Solo es trabajo (Harry Styles)

Capitulo 1.

-¿Sabias que Carlota esta con Drew?- Me dijo Mary

-¿Qué dices? ¿Está con Drew?-

-Si tia, me los encontré a los dos enrollandose en el baño del centro comercial-

-¿En el centro comercial? Que poca clase tiene- Dije riendome.

-Y lo mejor de todo es que la de seguridad los pillo y los echo mientras todo el mundo los miraban- ¡Que risa! Nos empezamos a reir como locas. Tan solo imaginarme la escena de la guardia de seguridad sacando a Carlota del baño super avergonzada con toda la gente riendose de ellos me entraba la mayor carcajada del mundo.

-Se lo tiene bien merecido, por guarra- Añadió Mary. Nuestras risas fueron interrumpidas por los golpes que alguien que daba en la puerta.

-Pase- ordené. La puerta se abrió

-Srt. Meyson me ha mandado su padre para que le comunique que la esta esperando en su despacho- La verdad no sé quien es más pesado, si este mayordomo o mi padre.

-Digale a mi padre que en 5 minutos bajo-

-Si Srt. Meyson- Se quedó ahi parado esperando que yo le digiera algo.

-Ya se puede ir Esteban- Le dije con mi cara de obviedad. Asintió con la cabeza para volver a cerrar la puerta tras dar 2 pasos hacía atrás.

-No lo soporto más, a ver si lo echan de una vez- Me tiré con los brazos abiertos en mi gigantesca cama.

-A mi me cae bien, es muy simpático- Le lanzé una mirada asesina. -Bueno... Yo creo que me iré a mi casa- Mary se levantó de la cama para coger su bolso.

-Te acompaño hasta abajo que tengo que ir al despacho de mi padre- Mary y yo bajamos hasta el salón del primer piso.

-Yo me voy por aquí- Señalé atrás mio, la parte derecha del salón.

-Vale, nos vemos mañana en el instituto- La abracé y me dirigí al despacho de mi padre viendo como Mary iba bajando para irse de la casa. Llegué a la puerta doble del despacho y la golpé con el puño cerrado dos veces.

-Adelante- Se escuchó desde dentro. Abri las altas puertas para entrar y volver a cerrarlas. Caminé hasta llegar a la mesa de color caoba que estaba al final de la habitación y me sente en la silla que estaba en frente de esta.

-¿Qué pasa papá?- Mi padre tenia 40 años pero se conservaba muy bien. He de decir que era un hombre atractivo. Tenia el pelo negro, de un negro muy oscuro bien peinado, unos ojos azules como las aguas cristalinas de las playas de Ibiza (cosa que yo había heredaro de él), su mandíbula de modelo de revista que estaba limpia sin ninguna tipo de barba o bigote junto a unos labios que cuando sonreia eran los más largos del mundo.

-Tengo que contarte una cosa- Se acomodó en su sillón.

-Dime-

-En estos momentos el negocio esta en un momento muy complicado y he hecho algunos tratos, por así decirlo, con gente muy especial.- ¿Me había llamado para hablar de negocios?

-Al final estos "tratos" han salido un poco mal, cosa que trae unas coseqüencias no muy buenas.-

-¿Qué estas diciendo papá? Ve al grano y deja de marearme-

-___ siento decirte esto pero estamos en una grave situación. No quiero que te asustes pero necesitarás un guardaspaldas-

-¿¡QUÉ!?- Abrí los ojos como platos.

-Será temporalmente hasta que todo esto quede sanjado-

-¿Papá estas de broma?- Le pregunté furiosa.

-Lo siento cariño pero no voy arriesgar tu vida-

-¿Pero dónde estamos? ¿En la guerra? ¿En Libia? Papá que no voy a salir a la calle y me van a pegar cuatro tiros. Estamos en Londres, la gente va con maletines en la mano, no con pistolas-

-Esta gente es peligrosa ___ no estoy bromeando-

-¿Peró tu negocias con terroristas o qué? No pienso dejar que me pongas una persona que este ensima mio todo el día-

-No estará contigo todo el día, solo cuando vayas de compras, a dar un paseo, en el instituto...-

-¡QUE NI SE TE PASE POR LA CABEZA! Ni loca voy aperecer en el instituto con un viejo de traje llevandome la mochila- Esto ya era el colmo

-___ no dramatizes. Esto no era una proposición, era un aviso para que sepas que vas a tener que ir acompañada de alguien estos días-

-Me niego- Me cruzé los brazos poniendome firme.

-Mañana estará aquí a las 7 de la mañana para llevarte al instituto, ya le he dado unas instrucciones y le he dicho todo lo que tiene que saber. Tú tranquila-

-He dicho que me niego a sufrir las "conseqüencias" de tus malos negocios. No es mi problema- Remarqué "conseqüencias" haciendo las comillas con los dedos.

-___ soy tu padre y tienes que acatar mis ordenes y normas sean cuales sean. Así que obedece-

-¡Pero papá!- Protesté como una niña pequeña.

-Ya te puedes ir- Se colocó sus gafas y revisó unos papeles con mi mirada intentando buscar la suya. Resoplé y me levanté enfada de la silla al ver que no me hacía caso. Cerré las puertas lo más fuerte que pude para que notará mi enfado y fui directa a mi habitación.

Iba a tener un maldito guardaspalda, pero una cosa esta clara, no duraria mucho.