Everythings has Changed (Skydragon)

Capítulo 33: Cumple de mamá

Multimedia: Es el vestido que usó Chae

-Sí, no me tardare nada.

-Eso espero porque ya son las cuatro cincuenta y se suponía que...

Giro a ver el reloj colgado en la pared de la sala de Chaerin, y luego de volver rápidamente la vista a la habitación de la chica cuando escucho unos pasos provenientes de ahí.

Se quedo en completo silencio y con la boca entre abierta cuando la vio aparecer por el umbral de la puerta.

-¿Que tal me veo? - pregunto tímida.

Jiyong movía la boca sin emitir sonido alguno.

¿En verdad le había hecho esa pregunta? ¿Era necesario que Jiyong se la respondiera? Pues lo que estaba pensando en ese momento Ji, no se atrevería a decirlo, además que no era un pensamiento ni comentario muy "sano", era algo más bien... pervertido.

-Y bien... - dijo la chica al no obtener respuesta alguna de Jiyong, y solo recibir la mirada babosa de él que comenzaba a incomodarle.

-Te ves... jodidamente linda

Chaerin rió tímida y se acerco a él.

-¿Tú crees?

-No lo creo, te lo aseguro - sonrió coqueto.

-Entonces... gracias - sonrió - se me hace tarde, debo irme.

-¿Quieres que te vaya a dejar? ¿O Taeyang pasara por ti?

-No, no pasara por mí, - camino hasta la puerta -y sí, quiero que me vayas a dejar - volteo sonriendo felizmente.

Ji asintió sin quitarle la mirada de encima.

-Vamos, no te quedes ahí.

-Oh claro - sonrió y camino hasta Chaerin.

Anduvieron cerca de veinte minutos antes de llegar a la casa de los padres de la chica.

Jiyong estaciono el auto a un par de casas lejos. No podían ver que Chae llegaba en otro auto, con otro hombre que no fuera Taeyang.

-Taeyang oppa ya debe estar por llegar. Así que... - miro a Ji- gracias por traerme.

-¿Quieres que venga por ti después?

-Claro - sonrió - si no te molesta.

-No, no me molesta, para nada - sonrió.

-Bien, entonces te llamo.

-Ok.

-Adiós, gracias por traerme – dijo Chae.

-De nada.

Chaerin abrió la puerta del copiloto para salir del auto.

Cerró la puerta y miro a Jiyong a través de la ventanilla, para sonreírle.

Ji le sonrió de la misma manera.

-¡Esperare tu llamado!

Chae le guiño el ojo en señal de afirmación y camino hasta la casa de sus padres, pero no entro. Se quedo en el jardín delantero de la casa para esperar a que Taeyang llegara.

Debía esperarlo, pues se supone que está todo bien entre ellos. Que llegaron juntos, no por separado.

Miro el reloj de su muñeca.

Ya eran las cinco de la tarde y Taeyang aun no llegaba.

Chaerin constantemente lo llamaba a su celular, pero no le contestaba.