Todo se ha vuelto oscuro...

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(Narra yo)

Yo soy... y yo la odio.

No solo quedaban 5 días para terminar las clases, sino que mis nervios habían aumentado, nunca me había confesado en persona hacia él, pero ella había aceptado estar junto a él. Justamente estaba allí, presumiendo de su suerte, presumiendo de la suerte que me había quitado de las manos. Mi furia aumentó. Entré a clase y me olvidé de su existencia. Al salir al entretiempo, me dirijí hacia la cocina y tomé un cuchillo. Ella estaba allí, riendose de mi, riendose de lo que me había quitado. Por primera vez, la enfrenté, y sin mas preambulos, la apuñalé. Todos se dieron vuelta al escuchar su grito, y quedaron paralizados, parados frente a mí.

Entonces el cuchillo cayó al suelo... Aparté la vista de suelo y lo mire a los ojos y los cerré, impidiendo que las lagrimas se escaparan, ¿qué acababa de hacer? Me di la vuelta aún con los ojos cerrados, y empecé a caminar, notaba la mirada de todos sobre mí, me puse la capucha y abrí los ojos, rompiendo en un mar de llanto inmenso y silencioso, empecé a correr sin mirar hacia atrás, lo único que se pasaba por mi mente era ese momento, ese instante en el que simplemente, la apuñalé, sin provocación alguna. Todos habían quedado en shock, si bien nadie me seguía, todos continuaban mirandome con terror y desesperación, en ese momento comprendí la gravedad de lo que acababa de hacer. Miré mi uniforme, totalmente cubierto de sangre, cubierto de su sangre. Fuí hacia el baño, donde me limpié y logré retirar toda la sangre de mi cuerpo, con mucha facilidad me escapé del colegio, sin saber hacia donde iba a ir. -La maté- susurré, mientras caminaba, -La maté sin piedad alguna-.

Todos mis amigos, mis compañeros, mis profesores, incluso él, me habían visto matarla.

Las sirenas solo me hacían recordar su grito.

Seguí caminando y terminé frente a la playa, mientras me preguntaba qué sería de mí. Repetidos suspiros solo expresaban mi preocupación y mi desesperación, pero nunca me arrepentí de lo que ya había hecho. No me podía dormir, había dejado todas mis cosas excepto mi campera. Tenía sed y hambre, además de frío. Al despertarme, sin tener idea alguna de la hora que era, me sentía mejor, pero a la vez desesperada y hambrienta. Sorpresivamente, él estaba allí, sentado, mirando hacia el mar. Me paré y me puse la campera, intentando taparme, pero fue inútil. Me descubrió al instante junto a una cara de asombro inmenso -¡¿E-eres tú?!- gritó -N-no- tartamudé, intentando que no me descubriese

-¡Claro que eres tú! ¿Acaso crees que soy idiota?- me dijo en un tono de desesperación.

-T-tu la mataste- dijo cabizbajo

-¡¿Cómo puedes creer que fui yo?! ¡Yo no hice nada!- grité, mientras caía al suelo rompiendo en un mar de llanto. Sentí sus manos frías sobre mí

-¿Qué te hizo ella a tí?- me preguntó, en un tono más sútil.

Me paré, y sin mirarlo le respondí:

-Todo-.

Se cruzó de brazos y me miró a los ojos

-Te entiendo. yo también me he sentido así- me dijo, aún con los brazos cruzados.

Aparté mi vista del suelo y lo miré, él me miraba dulcemente, mientras se acercaba lentamente, hacia mi. Lo abrazé con tanta fuerza que sentía como le dolía, asi que me aparté y el me sonrio. Tomó mi mano y me miró a los ojos

-Ambos somos iguales, creeme-.

(Narra él)

Faltando tan solo 5 días para terminar las clases, ya había logrado que ella se fijase en mí. Conseguí estar junto a ella, por lo menos sabía algo sobre mí, aunque sea mi nombre. Se veía demasiado perfecta hablando con sus amigas, sin duda esa cara, ese rostro, nunca lo iba a olvidar. Entré a clases y en lo único que pensaba era en ella, en sus ojos, en sus maravillosos ojos. Era muy suertudo al tenerla, al estar junto a ella.

Salí de clases y el tiempo pasó muy rápido, de repente, escuché un grito, escuché su grito. Inmediatamente me di vuelta y vi algo que nunca voy a olvidar. La vi tirada en el piso, desangrándose, pero, ¿Quién le hizo esto? Era algo bastante obvio. Allí estaba, parada, mirando al piso, entonces, me miró a los ojos y los cerró.





Él, ella y yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora