Capitulo 20

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*El día del accidente*
Narra Hikari: (por si no la recuerdan es la mamá de Daniela)
- Ryu, tengo un presentimiento y no es para nada agradable - me abracé con mis brazos
- Dejate de estupideces - siguió leyendo su libro
- No son estupideces Ryu - dije enojada - Daniela, tu hija puede estar en peligro - me acerqué a él enojada
- cerró su libro bruscamente - Daniela no es mi hija - me miró a los ojos - Y veo que vas a querer seguir discutiendo así que me voy al despacho - se levantó del sofá - Y te dejare con tus estúpidos presentimientos
- Eres un insensible - grité - Daniela si es tu hija
Salió de la casa dando un portazo, me quedé llorando, y no por tristeza si no por coraje. Sé que nunca me perdonará aquel pequeño incidente.
Limpie mis lágrimas, tomé mi celular y le marqué a Daniela
- Contesta... Por favor - susurré
Uno... Dos... Tres... Cuatro... Buzón de voz, traté de no ponerme nerviosa, suspire y volví a marcarle... Nada
- Dani... ¿por qué no me contestas? - hablé para mí
Subí a mi habitación, me recosté de lado
- Tal vez ha de estar ocupada o aún no aterriza
Miré la foto que estaba en le mesa de noche, estábamos los tres Ryu, Daniela y yo haciendo caras raras, Daniela tenía apenas 6 años de edad, aún recuerdo cunado tomé esa foto cuando todo estaba perfectamente bien entre los 3
*Flashback*
- Daniela, no corras que te puedes caer - gritó Ryu
La pequeña niña hizo caso omiso al comentario de su padre y siguió corriendo, Sonreí
- Es igual de necia que tú - besó castamente mis labios
- Pero así nos amas - esta vez yo lo besé
- Iugh - nos separamos - Delante de mí no por favor - reimos por su comentario
- ¡Vaya! Hasta que dejaste de correr como chiva loca - río Ryu
- Es que tengo hambre - le enseño su linda lengua a su padre que este imitó su acción
- ¿Les parece si nos tomamos una foto? - asientieron
- Pero hay que hacer caras raras - se emocionó Daniela
- Vale - dijimos al unisonido
Tomé aquella foto, Ryu con los ojos viscos y la lengua de fuera, Daniela con sus manitas en forma de cuernos sobre sus orejas y sus ojos igual que su padre, y yo solamente fruncí mi boca y nariz nada gracioso.
- Listo - avisé
- A ver, a ver - me arrebató la cámara Daniela - OH DIOS MÍO - gritó - SALIMOS GRACIOSOS - rió a más no poder, ¿y cómo no contagiarse de esa risa infantil?
*Fin del flashblack*
Duele demasiado recordar aquellos momentos que pasamos juntos, siendo una familia normal como cualquier otra, hasta que ese día llegó, el día en que Daniela se fua separando de nosotros, Ryu la hacia menos y yo dolida e indignada.

Marii



Perdida Con Mi Jefe ||H.S|| EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora