Había una vez un choclo llamado Juan. El era muy especial según su mamá Juana , porque una vez cuando lo estaban vendiendo en la feria una señora lo compro, lo metió en una olla con agua hirviendo y juan o Juancho como le gustaba que le dijeran, fue muy valiente y pudo salir de la olla, correr y salir de esa espantosa casa sin dejar rastro.
Después obviamente pudo llegar al campo con toda su familia. Aquel día él le contó a todos la hazaña q había hecho (salir de una olla con agua caliente) y la agencia internacional de espías llamada "spycorn" se contactó con Juancho y le dijieron:
(agente k)-oooh hermoso Juancho nos hemos enterado de la aventura q tuviste en una olla y creemos q tienes todo lo necesario para estar en spycorn .. Te gustaría ser párate de esto?
(Juancho)- por supuesto
Y DESDE ENTONCES PERTENECE A LA ASOCIACIÓN DE CHOCLOS ESPÍAS ENCUBIERTOS.
