Saludos mis lectores. Me dieron ganas de escribir otra historias de "estas" pero me di cuenta de una cosa: que falta un poco de Frazel en este fandom.
Bueno espero remediar un poco eso.
Disfruténlo :)
Hazel se levanto esa mañana de su cama de dos plazas con la idea de tener un buen día, como siempre.
Miro a través de la ventana el sol imponente que se alzaba en el cielo y cerró los ojos para sentir la calidez de sus rayos, el viento meciendo los rizos en su rostro, el olor a césped de las praderas que rodean el valle y el jazmín de los jardines de Baco, prácticamente respiraba la paz y se sentía plena. Se admiro al espejo en su baño, el sol imponente y el olor de los jardines nunca pasarían pero no podía decir lo mismo de ella.
Ya no era más la niña insegura, tímida y avergonzada de su pasado que era cuando llego por primera vez de la mano de su medio hermano Nico, No. El cuerpo que veía en el cristal era ahora el de una veterana, con las marcas visibles de su servicio tatuado en su esbelto brazo, aparte los mechones rizados que cubrían parcialmente su rostro como un manto oscuro para ver su rostro.
Se llevo la mano a su mejilla derecha como si percibiera una caricia imaginaria rozando su fina piel que a pesar de su oscuridad se ruborizó, pensó que necesitaba una ducha para calmarse y enseguida abrió la llave, el agua fría cayo por las curvas de su cuerpo y sus hombros delgadas los cuales abrazaba como si percibiera alguien detrás de ella tocándola, ese pensamiento hizo que se estremeciera por dentro y se ruborizara todavía más de vergüenza.
Solo recordarlo provocaba que se le volviera la piel de gallina. Cuando por fin se termino y se cambio encontró la misma pequeña nota en la mesa de la cocina, tan solo le dio un vistazo pues ya sabía lo que ponía y se apresuró en desayunar para salir a la ciudad con una blusa blanca con vestido gris debajo de una chaqueta de lana amarilla para el aire fresco que soplaba en las calles.
Aunque al año se graduaría prefería tomarse las cosas con calma y suspiró aliviada de que el semestre en la Universidad se hubiera acabado por lo que podía tomarse el día para rellenar la despensa, además de que el camino desde el nivel debajo de los jardines de Baco donde vivía era un trayecto largo para disfrutar del paisaje y la arquitectura, bueno al menos eso es lo que Annabeth le diría. Y durante la bajada por la pendiente vereda de piedra y mármol tenía una vista lejana por sobre la ciudad del campamento lo cual siempre disfrutaba.
Aunque lo tuviera lejos casi podía imaginarse caminando por la vía principia derecho a los barracones de las cohortes, o caminando por las tiendas de café, donas y otros productos para el legionario, o dirigirse al comedor principal para compartir el almuerzo con su vieja cohorte. Estar fuera no le impedía por supuesto pasearse por ahí de vez en cuando llevando cupcakes a los nuevos y compartir sus experiencias para ayudarlos a sobrellevar el servicio.
—¡Hazel!
en cuando llevando cupcakes a los nuevos y compartir sus experiencias para ayudarlos a sobrellevar el servicio. horte. —alguien la llamó a lo lejos.
—¿Gwen?—balbuceó sorprendida de verla.
Era muy agradable encontrársela, en especial en ese día. Casualmente ella también iba al mercado y luego a reunirse con Dakota, le sorprendió bastante enterarse de que estaban saliendo pero era comprensible, ya era casi una mujer mayor que había servido con distinción a la legión y con una carrera, sabía que tarde o temprano encontraría a alguien pero le sorprendió que fuera alguien tan distinto de ella.
Pero bueno, tampoco era muy distinto a Percy pensó entre risas. Excepto por la irremediable adicción a las bebidas azucaradas.
—Me alegro por ti, amiga. —
ESTÁS LEYENDO
Primera vez
FanfictionFrank y Hazel siempre se han amado y respetado incondicionalmente pero conforme el tiempo pasa la atracción crece...