»Única Parte«

4.7K 640 198
                                    

Pov Yato.

¡Hey, Hiyori!

Te quiero decir un par de palabras.
Empecemos, ¿sí?

Bueno... -me respondió-

¿Te acuerdas cuando nos vimos por primera vez?
Pues, yo sí. Me acuerdo que ese día estabas con tus amigas y yo buscando a un gato.

Si -ríe-, ya cuando te me parecías lin-ndo. -se sonrojo-

Lo normal era que las personas no me vieran, pero tú me viste.

Eso, sinceramente. Fue muy raro. -me contesto pensativa-

Arriesgaste tu vida, para salvarme, aunque no fuera necesario. Y bueno, te termino atropellando un camión. Desde entonces estas conectada entre ambos mundos.

¡Y si, tonto! En ese tiempo pensaba que eras un humano. -grita-

Luego de eso, nunca me dejaste solo.
Siempre estuviste, solamente tú me ayudaste a cuidar a Yukine.
Solo tú nunca me pudiste olvidar.

Es que, prefiero estar contigo.
Y obviamente lo iba a hacer, Yukine es una muy linda persona.
Y... hubo dos veces que te olvide, ¡P-Pero me pude acordar de ti! -decía nerviosa-

Todos los días nos venías a visitar.
Pasabas tiempo con nosotros, cosa que agradecemos.

Eso no se agradece, es que me divierto y me gusta estar con ustedes. -me sonríe- .

Siempre nos soportaste pagándonos todo, ayudándonos. Esto también te lo agradecemos mucho.

No hay de qué. Para eso están los amigos, ¿cierto? -me dice-

Gracias por cargarme cuando estaba infectado. Sabiendo que te podrías contagiar y morir. ¡Pero, no lo hagas nunca más!

Iba a hacer todo lo posible para salvarte, aunque me pusiera en peligro. ¡Lo voy a seguir haciendo por qué no quiero perderte! -me dice alterada-

Lo que yo sin duda nunca voy a dejar de agradecerte va a ser lo de mi santuario.
¡Cumpliste mi sueño!

Es lo menos que pude hacer. Me has ayudado mucho. Además, te lo merecías Yato - me vuelve a sonreír-

Hace mucho tiempo te quise preguntar algo...
¿Cómo sabías donde estaba siempre?
Es todo un misterio.

Se- cre- to. -se ríe-

B-bueno, después de un tiempo, empecé a sentir cosas por ti.
Me prometí hacerte la chica más feliz del universo.

¿E-e-e-en serio? Qué dulce de tu parte - me dice sonrojada-

¿Te digo algo? Cuando supe que mi padre te dio un beso, quería golpearlo hasta matarlo. No daba más de celos.
¡Encima en Cappyland!

¡N-n-n-no tenías que mencionar eso! - me dice alterada-

Yo por desgracia no lo sabía y te lleve ahí.
Te notaba nerviosa y tensa.
Nunca me imaginé que fuera por esa razón. Encima, aguantaste ese recuerdo por mí. No lo tenías que hacer, tonta.

Haría todo con tal que seas feliz -susurra algo que no logro escuchar-.

¡No sabes! Todavía tengo para agradecer. Gracias por salvarme aquella vez, pero... ¿cómo supiste mi verdadero nombre?
Bueno, no importa.

-ríe-  Eso también es secreto.

Antes de todo, lo último que agradecer. ..
Gracias por estar siempre conmigo, Hiyori.
¡Eres la mejor!

Me encanta pasar mi tiempo contigo, Yato -me abraza-

Ahora sí... ¡Te amo, Iki Hiyori!

Yo también te amo, Yato. -sonríe sonrojada-

No me resistí más y la bese.

Fin.

¡Espero que les guste!

¡Hey, Hiyori!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora