Dragon Ball Z: El Corazón Del Androide

¿Quién es Lázuli?

Era el año 767. En la región del norte se encontraba uno de los guerreros más poderosos del universo, Son Goku, él hablaba con otro joven de la raza saiyajin, llamado Trunks, más bien se despedían, después que este le confesó que venía del futuro, y que dentro de tres años, la tierra sería atacada por unos cyborts, cuya fuerza era insuperable.

-¿Nos volveremos a ver?

-No lo se. Tengo que recargar la máquina del tiempo y eso se tarda mucho.

-Ya veo. Entonces cuidate Trunks, recuerda que ahora tienes un destino.

-Muy bien señor Goku. Si me va bien... si en ese entonces sigo con vida, y tengo buena suerte, puede que regrese a ayudarlos. Entonces, nos veremos dentro de tres años.

-Sí, seguro... ah, pero es que...

-¿Sucede algo?

-Es que... verás... es que... ¡ay! ya olvidé el lugar en que me dijiste que aparecerían los androides -dijo sonriente Goku.

-El día doce de mayo, a las diez de la mañana, en una isla que está a 9 kilómetros de la capital del sur. ¿Eh? Siento un ki...

-¿Uh? Es cierto -dijo Gokú, mirando atrás de él-. Viene de esa dirección, es enorme.

-¿Quién podrá ser? -se preguntó aquel joven sorprendido.

En ese momento, ante ellos, descendió una mujer de apariencia malisiosa, que venía volando. El muchacho se sorprendió al ver aquella cara conocida.

-Nú... número... ¿18? ¿Qué broma del mal gusto es esta? -La mujer guardó silencio, y caminó hacia él, mirando a Goku cuando pasó por su lado-. No des un paso más, o si no vas a lamentarlo, ¡monstruo!

-Tranquilo Trunks, no es lo que parece.

-Te lo advierto, un paso más y...

-¿Dijo número18? ¿A caso ella es una de los androides de los que me hablabas hace rato?

-¡Que no! ¡No soy esa cosa! No todavía -gritó ella, fijando su furiosa mirada sobre Goku-. Escúchame Trunks -dijo, acariciando su largo cabello rubio-, es muy importante que me prestes atención. Mi nombre es Lázuli, soy a quien el doctor Gero secuestrará para convertir en un ser indestructible, pero aun no soy esa que tu crees.

-¿Te estás burlando? ¿Cómo demonios llegaste hasta aquí? ¿A caso tienes una máquina del tiempo? ¡Contesta! -desenvainó su espada.

-¡Cállate y escúcha! Al igual que tú, vengo del futuro, Soy del año 2,700 pero de un lugar muy diferente al que conoces. Imagínate que la línea del tiempo es como el tronco de un árbol, las diferentes ramas que nacen de el son como otras líneas de tiempos diferentes, pero las hojas.... las hojas son parecidas a los multi-universos, algo así como dimensiones paralelas. Soy de un mundo paralelo. Antes de llegar aquí yo... era una chica mala, una delincuente, era una famosa ladrona. Pero, recibí una oferta. Un científico, conocido con el nombre de Maki, me ofreció un trabajo en su laboratorio, de secretaria. Como yo estaba harta de aquello que vivía, decidí aceptar, con la esperanza de quizás sacar provecho.

Mi hermano Lapis... él se reusaba a todo. Yo trabajaba con una máquina con la cual se podía rastrear y observar cualquier parte del planeta, no solo en el presente, sino también se podía ver hacia el futuro y hacia el pasado con ella.

Un día, el doctor no estaba y aproveché para ver si encontraba algo de valor en su oficina. Pero unos minutos depués, su computadora personal se encendió sola; recibió un mensaje muy extraño, cuando me acerqué a ver, eran los planos para construir robots con bases humanas, luego aparecieron unas fotografías de varios jóvenes, con información detallada de cada uno, incluyendo una mia y otra de mi hermano. Me asusté más cuando vi que estaban abriendo la puerta, asi que desconecté aquel aparato y fingí que estaba limpiando.