Diario de una adolecente

Reencuentro

Pasan los años, claramente habiamos llegado a 6to grado, nunca mas los habiamos visto. Esta estapa de mi vida había sido la mas dificil, habia sido todo un tema, me habia convertido en una persona
egoista, histerica, no me gustaba nada y me creia el centro del universo. Esto habia generado problemas con mis amigas y me fueron separando del grupo poco a poco. Habia decidido de una vez cambiar mi personalidad porque me estaba quedando sola, estaba haciendo que me odien.
Tenia decicido que queria un cambio rotundo en mi vida asi que decidi cambiarme de colegio. Creia que iba a empezar una vida nueva, con amistades nuevas, iba a hacer lo posible por cambiar.
Termina el año, 2013 estaba llegando y estaba por cursar 7mo grado. No me sentia muy bien por el simple echo de haber pensado en lo que me habia convertido.
Llega el primer dia de clases, estaba entuciasmada, me habia puesto el uniforme nuevo me habia levantado temprano, desayune y mis viejos me acomoañaron al acto de iniciación del colegio. Me sentia genial, por ser la nueva todos me había recibido genial, no me esperaba eso. Por suerte conocia a un par de chiacas que fueron las que me terminaron integrando al grupo que el que estoy actualmente. Pasaban los dias y venia todo genial, en ese entonces era obesa, asi que por un tiempo que me habian diagnósticado deprecion sin causa, no comía, habia bajado 9 kilos en 2 semanas. Me hicieron entrar en razon y sali adelante.
Me habia empezado a gustar un chico que iba al curso conmigo, pero nunca se iba a dar porque el era mi mejor amigo, por un tiempo
nos habianos distanciado, por el tema de que el tenia una noviecita y yo estaba celosisima.
Resulta que mas adelante este chico al fin se habia decidido a fijarse en mi. Hablamos todo ese año, pero nos peleamos.
Termina el año y comenzado 1er año de la secundaria vuelve a aparecer el primer amor de mi vida. Despues de casi 5 años, me volvi a cruzar a los mellizos. Habia quedado atonita. Los vi y me paralize. Era como volver a ver el sol brillar.
En ese entonces empeze a ir a la cancha a alentar al equipo que to admiraba, y me lo cruze a uno de ellos en la cancha, se me sento a lado y en una de esas cruzabamos miradas.