Invierno [HS]

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-Eso sería lindo, aunque no soy gran admirador del arte. –Dijo Harry haciendo una mueca algo chistosa.

-No hay problema. Podemos jugar en la feria si con eso estas mejor. –Los ojos de Harry brillaron ante las palabras de Summer y con eso la chica rio.

-Eso sería fantástico. –Dijo el chico más alegre. Las campanillas del local sonaron nuevamente–No es que quiera irme pero debo seguir trabajando. ¿Nos vemos mañana? –La chica asintió ruborizada y asintió. –Entonces es una cita. Te veo en el parque a las 10 a.m. –El chico se levanto de la silla y fue a atender la señora que recién había entrado.

Summer no quería pensar que su salida era al estilo de una cita puesto que estar en una cita con un chico lindo y carismático involucraba mucho más cuidado, preparación física y psicología y eso no estaba dentro de los estándares de Summer. Quería que fuera una salida de amigos normal, donde podría intentar ser ella misma aunque ella misma era algo extraña y gruñona.

Pero le emocionaba saber que a pesar de haber sido ella la que invito a Harry, él lo tomara como una cita. Eso quería decir que él también quería.

Summer pago y se dispuso a irse. La tormenta había escampado pero en cualquier momento podría volver y no podía esperar. Salió del local sintiendo una gran ráfaga de viento. Sería una caminata larga a su casa.

Apenas estaba por la esquina cerca de la cafetería cuando escucho que gritaban su nombre. Summer volvió a ver y vio al chico que la atendía corriendo hacia ella.

-Ten, puedes devolvérmela cuando quieras. –El chico se quitó su abrigo y lo coloco sobre ella.

-No, no puedo aceptarlo, es mucho. –Dijo Summer algo nerviosa quitándose el abrigo.

-Sum, no lo pienses mucho, te vas a helar. No te preocupes. –Dijo el chico con una de sus hermosas sonrisas. –Tómala rápido Summer, me estoy congelando. –Dijo el chico riendo levemente.

-Gracias Harry, enserio te lo agradezco. –Dijo Summer completamente agradecida.

-Te veo mañana. –El chico le dio un beso en la mejilla tan cálido que por poco derrite el frio que estaba sintiendo.

Mientras que Harry se alejaba, Summer solo miraba su cuerpo desaparecer con la distancia. Podía decir que le gustaba ese chico y no podía esperar a que fuera mañana.

A la mañana siguiente Summer despertó muy atontada, estaba tan cansada ayer, una vez llego a su apartamento tuvo que esperar 2 horas y media a que el conserje llegara al edificio entre la tormenta. Miro el reloj despertador y sintió ganas de vomitar. Ya eran las 10:30 llevaba media hora de retraso para ver a Harry, el pobre debía estar cansado.

Se puso de pie rápidamente y corrió al baño. No podía llegar más de una hora tarde. Se alisto, y tomo todo, su abrigo, sus llaves, celular y billetera.

Corrió lo más rápido que pudo al parque pensando en lo molesto que debía estar Harry. La feria estaba en pie y había muchos niños jugando en el parque y en las atracciones. Podía oler la grasa y el caramelo en las manzanas.

A lo lejos vio a Harry conversando con alguien, se sintió apenada. Se acercó a él con un paso rápido pero inseguro.

-Lo lamento Harry. –Dijo la chica apenas se acercó a él.

-Sum, hola. –Dijo el chico algo confundido.

-Lamento el retraso. –Dijo ella algo nerviosa.

-No te preocupes, en el tiempo que no estabas hice una nueva amiga. –Dijo el chico sonriéndole. ¡Vaya! Admiraba su habilidad para verle el lado bueno a todo. –Se llama Pía.

-Oh... -Summer aún se encontraba apenada, era su primera cita y había llegado con 50 minutos de retraso.

-Sum, no te achicharres, enserio no hay problema. Me imagine que te quedaste dormida. –Dijo el chico con una cálida sonrisa.

-Exactamente eso. –La chica rio un poco y lo miro a los ojos. Hermosa mirada verde y alegre. Llevaba un gorrito de lana y sobre este la capucha de su sudadera.

-Vamos, te invito a un chocolate. –Mientras Summer y Harry caminaban al quiosco de chocolate y galletas iban hablando de cosas triviales. Más bien, Harry hablaba y Summer escuchaba. Le gustaba escuchar su ronca voz.

-¿Tienes frio? –Pregunto ella mirando como el chico temblaba ligeramente.

-Bastante diría yo. –Dijo él.

-Haz dejado a Pía sola... -Dijo Summer mirando a la niña sentada en la banca.

-Bueno, se me ha hecho difícil saber si estaba acompañada o sola. –Dijo el chico dudándolo un poco. –Quédate aquí ¿sí? –Le dio una tierna sonrisa y se alejó rumbo a Pía.

Harry se arrodillo frente a la niña y tomo sus manos, mientras le decía algo, Harry le sonreía con amabilidad y la niña solo asentia y negaba con timidez. Al final de la breve charla la niña le dio un abrazo desde la banca. Summer se pregunto que le habría dicho que provoco cierta alegría en la niña.

Después de unos segundos Harry se levantó y tomo la mano de la niña y comenzaron a dirigirse hacia Summer. Algo confundida Summer pregunto: -¿Qué haces? –Si la niña estaba acompañada se metería en un gran problema, eso podría contar como secuestro.

-Pía está perdida. Podemos ir a buscar a sus padres. –Dijo Harry sonriendo. Era bueno que Harry fuera extremadamente bondadoso pero esta no era la clase de cita que Summer tenía en mente y se había preparado psicológicamente toda la noche. Suspiro y sonrió. Talvez seria lindo encontrar al tutor de esta niña. No sería mejor que una cita pero sería lindo.

-¿Qué edad tienes Pia? –Dijo Summer mirando a la niña que Harry tomaba de la mano. Era castaña de ojos marrones, piel morena. Parecía ser latina

La niña volvió a ver a Summer algo nerviosa sin darle una respuesta.

-No tengas miedo, ella es Summer es una amiga. –Le dijo Harry a la niña. Por alguna razón la palabra "amiga" le atravesó el corazón.