Cómo enamorarse. [BTS]

08.

El amor perdura. A veces se oculta por un tiempo, pero, pacientemente, aguarda hasta que es el momento correcto de aparecer y cuando vuelve a hacerlo, es difícil que se esconda una vez más.

— Ah, te presento a Jimin, es amigo de Taehyung —dice un sonriente Namjoon, sin soltar la mano de Seokjin, y señalando a un hombre pelirrojo—. Jimin, Yoongi también viene solo, no te preocupes.

El menor de pequeños ojos sonríe hacia el moreno mientras asiente con la cabeza. Yoongi no puede creer lo pequeño que es el mundo y cómo es posible que su reencuentro con Jimin tras seis años sin saber nada de él sea en una boda.

— Es un poco gruñón —continúa Namjoon, sin poder percibir la situación—, pero no lo tomes personal. Así es él.

— Lo sé —habla el pelirrojo sentado frente a Yoongi, con una linda sonrisa en los labios—, ya he tenido el placer de tratarle.

— ¿En serio? —El futbolista mira a su mejor amigo sin creérselo.

— Vamos a bailar, Nam.

Seokjin salva el día llevándose lejos al moreno que solo hacía más incomoda la situación. Pero en un segundo, Yoongi se arrepiente de ello, pues ahora está solo en una mesa junto a la primera persona que llegó a quererle y a la cual tuvo que alejar por su propio bien.

— ¿Incómodo? —Pregunta Jimin, tomando un sorbo de su trago mientras observa los horribles pasos de baile de Namjoon.

— Solo un poco.

Jimin ya no está saltando por todos lados, ni hablando sin parar o repitiendo cada dos segundos lo mucho que gusta de Yoongi como lo hacía hace seis años.

Ahora es alguien bastante maduro. Eso le agrada al mayor, que no ha podido dejar de notar lo apuesto que se a vuelto Jimin.

— ¿Qué has hecho estos años?

— Bien, me mudé, terminé la universidad, ahora trabajo en una compañía publicitaria.

— ¿Como modelo? —El menor sonríe y Yoongi cree que se ha sonrojado.

— Como director de campaña.

Yoongi sonríe y le da un sorbo a la bebida que el mesero le dio y no había probado desde entonces. Su niño había crecido bien.

— Llevo cinco minutos esperando a que te me insinúes —escucha decir al pelirrojo—, si no haces algo me iré con un niño con cara de ardilla que vi hace un rato.

— ¿Es una amenaza?

— Es una forma de llamar tu atención.

Jimin sonríe una vez más y por primera vez, Yoongi le corresponde.