Capitulo 8

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Me tomo en sus brazos mientras me gritaba cosas que no podía descifrar, me sentó sobre el asiento del copiloto con suavidad, me puso el cinturón de seguridad y paso por delante del carro muy apresurado, a los segundos lo encendió y lo puso en marcha, iba muy rápido, mis ojos se cerraban como si estuviera drogada, comencé a reír de la nada, frunció el ceño, pero no le veía el rostro sino que como era de noche miraba sus increíbles ojos verdes, profundos y misteriosos, que en esos momentos reflejaban miedo y desesperación por mi... por mi?

Mis manos ensangrentadas, mis nudillos doliéndome, mi cuerpo sin estabilidad era lo que me hacia verme tonta o quizás... ridícula? Me dolía0 cada parte de mi cuerpo, pero la cabeza me estallaba.

Sus brazos volvieron a tomar mi frágil cuerpo, pequeños gemidos de dolor salieron de mi boca, las lagrimas corrían por mi rostro, el me las apartaba y apresuro el paso, una luz blanca me cegó por completo tras entrar en aquel lugar enorme y bullicioso, sus cálidas manos se apartaron de mi cuerpo y caí sobre un lugar frio pero suave, mi mano soltó la suya y fue como perderlo para siempre.

No era necesario mencionar que aquel sueño me atormentaba desde aquel incidente, no volví a hallar aquella persona que salvo mi vida, cada vez que lo soñaba la imagen de aquel persona se distorsionaba mas, a veces pensaba que era una chica, pero me convencía de que no lo era haciéndome preguntas tontas y lo demás, pregunte en el hospital referente a aquella persona, pero nadie supo darme respuesta. Poco a poco fui quitando mi interés en esas ganas de encontrarlo.

Me levante de mi cama con aquel pensamiento pendiente, era de noche aun, me fije en el enorme reloj de la sala de estar, 3:35am, tome un vaso de la repisa y saque la jarra de agua helada, solo fue en segundos cuando mi vista se nublo y la jarra de vidrio que sostenía hizo un estruendoso ruido gracias al fuerte contacto con el suelo, tan seguido de este, mi cuerpo cayó sobre todas aquellas partecitas de vidrio que se encontraban allí.

-Alice?!... – la puerta sonó de golpe abriéndose – ALICE!!!

***

Era lunes, un hermoso sol alumbraba desde lo alto, ya había tomado el desayuno y me sentía lista para ir al trabajo, pero un mensaje llego a mi celular, era Cloe la secretaria de la revista.

"Srta. Alice, hoy junta gerencial por ello los demás trabajadores no asisten a las instalaciones" Pdta. Su sueldo ya fue depositado a su cuenta de banco.

Bien más tiempo para mi, hoy tenía que ir a ver a Jade para saber cómo estaba andando con lo de mi enfermedad, recogería los exámenes de la revisión general que me había hecho a pedido de Él y luego podría pasar a revisar el depósito de la empresa en el banco, así me sería una forma más sencilla y rápida de terminar con lo pendiente para el dia de hoy.

Al llegar con Jade, mis resultados eran los mismos, necesitaba con urgencia el tratamiento, debido a la ultima recaída que había tenido hace un par de días, era fundamental el seguir con los medicamentos y que dieran efecto, aunque ya no era asi, Jade me explico que si en menos de un mes no conseguía el dinero, los cambios en mi organismo serian más drásticos hasta llegar a la... bueno... a la muerte.

-Jade, no tengo el dinero, mi mama trato de conseguirlo, pero tú sabes cómo quedaron sus esfuerzos, ella cree que voy mejorado con los medicamentos habituales que tomo y por eso ya no anda preocupada, no puedo decirle lo del tratamiento.

-Marie tiene que saberlo – dijo con severidad – es tu madre.

-Solo dame una semana y si no puedo conseguir el dinero ya no sería necesario informárselo.

-No lo sé, Alice tu vida está en juego, como me pides eso?

- Sabes que eres como un padre para mi, por favor Jade, te necesito más que nunca, sabes que desde que murió mi papa siempre estuviste allí, en serio te quiero como uno, solo ese favor, solo eso –suplique.

- Solo una semana Alice, ni un día más.

- Dios Jade! Gracias, en serio gracias! – le di un abrazo muy fuerte de agradecimiento y un sonoro beso en la mejilla y salí del consultorio lo mas antes posible de que se arrepintiera. Ya afuera, coloque mis audífonos y tome el bus hasta el banco central.

Cuando llegue, una larga cola me esperaba, escuchaba "Let Her Go" de Passenger, sin duda era una de mis canciones preferidas y de las que me relajaban mucho, al final de la canción, me sentí observada alce a vista del celular y un joven de la cola de al lado me miraba expectante por debajo de aquella gafas de sol, al juntar nuestras miradas, no desvió la suya, por el contrario me observo aun con más detalle mi rostro, me sonroje por instinto, pero pareció no importarle, me observaba como si me conociera, llevaba unas gafas de borde negro, no podía mirar el color de sus ojos por la luz que se reflejaba, pero era muy guapo y aquellos rulos no muy formados que adornaban su presentación personal, lo hacían verse un hombre informal, contradiciendo su vestimenta.

-Siguiente! – la Srta. de la caja alzo la voz indicándome que se refería a mí.

Al llegar a la recepción, di mi número de cuenta bancal.

-Srta. Alice Walker? – Asentí en el acto – Ud. tiene un saldo anterior de ***.***.00 depositado por el Sr. Gerard McGuire y lo depositado por la empresa *** el día de hoy, es de ***.00 ambos juntos forman un total de ***.***.00, desea retirar todo el monto o parte de ello?

- Mierda.

***

Aquí les traigo el capitulo que les prometí, espero contar con sus votos y comentarios.

L@s ama y quiere mucho...

Ari<3


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