Parte 2

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ahí estaba el, sentado en su silla como cada vez, rodeado de velas, metido en su traje de gala, viejo y desgastado, un poco fuera de época a decir verdad, con ese sombrero de copa del cual no me atrevía a burlarme y que lo hacia ver mas siniestro e invariablemente, detrás de el y de pie a su lado Lady Venom, vestida como los hombres pero en cuero ajustado, un escándalo a todas luces en nuestra sociedad

Papa Legba sabía a que había ido y no me hizo esperar, deje el dinero en una bandeja de plata que estaba sobre la repisa de al lado rodeada de serpientes pequeñas, cuando me volví ahí estaba ella, cerca de mi, demasiado cerca con un pequeño paquete entre sus manos, pude sentir su aroma, el aroma de su piel oscura, de su perfume dulzón, el aroma a hembra y...

claro, aquel olor saliendo de entre los pliegues del papel, un olor que me urgía a volver a casa pronto

el frío de la noche me acompaño mientras baja los escalones de la Casa de los Reptiles, las luces amarillas que escupían las ventanas de la Iglesia de Raziel acariciaban mi sombra compañera, me detuve un segundo a observar, las desgastadas gárgolas, el roble oscurecido por el tiempo en las paredes, los tallados rebuscados y los cuervos que siempre graznaban en las puntiagudas cúpulas, dentro de mi supe que algún día debería entrar a conversar con los hijos del averno, pero no esta noche...

continué mi vuelta a casa con alegría y malas intenciones en mente sintiendo el suave golpeteo de mi adquisición en el bolsillo del gabán 


La Casa de los ReptilesWhere stories live. Discover now