La mente y el dinero

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Me levanto y escucho a mi hermano pelear con mi padre acerca de un viaje familiar que se aproxima, coloco mis ojos en blanco y me voy directo a la ducha, una media hora después, estoy lista para el colegio, este es mi ultimo año de bachillerato deseo que acabe pronto, irme lejos de los problemas.
- Buenos días.- Saludo de mala gana, sin embargo nadie me presta atención, la discusión de estos dos seres abruma toda la casa, sigo de largo.
Mi madre tan amable como siempre me ofrece desayuno, asiento y espero, mientras parece que estoy en un mercado por el ruido que esos dos provocan en tan innecesaria discusión.
Desayuno, agarro las llaves de mi carro y dos minutos más tarde Sebastián mi hermano menor pide que lo lleve, ya que mi padre estará ocupado con Samuel en su tremenda discusión.
Dejo a Sebastián en su salón y camino a donde esta Silvia con su común cara de sueño. Enseguida llega Jeanpaul y pasa sus brazos por mis hombros y estampa un  beso muy cerca de mi boca, volteo delicadamente y le pego una cachetada que todo el mundo queda en silencio, doy media vuelta agarro a Silvia y camino a mi salón. Silvia me pellizca.
- ¿Que carajos fue eso?.- Dice, en cuanto entramos al salón. Le hago malos ojos, y me siento en mi puesto sin hacer ningún comentario al respecto. Ella sonríe y se sienta. A los pocos minutos entra el patán con su grupo de idiotas y se sientan en la parte de atrás del salón, donde se encuentran los menos estudiosos, yo en cambio voy sentada en la primera fila, se podría decir que soy una nerd.
Al final del día estoy sentada en el capo de mi carro hablando con Silvia, cuando aparece aquel hombre alto de cabello negro, ojos azul claro, perfectamente tonificado y con su complejo de superioridad activado, mejor dicho el patán.
- Sophia, nena hermosa, ¿me vas a explicar literatura?.- Dice con esa voz de galán. Solo puedo pensar ¿que imbécil no entiende literatura?.
- No.- Respondo. Cuando escucho la voz de Silvia.
- Yo te ayudo a cambio de dinero.- Dice. No puedo creer que ella vaya a explicarle a este patán, ¿en realidad necesita dinero? ¿Por qué no me lo ha pedido?.
- Lo que quieras, el jueves en mi casa.- Dice Jeanpaul. Y se marcha sin siquiera despedirse.
Miro de mala gana a Silvia.
- Obvio no necesito el dinero, solo quiero conocer su casa, y hacer alguna maldad. Aunque el es realmente guapo, ojalá no fuera tan idiota.- El final de su comentario nos hizo reír a ambas.
Luego de dejar a Silvia en su casa. Voy directo a comprar un café, eso me pondrá activa, para cualquier cosa que pase en casa, tengo el presentimiento de que algo no va bien, no he recibido llamada de mis padres ni de mis hermanos en todo el día de hoy.
Intento abrir la puerta de mi casa cuando escucho un grito desgarrador y mis llaves se caen, las lágrimas empiezan a salir solas de mis ojos, mientras intento recoger las llaves y abrir en silencio. Cuando por fin mis manos temblorosas abren la puerta, mis ojos se encuentran con la imagen que jamás pensé ver.

My little secretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora