Nota #18

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Hola Estaban:

Hoy es mi día de regreso, estoy tan contenta porque después de tanto tiempo podré ver a mi persona favorita. En cada instante que pasaba no dejaba de imaginarme como te verías ahora, no dejaba de pensar sobre que cosas han cambiado de ti. ¿Será eso una bendición o una maldición?

Luego de un largo viaje, llegué a casa de mi abuela, todo marchaba bien, hasta que a lo lejos vi una sombra, no sabía quién era en realidad, pero cuando se acercó a la luz pude ver claramente tu silueta debajo de aquella luz brillante, definitivamente eras tú, no podía contener tanta alegría que recorría por mi cuerpo, que por instinto quería correr y abrazarte, pero no pude hacerlo por dos razones. Primero: sigues sin conocerme y segundo: tú no estabas solo, estabas acompañado de unos chicos y a tu izquierda estabas con una chica. No es que me muera de celos, pero me gustaría pensar que solo es amiga tuya, en estos momentos, mataría porque alguien me explicara la situación que estaban viendo mis ojos.
Ella te tomo de la mano y vi como de pronto todo lo que habíamos vivido se había esfumado entre el aire que respiramos, definitivamente quedé en shock. Aparto la vista y se me llenan los ojos de lágrimas, este no es el Esteban que yo conocí, este no es el que me dijo que siempre iba a estar enamorado de mí y que yo era su inspiración, realmente me acabo de dar cuenta que todo era una mentira.
Doy un paso hacia atrás y pierdo el equilibrio, no puedo fingir que estoy bien cuando realmente me estoy rompiendo en pedazos al ver esa escena.
Algo se rompió dentro de mí cuando te vi con aquella chica, ella no te merece, nunca te amará como yo te amé.

Con solo verte, sentí que no podía respirar, estaba tan enfadada que quería ir y separar sus manos, pero desafortunamente no salió así, al contrario, me quede ahí paralizada viendo como tú la besabas.
Lo hacías con tanta pasión que en ese instante me hizo reflexionar que quizá yo fui un amor pasajero y que no siempre me ibas a necesitar.
Puede que con esa escena me destrozaste, pero nunca demostraré debilidad al frente tuyo, ¡jamás!

Att: Tu anónima

PD: Si te interesa, mi tercera letra de mi nombre es la: "Z"

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