The Gay Project (editando)

2 (parte 2)

— ¡¿Cómo es posible que no haya ni una sola cerveza en toda la casa?! —Los gritos de Louis lograron despertar a Harry de su sueño del cual se acababa de percatar ya que en ningún momento se dio cuenta que había caído dormido en el cómodo sofá de la sala de estar. Últimamente dormía más de lo normal.

—Tal vez sean las reglas —Se le escuchó decir a lo que parecía ser la voz de Zayn.

—A mí nadie me dijo que no podía tomar una puta cerveza en 6 meses. —Louis sonaba molesto.
Harry pasó de estar acostado a estar sentado en el gran sofá, se frotó los ojos tratando de aclarar su vista borrosa y de alguna manera alejar el sueño.

Louis apareció en la sala con unas llaves en la mano.

—Miren quien despertó —Louis sonreía y por dentro suspiraba de ternura al ver a Harry despeinado y con un rostro somnoliento — tú bella durmiente —señaló a Harry —me llevarás a comprar cervezas.

— ¿Porque no vas solo? Estoy ocupado —Harry se acostó sobre el sofá de nuevo.

—No me obligues a usar el beso de amor verdadero para despertarte —Louis se cruzó de brazos.

—Ve solo.

—No puedo ir solo, me quitaron mi licencia.

—No imagino como —Harry mantenía los ojos cerrados.

—Llévame y no te molestare más — insistió Louis.

—No

—Te compraré chocolate

— ¿De maní?

—El que quieras

—Está bien —Harry se puso de pie en frente de Louis —Pareces un niño.

—Un niño malcriado por su papi —Louis hizo su típica cara juguetona.

—Deja de hacer eso.

Ya en el auto camino a la licorería más cercana, Louis no paraba de cantar las canciones que pasaban en la radio. Mientras tanto Harry sólo conducía mirando al frente con el ceño levemente fruncido. Louis lo contempló por milésima vez, Harry le atraía a Louis, y mucho. Louis le bajó el volumen de la radio, el cual estaba al máximo haciendo que Harry se volteara a ver a Louis de reojo.

— ¿Qué ocurre? —Preguntó Harry.

—Yo... Nada, sólo que ya me aburrí.

—Ah —Harry siguió conduciendo tranquilo.

— ¿Te puedo pedir un favor? —Louis habló de repente sin mirar a Harry.

—Sí, dime

—Me podrías decir si... No olvídalo –Louis se arrepintió antes de poder terminar de formular la pregunta. Dejando a Harry algo confundido.

—Dime, está bien.

—No, ya no es importante... Mira ya llegamos —Louis señaló una licorería a pocos metros.

Ya dentro de la tienda de licores Louis prácticamente llenaba todo el carrito de supermercado con botellas de vodka, cervezas, whisky, y hasta vino mientras Harry se encontraba al otro lado de la tienda donde vendían dulces y frituras.

Louis paseaba por los pasillos mirando los estantes repletos de botellas y cada vez que veía una diferente se le antojaba, cuando decidió que ya era suficiente para al menos 1 mes de alcohol para todos en la casa opto por buscar a Harry para así poder irse a su nuevo hogar temporal.

— ¿Ya nos podemos ir? —Louis vio a Harry de espaldas al final del pasillo de chocolates, pero al parecer no lo escuchaba- Me duelen los pies. - volvió a replicar.

Louis cuando estuvo más cerca pudo ver que Harry no estaba solo. Una chica de cabellos color miel y baja estatura hablaba, más bien reía a carcajadas junto a Harry.

—Disculpa perra pero es gay —Louis hablo en voz alta, pero para sí mismo, así que nadie escucho su comentario a excepción de una pequeña niña que revisaba los dulces, que al escuchar lo que dijo aquel señor no pudo resistirse a hacer una de las mil preguntas que su inocente y curiosa mente de niña de 6 años no comprendía.

— ¿Que es perra? —Habló curiosa la pequeña captando la atención de Louis que aun observaba como Harry y la chica reían entre comentarios que apenas podía escuchar.

Perra es el nombre que se le da a todas las mujeres malas. —En parte era cierto.

La pequeña se mostró convencida y asintió con su pequeña cabeza y con el ceño fruncido tomo un ventilador de juguete que contenía dulces de chocolate y salió corriendo a quien sabe que parte de la gran tienda.

Louis soltó una risita pero luego cambio su expresión facial a una más seria y camino con la frente en alto hasta donde se encontraba Harry y aquella chica extraña -que quería seducir a Harry-

— ¿Amor Ya nos vamos? —Louis le habló de manera cariñosa a Harry, primero ignorando a la chica que hablaba con el— Oh, hola ¿Tú eres?... —Louis fingió haberse dado cuenta de la existencia de la castaña.

—Soy Camille — Dijo simpática y extendiendo su mano libre.

Camille era muy bonita y Louis no lo podía negar, por lo cual hacia que la odiara aún más.

Harry ya había entendido el comportamiento de Louis en aquel momento así que se limitó a rodar los ojos y cruzarse de brazos.

—Mucho gusto Camille, Harry y yo ya nos tenemos que ir —Louis hizo un falso puchero y zafó el cruce de brazos de Harry para arrastrarlo por el pasillo, lejos de Camile.

— ¿Ya puedes soltarme? —Harry ya estaba muy molesto con la actitud de Louis.

Louis lo soltó y tomó el carrito de compras.

—Ya vámonos. —Louis sonaba aún más molesto.

Harry decidió callarse ya que no quería armar escándalo en una tienda

En la fila para pagar Camille estaba justo en la caja de al lado y ambos pudieron apreciar a una niña rogándole para que le compre unos chocolates, la misma niña que habló con Louis hace un rato.

—Mamá cómprame esto —Al ahora descubrir que la niña era su hija Louis de algún modo se puso contento ya que esa niña tendría que tener un padre así que Camille dejaría en paz a Harry. Aunque la idea de que Camille fuera una zorra fácil no salía de la cabeza del paranoico Louis.

—No. —Camille no le prestó atención a su hija pequeña.

— ¡MAMÁ POR FAVOR!

—Que no Rossy, deja eso —Camille le quitó el chocolate y lo puso en un estante cercano.

—Eres una perra mamá ¡Una gran perra!

Louis no quería, pero no pudo evitar que una estruendosa carcajada resonara en la tienda mientras todas las personas miraban a la niña -y a Louis- con una cara de asombro. Incluyendo a Harry, que no pudo evitar reírse disimuladamente de la escena.

— ¿Quién te enseno esa palabra? —Camille estaba indignada.

—Él —Rossy señaló a Louis con su pequeño dedo y Camille lo miró muy molesta.

—Oops.