Aqui comenzaba otra historia, pero con los mismos personajes, el principal era ese señor el que se hacia llamar Padre, habia pasado años reuniendo dinero para vivir en un lugar propio, sabia que, eso no alejaria a mi Padre de mi estudios.
Todo estaba empaquetado todavia, tenia cajas en los pasillos, casi todo era nuevo, mi madre dejo una pequeña herencia, mi Padre habia tomado el 75% de ella,lo que me sobraba era lo que me ayudaria a sobrevivir mientras me graduaba y encontraba un trabajo. Habia una caja realmente pesada, mas mi brazo esta lastimado.
-¿Necesitas ayuda con eso?
Una chica, aproximadamente de mi edad se encontraba parada frente a mi, si cabello era negro, al igual que sus ojos, tenia una tez blanca palida y su estatura era considerable, solo habia algo que no le ayuda.
Su vestimenta.
-Oh, por favor estoy lastimado y...- Le mostre mi mano izquierda con una venda
-A la cuenta de tres la levantaremos.- Se agacho un poco al igual que yo.- Uno, dos....tres
Poco a poco la entramos a mi departamento.
-Bueno si eso es todo, adios
-Oye espera.- Agarre su brazo.
Su mirada mirada mostraba miedo, si respiracion se volvio casi inexistente, la deje de tocar y callo el suelo no sin antes gritar.