Capítulo 7: Fiesta

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*AL DÍA SIGUIENTE*

Narra ___:

Desperté gracias al pie de mi querida hermana que estaba justo frente a mi cara, lo quite y la moví bruscamente para que despertara, en verdad necesitaba hablar con ella.

Yo: Hey, tú niña, despierta -susurré moviéndola.

Alexa: ¿Qué ocurre? -contestó un poco adormilada.

Yo: Necesito hablar de algo importante contigo.

Alexa: ¿De qué se trata?

Yo: De...un chico -solté mientras lo recordaba.

Alexa: Wow, por primera vez en tu vida quieres hablar de chicos, esto es interesante, dime.

Ambas nos sentamos en la cama, frente a frente.

Yo: Pues mira, cuando entré a la escuela estaba decidida a conocer personas nuevas y socializar como siempre, así que en cuanto llegué a la primera clase me asignaron un asiento junto a un chico, pero no era cualquier chico, él tenía algo, como un toque especial en su mirada que llamó mi atención al instante, una vez que me senté junto a él me presenté y él igual, desde ese momento se comenzó a comportar muy lindo y simpático conmigo y pues, no puedo dejar de pensar en él ningún minuto -dicho esto solté un pequeño pero profundo suspiro.

Alexa estalló en carcajadas, haciendo que me molestara.

Yo: ¿De qué te ríes tonta?

Alexa: -recuperando el aire perdido- Es que, nunca pensé que mi hermanita se fuera a enamorar.

¿Yo enamorada? Imposible, nunca en mi vida lo he hecho. "Pero piensas en Alonso todo el tiempo". Quizá sea porque me llevo bien con él. "Claro, engañate ___, ambas sabemos que te encanta Alonso"

Tal vez mi mente tenga razón, tal vez me gusta Alonso, tal vez me enamoré de él.

Yo: Tienes...razón -admití.

Mi hermana aplaudió dando pequeños brincos en mi cama.

Yo: Bueno, ¿qué consejo me das?

Alexa: Pues solamente que sigas a tu corazón y no dejes ir a ese chico, porque aparte no es cualquiera -rió.

Yo: ¿A qué te refieres?

Alexa: Es ALONSO VILLALPANDO, todas se mueren por él...y TÚ eres una afortunada.

Yo: -ignorando lo mencionado y acostándome en la cama- Quiero ir a esa fiesta.

Alexa: Tranquila, eres una "niña buena" mamá te dejará ir.

Yo: ¿Tú crees?

Alexa: -asintió- Así que debes empezar a alistarte para que dejes boquiabierto a Villalpando -me guiñó un ojo.

(...)

Dicho y hecho, mi mamá aceptó dejarme ir a la fiesta, al parecer de ella exageró las cosas.

En mi habitación estábamos mi hermana y yo arreglándonos para la noche. Ella optó por una falda a la rodilla negra, flats y blusa blanca, con su cabello recogido en una coleta; mientras que yo usé una pantalón negro ajustado, unos converse lila y una blusa algo entallada color negra, con mi cabello suelto natural. No quise ponerme nada de maquillaje, a diferencia de mi hermana,

Esperamos a que diera la hora para salir en dirección a casa de mi prima, quien vivía solamente a 10 minutos de distancia.

(...)

Yo: ¡Hey Maite...ya llegamos! -dije gritando mientras pasaba entre la multitud.

Maite: ¡BIENVENIDAS CHICAS! ¡DIVIÉRTANSE!

Se alejó, cuando volteé no ví a mi hermana por ningún lado, genial, estaba sola. 

Me iba a sentar pero alguien me jaló, haciendo que mi cara quedara a pocos centímetros de la suya.

Narra Alonso:

Alan: ¡Tranquilo bro, ya aparecerá! ¿Tanto te urge conquistarla?

Yo: ...-estaba buscando a ___ entre la gente.

Alan: ¿Acaso te gusta?

Yo: ...-me puse nervioso ante esa pregunta- ¡Claro que no! Por favor, esa mosquita muerta nunca me podría gustar -reí cínico y nervioso.

En el momento en que volteé mi vista la ví, caminando, parecía un perrito perdido.

Yo: Llegó la hora, adiós hermano -me despedí y salí a su encuentro.

Toqué su hombro, haciendo que ella reaccionara y me viera a los ojos.

Yo: ¡___! Qué sorpresa, pensé que nunca llegarías.

___: Hola, no podía perderme de esta fiesta ¿o si?

Sonreí y la invité a bailar un rato. El baile fue levemente distante, apropiado para su personalidad y a decir verdad también para la mía, aunque no lo quiero aceptar.

Pasaron las horas, ella y yo seguíamos bailando, intercambiando sonrisas, miradas y uno que otro guiño de mi parte con un leve sonrojo en sus mejillas como reacción.

Dieron las 11 de la noche, la casa se veía cada vez más vacía, era mi oportunidad, le diré todo lo que siento.

La llevé a la planta alta, que estaba desalojada, sus manos sudaban, creo que pensaba que le haría algo depravado. Abrí la puerta de una habitación sin siquiera saber a dónde nos llevaría. Encendí la luz y observé que estaba repleto de abrigos o chaquetas, deduje que era el armario.

Miré a ___ a los ojos, ella sonreía, pero nerviosa. Le tomé de la barbilla haciendo que nuestras miradas chocaran, le sonreía aún más y la acerqué a mi, unos milímetros era los que separaban a nuestros labios. Ella no supo qué hacer, solamente cerró los ojos, provocando que riera en mis adentros. Desvié mi boca hacia su oído y susurré "Me gustas demasiado". Recuperé mi postura, tocando su frente con la mía, ella sonrió con un brillo en los ojos; bajé mis manos a su cintura y la acerqué a mi, acto seguido la besé.

Duró pocos segundos, pero juro haber sentido fuegos artificiales sobre mi cabeza; nos separamos y ella sonrió mientras decía "También me gustas".


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Hi!!! 

Nos tardamos mucho en subir capítulo, pero ¡ya está! Espero que lo disfruten, comenten, voten & compartan. 

#IFEELALIVE

Alonso Rubio :3

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-Väniä Jäng



¿Apuesta, juego o realidad? || Alonso Villalpando & túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora