Sigo tirada preguntándome cómo es que todo pasó tan rápido; como si en vez de ser vacaciones fueran solo días de descanso, como si solo esos meses en que tenía que levantarme temprano fueran un recuerdo vagamente de algo que pasó algún día, como si todos esos momentos que fui realmente feliz fueran solo segundos olvidados en alguna parte de mi subconsciente.
Como deje de hablar con personas que les contaba absolutamente todo, como empecé a olvidar las cosas más importantes que alguna vez lo fueron, como me di cuenta de que nada es para siempre y que un siempre se puede convertir en un jamás, en lo que sabia que fue un año pero que no lo sentí así.
Es tan raro decir todo esto porque no lo suelo hacer y sé que todos sentimos que no hay sentido alguno en lo que está pasando, como cambie, como me volví fría, como deje de sentir lo que muchos buscan, como solo deje que el tiempo midiera todo lo que estaba haciendo sin noción, como deje que hablara más mi cabeza olvidando a mi corazón.
Ahora el tiempo escapa y tengo miedo, tengo miedo de que todo lo que tenía imaginado cómo iba a ser no pase, no pase esos días largos con amigos, que no pasen esos días en los que mis padres me pregunten quién es con quien te ves tanto, que personas que antes me importaban ya no les importe, que desaparezcan las personas de mi mesa para las fechas importantes y que sobre todo tú no estés cuando todo esto me esté pasando.
