¿Será el perfecto?

¿Será que si?

Yo jamás me iba a olvidar del amor que yo le tenía a Emma y últimamente estaba muy cariñoso con migo. Lo último que se pierde es la esperanza.

Una tarde yo me aliste y estaba lista para salir.
Emma me dijo- Elena a donde vas?
Yo le dije- tengo que ir al hospital.
Contesta él- a que? Estas bien?
Si, no te preocupes nada más tengo que ir al chequeo anual y a recibir unas inyecciones. Dije yo.

Emma dijo que él no había ido a su chequeo y que aunque tuviera varios tatuajes nunca le gustaron las inyecciones que si quería podíamos ir los 2 juntos. Yo acepté pero le advertí que odios las agujas y puede ser que me porte como una completa niña. Él dijo que no me preocupara que a él eso le gusta.

Nos fuimos y yo ya iba bien nerviosa, Emma intento calmarme, fue súper cariñoso.
Llegó nuestro turno y me tenían que poner 4 inyecciones y a él 3. Desde el principio yo tenia ganas de llorar pero Emma me trato súper bien. Fue él primero, le di la mano y como siempre fue muy valiente, después de todos sus tatuajes ¿como no?. Cuando era mi turno Emma me dijo que me sentara encima de él y así no vería nada, acepte él me dio la mano y me abrazó. Con la primera inyección todo iba bien, ya con la segunda mis ojos se empezaban a llenar de lágrimas. Yo pensé "no puedo hacer el ridículo con Emma aquí". Él parecía haberme leído la mente y me dijo- llora esta bien, se que esto no es lo más agradable y estaré aquí para vos.

En ese momento yo me derretía por dentro y aun me faltaban dos inyecciones. Las últimas dos eran las más dolorosas y eso yo lo sabia, cuando yo ya iba a llorar como una bebe Emma me dio un beso y ahí se me olvido todo el dolor, no lo podía creer. ¡Emma de verdad me amaba! El beso fue genial, él se quito hasta que ya había terminado todo. La enfermera se nos quedo viendo raro pero a nosotros no nos importo.

Aun así yo estaba un poco adolorida Emma, lindo como siempre me abrazo y me dijo lo mejor para el dolor es llorar, llora en mi. La verdad yo no lo pensé dos veces, Emma se portó de maravilla estuvimos abrazados unos 5 minutos y después me dijo te ganaste un helado y nos fuimos por él. Mi relación con Emma por fin estaba empezando.