Los gemelos Styles/ Larry Stylinson/ PAUSADA

Uno

Harry:
12 de Julio de 2001
-Muévete idiota, tengo que llegar a clases.-me zarandeo Edward
-Eddy, por favor. No me dejes aquí, soy nuevo y todo esto me asusta.
-Mira, antes que nada te he dicho mil veces que no me llames Eddy fuera de casa.-me tomo de la camisa.-Segundo, te llevaré hasta tu salón, pero me iré después. Tengo clase también, Harry.
-Gracias, Edward.-lo abrace
-Si, si, si. Suéltame.-me empujó.
Caminamos juntos, al entrar al gran edificio azul, las miradas de las chicas se posaron en Edward.
Siempre me he preguntado qué es lo que ven en Eddy, es guapo pero, tiene un carácter horrible.. Tal vez es porque es muy bueno en la cama. Bueno, eso lo sé porque cada día llega con una chica diferente al departamento, y todas lo llaman pero nunca más las vuelve a buscar.
Edward mira a algunas chicas y ellas lo miran de vuelta.
Yo volteo a verlas y se sonrojan, pero con Edward parece que su trasero aumenta y sus pechos también, es como si Edward fuera una máquina de sexo y grandes orgasmos.
-Listo, enano.-sonrío.-Aquí es tu salón, no pierdas esta mierda.-sacudió un pedazo de papel en mi cara y lo tome.-¿Qué es esto, Eddy?
-Es tu horario, dice en que salón te toca, con que maestro, a qué hora y que días.-sonríe.-Es muy importante.
-Bien, gracias hermanito.-lo abrazo.
-Si, basta de tanto cariño.-me empuja.-Te veo después.
Se aleja a grandes pasos y un par de chicos se le acercan.
Entro al aula, y la mayoría de los chicos ya están ahí.
Me siento en la última fila, en el segundo pupitre.
Saco mis libros y dejó mi mochila a un lado de mi.
-Hola.-escucho.
Volteo y miro a una chica morena de ojos miel, su pelo chino, largo y negro.
-Hola.-sonrío
-¿Cómo te llamas?.-sonríe de vuelta.- ¿Puedo sentarme aquí?.-señala un pupitre delante mío.
-Soy Harry, ¿y tú?.. Amm, claro. Puedes sentarte.
-Hola, Harry. Yo soy Melanie.-sonríe de vuelta.- Gracias, eres el único que se ha ofrecido a hablarme.
-Eres muy amigable, no entiendo porque no te hablarían.
-Tal vez porque sonrío mucho.-sonrío por tercera vez.
Reí fuerte y ella también.
Comenzamos a platicar de muchas cosas, Melanie era agradable y era muy linda.
-Harry, no quiero asustarte pero.. Ese chico que está en la puerta no te ha quitado la mirada desde que llegaste.-hace un movimiento con su cabeza.
Volteo disimuladamente y mi corazón comenzó a latir muy fuerte, mis manos sudaban y me sonroje.
Era el chico más hermoso que pudiese haber visto en la vida, tenía cabello quebrado, café. Ojos terriblemente azules, los labios rojos.. Era un sueño. Me sonrío y yo solo me volteé en dirección a Melanie.
-Deberías hablarle, es guapísimo.
-Mel, por favor.-reí.
-¿Eres..gay, cierto?.
-Si, pero no por ser gay.. Me voy a fijar en cualquiera que me sonría, aparte creo que es mayor que yo.
-¿Y eso que tiene que ver, Harry?
-Me aterra.-reí.
-Maldita sea, se está acercando.-me tomo de la mano.
-¡¿Qué?!.-Abrí los ojos muy fuerte.
-Iré al baño, regreso en un instante.
Cerré los ojos, y tragué saliva.
Aquel chico se sentó frente a mí, y lo mire directamente a los ojos.
-Hola.-sonrío
-Hola.- contuve mis ganas de tartamudear.
-¿Cómo te llamas?.
-Mi nombre es Harry.-sonreí.-¿Y tú?
-Soy, Louis.-sonrío.-Lamento incomodarte, pero no pude contener mis ganas de hablarte, ¿sabes? Eres muy lindo.
Sentía que me moría, era demasiado lindo y estaba guapísimo.
-Gracias.-sonreí y mordí mi lengua.
-¿Harás algo después de la escuela?
-No.-sonreí
-¿Te veo en el estacionamiento? Quiero invitarte a algún lado.
-Esta bien.-sonrío.-Ahí nos vemos entonces.
Tomo uno de mis bolígrafos y abrió mi libreta, escribió unos números y me regreso el bolígrafo.
-Ese es mi número, puedes llamarme cuando quieras.-sonrío.
-Claro, te llamaré para que agregues el mío.
-Eso sería genial.-sonrío.- Me tengo que ir, tenemos una cita eh.
-No la olvido.-sonreí.
Se levantó del pupitre y camino fuera del aula.
Melanie entró corriendo y se sentó en su lugar.
-¿Qué pasó?.-río.-Estas más blanco que un fantasma.
-Me invitó a salir y me dio su numero.-reí
-¿Qué? ¿De verdad?.-sonrío.- ¿Y qué le dijiste?
-Le dije que si, obviamente Melanie.
Ella gritó fuerte y me abrazo.
-Excelente, Harry.
La maestra de Historia entro al aula y todos se acomodaron en sus asientos.
