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La historia de Harry aun seguía dando vueltas en la cabeza de Summer. 

En ese momento Harry se encontraba en su regazo apunto de dormirse. Su departamento estaba caliente debido a la calefacción. Era la primera vez que invitaba a Harry adentro. Al principio fue un poco incomodo debido a que aún no había hecho la limpieza, pero a Harry no le importó. Con lagrimas en sus ojos entro y se dejo llevar por los consejos de Summer.

La madre de Harry tenia cáncer y estaba en una de las ultimas etapas, no había nada que se pudiera hacer en ese momento. La cafetería estaba con riesgos de cerrar y su familia se estaba desboronando debido a que era el único ingreso que tenían. Por ello se debía a que la cafetería estuviese cerrada todos esos días y Harry se encontrara tan cabizbajo.

Lo consoló toda la noche, lo abrazo y lo mimo intentando calmarlo. Dio resultado ya que poco a poco fue cayendo dormido en los regazos de Summer. 

—¿Puedo quedarme aquí? —Pregunto en un susurro. A Summer no le molestaba en lo absoluto, Harry estaba pasando por mucho.

—Claro, déjame ir a buscarte una sabana. —Dijo la chica levantándose del sofá para ir a su habitación a conseguir una almohada y una cobija. 

Al volver Harry se encontraba haciendo zapping a los canales sin siquiera chistar en mirar lo que pasaban. Se sentó a su lado y dejo las cosas entre ellos. Harry la miro con las mejillas y los ojos enrojecidos y le dio una pequeña sonrisa.

—¿Tienes películas? —Dijo el ojiverde. La chica asintió y sonrió mientras se levantaba y colocaba una de sus películas románticas favoritas sin avisarle a Harry. En la pantalla apareció el logo de la película: Two Night Stand.

Se sentó al lado de Harry el cual estaba cubierto con la cobija. 

Los primeros minutos de película estuvieron cubiertos de silencio y ligeras risas hasta que Harry rodeo el hombro de Summer con su brazo. Típica jugada. La chica rió por lo bajo y negó ligeramente, Harry hizo lo mismo. 

—Summer... 

La castaña volteo a verlo y este se encontraba relativamente cerca de su rostro. La chica sonrió y se acerco a él hasta el punto de rosar sus labios uniéndose en un beso. Era suave y lento, disfrutaban cada segundo que sus labios se mantenían juntos y chasqueaban cada tres segundos. Al llegar a los cinco chasquidos se separaron. Harry sonrió y acaricio su mejilla suavemente mientras le entregaba un ligero beso en la mejillas para luego recostarse en el regazo de Summer nuevamente. 

—Me gustas. —Dijo Harry nuevamente. No era la primera vez que lo decia y le gustaba escucharlo.

—También me gustas.  —Recordó su conversación sobre volver lo suyo una relación diferente a las demás así que se puso a pensar. —¿Te gustaría ir conmigo a la playa un día?

Harry sonrió y asintió guiñeandole el ojo. Summer asintió con satisfacción y volvió a lo suyo. Ver los créditos de la película.

—Eres hermosa. ¿Ya te lo he dicho? —Ella rió ligeramente y negó ante el comentario. Se acerco y lo beso nuevamente.

Y en eso consistió toda la noche. Besos, mimos, caricias, abrazos y cumplidos.

El celular de Summer timbro así que tuvo que dejar a Harry unos minutos para ir a atender el mensaje.

Era un mensaje de su mejor amigo el cual tenia un año sin hablarle. Decía que se encontraba en la cuidad. Summer se alegro y lo llamó. Quedaron en reunirse al día siguiente para ir a tomar un desayuno en la avenida central.

Fue a la sala con emoción para contarle a Harry pero al llegar lo vio dormido. Se imagino lo cansado que debía estar así que lo arropo y apago el televisor mientras le daba un beso en la mejilla.

Se fue a su habitación y alisto lo que usaría mañana para volverse a ver con su amigo el cual había extrañado mucho. Mañana le contaría a Harry. Esperaba que no se lo tomara mal.

Invierno [HS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora