde en su lado cruel y fuerte en lo más profundo se encontraba un corazón sumamente noble,buscando la humildad y el cariño. Supongo que si amas a los leones tendrás que aprender a domarlos.
Pero en si,fue lastimado varias veces por intentar domar algo que era demasiado para el,algo grande y feroz pero increíblemente majestuoso y bello.
El se tuvo que alejar de eso,su esperanza se agotó y se escondió,no quería ser presa más tiempo.

Carta 2: Estoy vivo,al menos así me siento.
Los días transcurren,las horas pasan,los minutos vuelan y los segundos parecen estrellas fugaces,el tiempo pasaba frente a sus ojos,el tiempo pasaba frente a Vladi como un juguete en una estantería de una tienda,contemplandolo,deseando ser dueño de el tiempo,manipularlo y usarlo para vivir para siempre.
Pero no eran más que sueños con los que jugaba cada día al quedarse dormido en clases,después de reír tanto con sus amigos,después de hacer alguna que otra estupidez con el pequeño Oscar,hablar de bandas de metal con Joseph y contarle relatos del abuelo a Guillermo,el tiempo pasaba bien en amigos,bueno,supongo que en amigos el tiempo siempre pasa de maravilla.

Vertedero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora