Aquella pregunta..."¿Te gustaria...salir con migo?" Por que tuve que hacerlo, supongo que el corazón hizo con migo lo que le dio la gana.
Alli estaba yo, sentado en el sillón con la cabeza sujetada por mis manos,y con el corazón palpitando rapidísimo,estaba a punto de romper a llorar.Pero de repente algo rompió el silencio,Rose había contestado,no tenía el suficiente valor para mirar lo que ponía,a si que estuve reflexionando y armandome de valor y unos minutos después, lo leí."No sé, ha sido tan de repente...Tengo que pensarlo,te lo digo mañana".
¡Yo no podía aguantar un dia esperando la maldita respuesta!
