El sol que entraba por la ventana despertó a la joven que aun dormía plácidamente en su enorme cama.
Ría abrió lentamente los ojos con un pestañeo, se sentó y se estiro con un bostezo, al mirar el reloj de la mesita vio que todavía era temprano, apenas las 8:34 de la mañana.
Con una sonrisa se dirigió al baño a darse una rápida ducha y se vistió con unos Shorts vaqueros, una camiseta negra de tirantes con una camisa roja de cuadros abierta y unas Convers blancas, se recogió el pelo en una trenza y bajo a la cocina.
El despertador de Gabe sonó y el muchacho se levanto rápidamente. Se vistió con unos vaqueros negros, camiseta blanca y deportivas negras.
Mientras bajaba las escaleras el olor a café le llego, entro en la cocina esperando ver a Issabel y se encontró con Ría haciendo café y un gran plato de deliciosas tortitas con Sirope, Nata y Caramelo.
- Buenos días Gabe, quieres desayunar? Su sonrisa era dulce y amable.
El joven ángel le devolvió la sonrisa y se sentó en la mesa, ella le sirvió una taza de café y un plato con cuatro tortitas.
Gabe corto un trozo de tortita y la llevo a la probo; abrió los ojos como platos. -Están riquisimas, nunca las había probado antes.
La muchacha se echo a reír, sentándose frente a él.
Sus miradas se cruzaron y Gabe se quedo mirándola con una sonrisa. - Eres hermosa, lo sabias?
Ría se sonrojó y bajo la mirada.
Él sonrió y siguió desayunado tranquilamente.
-Podemos ir de compras? No hay muchas comida, ni medicinas y lo necesitamos.
El chico lo pensó uno minutos y se levantó. - Bien, iré a por una chaqueta y cogeré las llaves de la moto. Ría se sorprendió. - M-Moto? El ángel asintió. - No me digas que te dan miedo? Pregunto con una risa.
La chica bajo la mirada. -No...pero no me gustan.
