Inizio

Scott

-Hola Basso

-¿Cómo estas Scott?

-No muy bien

-¿QUÉ PASA MUCHACHO?- Basso se acerca a mi- ¿Qué tienes?

-Ya lo hice. Mi último adiós.

-Tranquilo muchacho. Fue lo mejor que pudiste haber hecho. Ella es fuerte y lo superara.

-¡Soy un idiota! ¿Cómo no pude haberme dado cuenta lo especial que es Vee? Lo hermosa que es. Soy un estúpido.

-A veces lo mejor que uno tiene no lo puede ver, o si pero ya es demasiado tarde.  Esta fue tu suerte Scott. Esa vida te toco vivir, la de un amor que ya no podrá ser. Pero aún tienes algo de suerte, podrás hablar con ella cada año. Podrás bajar a la tierra y estar con ella un sólo día. Esa fue una condición para que pudieras ser un Ángel, después de haber salvado a muchas personas lo menos que te mereces es esto. Lamento que sólo sea un día, pero no puedo hacer más.
Sólo puedes verla desde aquí día tras día.
Scott, ahora tu eres su Ángel Guardián.

-¿Entonces la volveré a ver?- sonrió nostálgico y con lágrimas en los ojos- No, no quiero. Con el tiempo ella se olvidara de mi. Quiero que siga su vida y no quiero que me espere cada año para verme. Yo ya me despedí de Vee, le dije que me dejara ir así que yo haré lo mismo.
Quiero que sea feliz con ese hombre tan afortunado por tenerla.

-Es tu decisión muchacho. Pero de todas formas cuando quieras podrás bajar, puedes dejar pasar años pero de todas formas vas a tener la oportunidad de verla. Ella algún día te volverá a necesitar y pensara en ti, y ese día no dirás que no.

-Esperare con ansias ese día, pero por el momento quiero que se olvide de mi. Sufrió bastante y merece que alguien la ame mucho más que yo.
Conmigo en su mente no avanzara, y siempre llorara por un idiota como yo.
No se lo merece.

Basso suspira- Eres un buen muchacho, verás que el tiempo recompensa todo. Sólo hay que saber esperar y te sorprenderás-sonrie.

-Solo espero que no llegue tarde...