-Lamento la demora chicos, un idiota de estaciono en mi lugar y tuve que correr por toda la maldita escuela para encontrarlo.-sonrío.
Era una mujer como de veinte o veinticinco años, alta, delgada, rubia y desprendía un olor a cigarro combinado con perfume.
-Bien, tomaremos lo que resta de la hora para presentarnos.-sonrío.- a ver tu, el chico guapo de los ojos verdes.-me señaló.
-Uhm, bien.-sonreí.-Mi nombre es Harry Styles, tengo 17 años, me gustan los libros, soy amigable y toco la guitarra.-sonreí.-Tengo un hermano gemelo.
-¿Estás soltero?.-una chica me miro.
-Si, pero.. Soy gay.-sonreí
-Demonios Harry, eres muy guapo para ser gay.-dijo la maestra
Reí y me sonroje.
-Pues lamento mucho decepcionarlas a todas las lindas chicas de esta clase, pero muerdo almohadas.
La maestra estalló en risa y toda la clase me aplaudió, me senté y Mel me sonrió.
La maestra continuó con las presentaciones, pero alcanzaron pocos chicos a presentarse. Algunas personas resultaban ser fascinantes pero otros eran simplemente eran básicos u otras chicas eran demasiado "sociales" pero otras eran interesantes, como Melanie.
-¿qué clase te toca, Harry?.- Dijo Mel
-Literatura.-hice una mueca.-¿Y a ti?
-Inglés.-suspiro.-Te veré después, o te hablo.
-Vale.-bese su mejilla y camine en dirección a la otra aula.
Visualice a Edward a lo lejos, se estaba besando con una chica a mi parecer muy linda.
Seguí mi camino, no quería interrumpir lo que sería una gran noche para ella..
-Harry.-escuche gritar a alguien.
Me volví y no pude evitar sonreír
-Louis, qué alegría encontrarte.
-Lo mismo digo, ¿qué te toca ahora mismo?.-toco la punta de mi nariz con su dedo.
-Literatura.
-¿En el 158-A?
-Si, ¿me acompañas?
-Eso te iba a proponer, no tengo clase.
Comenzamos a caminar, Louis era tan Hermoso, sus lindos labios me provocaban querer besarlos, pero tal vez Louis lo tomaría a mal.
-¿Harry?..
-Lo siento, me perdí.. ¿Dijiste algo?
-¿En qué estabas pensando?
-Uhm, en nada.-sonreí.-¿Qué era lo que decías?
-Que hemos llegado a tu salón.-río
-Oh, bien. Gracias Louis, te veo más tarde.
-Vale, cuídate. No hables con cualquiera.-sonrío
-Esta bien.-sonreí de vuelta.
-El aula me daba miedo, estaba al final de un pasillo, donde la siguiente puerta parecía que no la habían pintado en años. Solo había un par de chicas y un chico que parecía que estaba dormido.
Me senté a un lado de aquel chico y él me miró.
-¿Cómo te llamas?.-me dijo seco
-Harry, ¿y tú?
-Niall.-sonrío.-Gracias a dios llego un chico, esas chicas se la han pasado hablando de estupideces.
-¿Enserio? ¿Cómo que?
-No lo sé, penes, sexo, fetiches y cosas por el estilo.
-Niall, ¿acaso estás temblando?
-Tengo frío.-sonrío
-¿Estás asustado no?
-Un poco, creí que me violarían. Ve cómo se visten las cosas que hablan..-suspiro.-Pero llegaste y ahora estoy más tranquilo.
Reí bajo y mire a las chicas las cuales, una de ellas me miraba de pies a cabeza, mientras me guiñaba un ojo.
-Niall, ¿Puedo ver tu horario?
-Claro.-me dio su hoja y me sentí bien al saber que estaríamos juntos en todas las clases al igual que Mel, solo que ella no le tocaba literatura conmigo.
-Niall, creo que seremos buenos amigos. Nos toca juntos en todas las clases.
-Eso es genial.-sonrío
***
La jornada de clases había finalizado por fin, la cita con Louis se acercaba y yo no podía dejar de morder mis labios, estaba muy nervioso.
-Harry, vámonos a casa.-Edward tomó mi mano.
-No, espera Eddy.-me zafe de su agarre.-Tengo otras cosas que hacer.
-¿De qué hablas? Quedamos que nos iríamos juntos a casa.
-Si lo sé, pero quede con un amigo.
-¿Ya tienes amigos?
-Si, Eddy.-reí.
-Bien, entonces te veo en casa.-sonrío.-Con cuidado.
-Tu también vete con cuidado.-sonreí.-Te quiero.
-Yo también.-dijo casi en un susurro
Reí, la manera de demostrar su cariño me causaba gracia. Edward siempre había sido un chico muy malo pero conmigo era diferente y sé que jamás haría algo que me afectara.
-Hey guapo, ¿porque tan solo?.-me volví y vi un chico de ojos azules.
-Hola Louis.-sonreí
-¿Estás listo para nuestra cita? O más bien, la mejor cita de tu vida.-sonrío.
-Claro, ¿a dónde iremos?
-Es una sorpresa.
Ambos subimos a su auto, debía admitir que estaba nervioso, pero por
una extraña razón confiaba en el.
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Espero que les guste esta nueva historia, aún estoy trabajando en los demás capítulos, pero por el momento dejo el primer capítulo.
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