Desperté con un fuerte sonido, que como supuse era mi despertador. Mire la hora y eran las 6 a.m; entraba a las ocho pero decidí levantarme mas temprano para aprontarme, no es que me esfuerce mucho en lucir bien porque en realidad no me importa mi apariencia, pero me gustaba desayunar.
Me levante, entre al baño, mire mi reflejo en el espejo y doy gracias porque el chichón en mi frente ya no estaba lila ni hinchado. Me lave los dientes, la cara y mi pelo solo lo deje como estaba, la vida es demasiado corta para peinarse todos los días.
Cuando salí del baño me puse a vestirme, me puse unos vaqueros negros estrechos, un buzo sin mangas del mismo tono que decía en letras blancas "Muérdeme" y para finalizar mis clásicas Vans.
Cunado salí de la habitación ya eran las siete, fui a la cocina, me serví un tazón de cereales con leche y a los pocos minutos comencé a sentir los despertadores de las chicas, me recosté en el sofá a comer y prendí la Tv para entretenerme el tiempo que restaba para comenzar las clases.
Media hora después me encontraba con Molly y Carly caminando hacia el edificio de los salones.
- ¿Estas nerviosa Sky?, ya sabes, por empezar nuevamente las clases. -me pregunta Carly.
- No.
- Oh vamos, todo el mundo tiene nervios el primer dia.
- Pues yo no.
- Esta bien, te creo... -dijo esta terminando la charla acerca de los nervios.
Verdaderamente no estaba nerviosa, nunca me habían dado nervios este tipo de cosas y a decir verdad, era poco lo que llegaba a ponerme con los nervios a flor de pie, pero por suerte había aprendido bien a disimularlo cuando sentía ellos.
- Molly, ¿como esta Megan?. -vuelve a hablar Carly dirigiéndose a su hermana.
- Bien, supongo. -responde esta.
Esperen... ¿quien es Megan?
- ¿Quien es Megan? -pregunte para sacarme de intrigas.
- Mi novia. -respondió Molly.
¿QUE? ¿Acaba de decir novia?
- Espera... tu eres... -me quede en silencio atónita.
- Si, lo soy. Espero que no tengas nada en contra de las lesbianas. -dice soltando una carcajada.
- No, no, como crees. Es tu elección, si decides que te gusta las mujeres pues esta bien. Yo no soy nadie para juzgarte. -dije rápidamente.
Yo no tengo nada en contra de las lesbianas, es mas, las respeto porque como todo ser humano se lo merecen.
Molly no me respondió, solo me dio una pequeña sonrisa. Carly siguió con el tema de Megan y por lo que escuche, en este momento se habían pelado porque Megan no quería que se diera a la luz que salia con Molly.
Cuando llegamos al gran edificio en la puerta nos esperaba Logan y Blake, el cual estaba bastante guapo hoy, llevaba su cabello castaño despeinado, unos vaqueros azul marino y un polo negro.
Esperen que digo, ¿guapo? no nada que ver...
- Hola chicas, ¿como están? -pregunto Logan en cuanto llegamos a su lado.
- Muy bien cariño, ¿como estas tú? -le responde Carly besando su mejilla.
- De maravillas nena. -le dice Logan tomándola por la cintura y besándola como si no hubiera un mañana.
- Okay, esto es mucho amor para mi, vayámonos chicos -dice Molly tomándome por el brazo y jalando de mi hacia adentro del lugar, haciendo lo mismo con Blake.
Una vez dentro Molly nos suelta pero ambos seguimos caminando a su lado.
- Mo, ¿sabes sonde queda el laboratorio? deje mi pequeño mapa en la casa. -le pregunto a Molly (por si acaso "Mo" es su sobrenombre).
- Es tu día de suerte Sky, Blake tiene clase en el laboratorio ahora y te puede llevar hasta allí. -dice Molly como si nada.
- Yo no voy a llevarte. -responde seco Blake.
- Pero miren, el Badboy habla. No te preocupes niñato, lo buscare sola. -dije para fastidiarlo debido a que hablo con los demás excepto conmigo, no lo entiendo, soy adorable.
Lo se, tengo un gran ego, pero que le voy a hacer...
- ¿Niñato? por favor vamos, eres una infantil y ¿me dices niñato? -rió Blake, si que me ponía mala este chico. Nadie se reía de mí.
- Oh por dios, no tengo tiempo para sus peleas de críos. -dijo Molly retirándose y entrando a un salón que estaba cerca de nosotros.
- Pues si, te eh dicho niñato y tengo mas, infantil, crió, chiquillo, niño, criatura, nen...
No pude terminar la frase, Blake me acorralo contra la pared del pasillo haciendo que mi espalda chocase con esta.
Diablos, me esta poniendo nerviosa, esta muy cerca de mi... Un momento, dije ¿nerviosa?. Este chico no me puede poner nerviosa, nada me pone nerviosa.
A quien engaño, si que estaba nerviosa pero de ninguna manera se lo mostraría.
- ¿Por que no cierras tú maldita boca Sky?, créeme te ira mal si no te callas. -dijo este aproximándose a mi y mirando mis labios.
¿Pero a este que le pasa?
- Lo siento. -susurre.
Y lo bese.
Naaa ya quisieran.
Apoye mis manos en sus hombros para hacer impulso y estrelle mi rodilla contra su masculinidad.
Él se agacho agarrando su entrepierna gimiendo de dolor, pero en mi defensa el se me estaba aproximando mucho y un ángel como yo no podía permitirlo.
Empece a reír pero a los minutos me calle y empece a correr por el largo pasillo debido a que Blake se recupero mas pronto de lo que imaginaba y como es de suponer, empezó a correrme.
Vi una gran puerta que daba a las canchas y la piscina, inmediatamente corrí hasta ella y salí. Mire para todos lados buscando un lugar donde esconderme cuando sentí unas manos en mi cintura y en un serrar y abrir de ojos alguien me estaba cargando en su hombro.
- ¡Bájame idiota! -le grite a Blake que me llevaba cargando en dirección a la ¿piscina?
Ay no...
- ¡Blake no, no, no me tires al agua, lo siento, lo siento! -rogué mientras el seguía cargándome.
- No me gustan las chicas que se portan mal. -dijo, no me dio tempo a responder cuando mi cuerpo impacto contra el agua.
¡Maldito Blake!
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Boarding School
Teen FictionSky, una adolescente de diecisiete años, rebelde como ella misma, decide devolver una broma que le han jugado. Pero ella no es consciente de las consecuencias que esta le provocara... Consecuencias que en su totalidad no son todas malas, consecuenci...