La empleada de los Styles.

Capítulo 4

Mierda, mierda y mas mierda.

Esto no podía estar pasando, no creo aguantar estar con él toda la noche, algo que no debería ocurrir. Abrí la boca para decir algo pero las palabras no salían de mi boca, no sabia que decir estaría llamando ah la señora Anne pero mi teléfono no tenia batería y menos señal, aunque podríamos llamarla ah él celular de él... Bueno si es que piensa con la cabeza y no con el pene.

- ¿Que haremos?

- No lose. - contestó cortante.

- Bueno... ¿¡Al menos tienes celular!? ¡Podrías avisarle ah tu madre que estamos sin combustible y así no tendremos que pasar la noche aquí hasta que vuelva! ¿¡lo tienes!? - dije desesperada.

Él me miro confundido, luego su mandíbula se tensa y rápidamente busca algo en la aguantera.

Lo miro sin entender, su desesperacion se tranquiliza y vuelve ah su asiento. Sus manos en sus piernas y su mirada al frente era algo que no me sabia bien.

- ¿¡Que pasa!? - Pregunte desesperada.

Él sin mirarme aun me contesto.
- Olvide mi celular en casa. - dijo lo mas tranquilo. ¿Como puede estar tranquilo cuando tendremos que pasar la noche en su auto? Y juntos.

- Oie no, no podemos estar aquí toda la noche, ¿¡como se te ocurre olvidar tu teléfono cuando puede pasar esto!?

- ¿¡Y yo que sabia que pasaría esto!? -desespero.

Me sorprendí ante su respuesta, mis ojos se aguaron, no quería esto, no quería estar con él. Solo quería buscar mi maldita ropa y quedarme en su casa, ya al día siguiente dia no quiero trabajar y menos pensar en que pase toda la puta noche con Harry, no me agradaba para nada la situación en que estaba.

- ¡Yo no quería que esto sucediera no pensé en que se acabara él combustible tan rápido, lo había cargado ayer, joder! - exclamo enojado.

Sus palabras duelen... Y mucho.

- No es mi culpa que esto este pasando, es TU culpa por querer rebuscar tu ropa de lanzada para seducirme.

Dios, ¿de verdad cree que estoy por él? Ni siquiera lo conozco, definitivamente esta pensando con él pene. ¿Cuando pensara con la cabeza? Quizás... ¿nunca?

- Todo es tu culpa, no de viste aver venido ah mi casa por un puto trabajo apenas iniciaste hoy y ya hiciste todo mal. Me dan ganas de golpearte pero no soy tan poco hombre para hacerlo por que no soy así.

Una lágrima cayo sobre mi mejilla al escuchar sus palabras. Ni una palabra diriji al no responder su pregunta tan desesperada que por lo cual siguió arrebatándome en mi primer dia.

Salí del auto algo dolida y enojada, este chico seria como Max, él chico con la cual tenia que soportar sus insultos y maltratos en mi antiguo trabajo.

Tenia la idea de caminar hasta casa aunque la ruta estaba un poco peligroso y más de noche, quizás eso le agrade él ya que tanto no me quería en su casa, ya ah la mañana tendría que renunciar al trabajo, no quería más problemas de las que tuve con la familia Broonklyn. Quizás, solo quizás es mejor para todos.

Antes de avanzar paso voltee al auto y camine hacia él, este solo me miraba confundido.

- Ya no tienes de que preocuparte, me iré SOLA ah casa aver si así estas más feliz. Y lo de mi trabajo lo cual inicie hoy renunciaré mañana, no le diré él por que ah tu madre, quizás le expliques tu. - me di vuelta decidida ah caminar pero su voz me lo impide.

- Claro que no, la ruta hacia la cuidad de vuelta es peligroso. Ni siquiera sabemos que hora son y más con los minutos que estuvimos aquí. - salio del auto y se apoyo en el.